viernes, 30 de marzo de 2012

La edad de la inocencia - Capítulo 4




Las nodrizas trataban de secar el cabello de jaejoong, pues al haberse quedado paradas bajo la lluvia cuando no se atrevían a decirle a la madre de jaejoong sobre la travesura de su hijo se habían mojado y jaejoong corrió la misma suerte al igual que el conde.

-Esta bien….no es…necesario…- jaejoong quería que se detuvieran, con un pañuelo cada una intentaban secar el hermoso y largo cabello, estaban sentadas una cada lado quedando jaejoong en el centro, yunho frente a el y su otra nodriza estaba al lado izquierdo de yunho guardando distancia del.

Yunho solo sacudió un poco su cabello cuidadosamente para limpiarse del agua contemplando como las nodrizas cuidaban de jaejoong.

Jae se avergonzaba al no poder detenerlas bajando la mirada ante los ojos observadores de yunho sonrojándose levemente, tenía el rostro húmedo pues el agua había alcanzado a mojarlo, yunho no podía creer que aun así con el agua en su rostro y sus cabellos mojados jae mantenía esa hermosura natural.

-No le agradecí…disculpe...Usted ha sido tan amable…gracias…- jae dijo llevando su mano a su rostro tratando de limpiar su mejía que estaban húmedas, Yunho sonrió.

-Es un placer…- dijo introduciendo una de sus manos en su bolsillo de su pantalón sacando un pañuelo ofreciéndoselo a jaejoong.

Jae lo miro a los ojos y miro el pañuelo que yunho le tendía para que el lo tomara pero no sabía si aceptar o no.


-Tómalo…-Yunho le indico y jae volvió a mirarlo a los ojos, sus nodrizas que con afán trataban de secar su cabello se habían detenido y jae sin saber que hacer no quería ofender al conde solo se le ocurrió mirar a la nodriza que estaba al lado de yunho y ella asintió con su cabeza indicándole que podía tomar el pañuelo.

Jae estiro su mano, tomo el pañuelo azul de yunho y se lo llevo a su mejía derecha secando la humedad.

-Gracias…- dijo sintiendo muy cerca el olor que emitía el pañuelo que era el aroma de yunho impregnado en el pañuelo, Jae no pudo evitar mirar al conde.

Yunho sonrió y al ver a las 2 nodrizas observarlo se le ocurrió tratar de molestarlas.

-Pero ustedes….yo las recuerdo...-Yunho dijo mirándolas, ellas volvían a intentar secar el cabello de jaejoong, mientras trataban de disimular al recordar aquel día, solo le dieron una sonrisa tímida y alejaron su mirada del conde.

jaejoong dio una mirada de complicidad a yunho al ver como sus nodrizas quedaban avergonzadas al recordar la tarde de ayer, yunho por su parte le guiño un ojo y jae no pudo evitar sonreírle pero rápidamente llevo el pañuelo que tenia en su mano hacia sus labios para tapar aquella sonrisa.

-Sr.Yunho....su pañuelo...Temo que...- dijo jaejoong al ver que el pañuelo de yunho estaba húmedo por haber secado su rostro.

-No te preocupes...-Yunho le interrumpió -…Tómalo como un obsequio…

-No…se lo devolveré solo d….

-No por favor acéptelo…- yunho le interrumpió

-Pero…- jaejoong estaba confundido.

- Insisto…

-Esta bien, Gracias…-Jae agradeció a yunho por su amabilidad esperando no estar haciendo algo incorrecto.

Finalmente las nodrizas dejaron en paz a jaejoong una vez que terminaron de secar su cabello y jaejoong les agradeció por haberlo hecho.


-Lamento haber estropeado su plan de ir caminando bajo la lluvia….imagino que ese fue su propósito ya que no trajo carruaje…-yunho dijo observando la reacción de jaejoong quien no pretendía iniciar la conversación tal vez por las 3 mujeres que lo vigilaban.

-Que….- en realidad el no imaginaba que podría llover solo quería fastidiar un poco a sus nodrizas y así poder tenerlas un poco mas lejos de lo normal ya que ellas se cansaban rápidamente cuando tenían que caminar una gran distancia.

-Me gusta caminar…- dijo jaejoong mirando hacia la ventanita que había en la puerta del carruaje - … se que eh sido imprudente al no imaginar que esto podía pasar…-alejo su mirada de la ventana al ver que la lluvia cada vez era mas agresiva y se dio cuenta de lo mal que pudo haberlo pasado si yunho no hubiera estado ahí para ayudarlo -...lo siento…-jae se dirigía a la nodriza que estaba sentada al lado de yunho.

-Es incontrolable verdad?…-Yunho susurro a la nodriza que estaba a su lado acercándose un poco pero sin quitar la mirada en jaejoong.

Jae pudo escuchar perfectamente lo que yunho le dijo a la nodriza y se sonrojo llevo su mirada hacia sus manos las cuales tenían el pañuelo que yunho le había obsequiado.

-La verdad Conde es un placer para mi cuidar de jaejoong suele hacer algunas travesuras pero lo queremos mucho y siempre terminamos perdonándolo – respondio la nodriza pues ella era la encargada y responsable del cuidado de jaejoong por su experiencia y por ser la mayor de las 3.

Jaejoong al escucharla la miro sin poder esconder la alegría que las palabras de su nodriza le causaban, yunho quedo mas que convencido que jaejoong era realmente un ángel por que si no estas mujer no se hubiera expresado con tanto cariño de el.

-Ya veo…- yunho soltó, al escuchar las palabras de la señora.

-Usted…piensa quedarse a vivir por aquí?…- jaejoong pregunto curioso.

-Bueno por temporadas…así será…

-Debe vivir en un palacio señor…

-Si…uno muy grande que suele hacer sentir solo a una persona - yunho miro hacia la ventana ahora.

El carruaje había aumentado su velocidad pues algo de neblina esta cubriendo ya el camino y tenían que apurarse, yoochun se abrasaba a si mismo por el frió por el terrible frió que estaba haciendo.

Las nodrizas se apoyaron con una de sus manos hacia la pared del carruaje sujetándose por lo rápido que iba y con su otra mano sujetaban a jaejoong de su brazo.

La otra nodriza la que estaba al lado de yunho hizo lo mismo se apoyo en la pared y su otra mano la coloco en el asiento para tratan de no caerse si el carruaje daba un movimiento brusco que pudiera hacerla perder el equilibrio, mientras yunho permanecía calmado.

La neblina aumentaba cada vez más, cuando faltaba poco por llegar a la mansión del Sr.kim el conductor decidió apresurarse así que azoto con más fuerza a los caballos.

Las nodrizas por mas que quisieron no pudieron sujetar bien a jaejoong cuando el carruaje se detuvo bruscamente, jaejoong cayo, su rostro quedo pegado al pecho de yunho, solo unos segundos basto para que jaejoong abriera sus ojos y se pudiera dar cuenta que estaba sobre el conde alejo su rostro poniendo sus manos sobre el pecho de yunho alzando la mirada hacia el, yunho tenia sus manos sujetando los brazos de jaejoong.

Las nodrizas en el suelo no pudieron mantenerse en el asiento ellas trataban de levantarse sin imaginarse lo que había ocurrido con jaejoong.

-Estas bien?…- yunho susurro a jaejoong quien lo miraba .

-…si...creo que si…- dijo retirando rápidamente sus manos del fuerte pecho de yunho y se sonrojo pues no se había dado cuenta, había actuado solo por instinto al notar que su rostro esta sobre el pecho de yunho y le pareció sentir lo fuerte y musculoso que era a pesar de la ropa que tenia puesto, eso lo hizo avergonzarse mas.

Yunho mantuvo sus manos sujetando a jaejoong por los brazos pues el carruaje empezó nuevamente a moverse.

-Te ayudare…-yunho dijo llevando a jaejoong hacia su asiento mientras jaejoong trataba de no mirarlo.

-Gracias…- dijo cuando yunho lo soltó dejándolo en su asiento.

Las nodrizas aun en el suelo estaban sentadas sin poder levantarse por que el carruaje estaba en movimiento, yunho al verlas les dio la mano para poder ayudarlas y jaejoong también lo hizo quedando todos nuevamente es sus sitio, jaejoong aun avergonzado no quería mirar a yunho.

-Lo siento…seguramente algo debe haber asustado a los caballos…-yunho dijo disculpándose.

El carruaje finalmente se detuvo yunho bajo dejando la puerta abierta ayudando a las nodrizas a bajar, ellas corrieron hasta estar a salvo de la lluvia y jaejoong no se había movido de su asiento pero al ver que solo faltaba el se paro y tuvo que dejar que yunho le ayudara a bajar, sin mirarlo puso su mano sobre la de yunho y bajo.

Yunho quien antes de bajar se había puesto su capa negra envolvió a jaejoong cubriéndolo de la lluvia llevándolo hasta la puerta de la casa donde las nodrizas lo esperaban.

Jaejoong sentía que no podía mirar a yunho al rostro.

-Gracias…-dijo yendo al lado de sus nodrizas sin mirarlo.

Yunho sonrió al ver el comportamiento de jaejoong y alzo su mano en forma de despida hacia las nodrizas quienes asintieron con su cabeza y entraron a la casa junto a jaejoong.

Yunho subió a su carruaje donde encontró a yoochun que ya estaba dentro, el carruaje empezó ahora a moverse en dirección a la casa de yunho.

Cuando llegaron a la casa de yunho pidió a su nona que por favor sirviera algo caliente a yoochun pues la había pasado muy mal, yunho le tuvo que prestar algo de ropa pues la que el tenia se había llegado a mojar.

-Lo siento mucho….-yunho se disculpo con su amigo una vez que este estuvo con mejor semblante.

-No te preocupes ya estoy mejor…- dijo yoochun tratando de sacar de su mente el recuerdo de aquella terrible tarde bajo la lluvia.

-Será mejor que te quedes…esta lluvia no piensa calmarse talvez mañana este mejor….-yunho insito a su amigo a quedarse.

-Esta bien…-Yoochun acepto rápidamente pues no pensaba salir otra vez y estar expuesto a sufrir aunque claro estaba vez iba irse dentro del carruaje, de todas manera prefirió quedarse esa noche.

-Y dime que tal la pasaste junto a jaejoong…ahora que pudiste conocerlo y hablar con el…

-Comprobé que es totalmente diferente a aquel hombre…si no hubiera conocido a su madre podría decir que jaejoong no es hijo de el pero no puedo pensar eso de la Sra.Kim.

-mm…pero…jaejoong…no te gusta…

Yunho sonrió al darse cuenta que por ahí iba la pregunta de yoochun.

-Ya te dije por que estoy acá y cual es mi propósito…

-Señor esta listo el cuarto…-La nona le aviso a yunho para que yoochun pudiera subir a descansar.

-Gracias...- yunho dijo y ella los dejo otra vez solos.

-Mañana iré a ver a los hombres de los que te mencione tratare de ubicarlos – yoochun estaba listo para empezar - pero antes me daré una vuelta por la “Casa de los Esclavos” así era como le decían al lugar donde tenían a los esclavos que iban hacer vendidos o mejor dicho subastados.

Un lugar que ah simple vista te daba una imagen agradable pues en la parte superior se encontraba la residencia de los traficantes, donde el mobiliario y la decoración daban una bienvenida a los compradores. En los pequeños habitáculos de la planta baja se encontraban los esclavos, apiñados como ganado, esperando el momento donde serian llevados a la plaza y serian subastados.

-Te lo voy agradecer, pero antes te daré unas cuantas barras de oro así se tésera mas fácil poder convencerlos, al menos eso espero…- yunho dijo creyendo que de esta manera podía asegurarse aunque sabia que si ellos no estaban de acuerdo con su idea de nada iba servir el oro.

-Tal vez…si será mejor…pero espero que no sea necesario…- yoochun sabia que nada perdía intentando asegurar el trato con algo de oro.

-Buenos mejor será que descanses, yo mañana viajare no puedo ausentarme mucho del palacio debo permanecer al menos una semana y ver como están las cosas, así que te encargo amigo esa dura tarea.

-No…esta bien...sabes que te apoyo…- yoochun dijo levantándose listo para ir a descansar ya que mañana iba ser un día agotador no solo por que tenia que buscar con mucha cautela a aquellos hombres que podían apoyarlos sino que tenia que pasar y ver aquel lugar donde vendían a los esclavos.

Yoochun entro en el cuarto que le habían preparado y sin más se tiro sobre la cama cansado.

Yunho al igual que su amigo entro en su cuarto, dispuesto a cambiarse cuando llevo sus manos hacia los botones de su camisa recordó el incidente en el carruaje con jaejoong arrancándole una sonrisa por el comportamiento de jaejoong después de lo ocurrido.

Yunho se sentó en su cama abriendo un cajón del la pequeña mesa que tenia al lado y saco el porta retrato que había traído, el sabia el daño que le causaba recordarla, ahí estaba la foto de la bella mujer que el amo pero que un trágico episodio llevo a que los amantes nunca estuvieran juntos.

Yunho guardo nuevamente esa foto en el cajón, el sabia que mientras mirase esa foto el no la olvidaría y así se mantendría fiel a ella a amarla aun si ella ya no estaba mas.

Se dejo caer sobre su cama pues ahora que sabía que tenía que ir a su palacio de conde ahí el tenia todos los recuerdos de ella de los cuales se rehusó a deshacerse pero que muchas beses le podían causar daño.

**
En la casa del sr.kim jaejoong se refugio en su cuarto sus nodrizas le ayudaron a cambiarse para que descansara.

Jae estaba avergonzado por lo sucedido con el conde y no se había dado cuenta que había olvidado a keita ni siquiera ese nombre venia a su mente, el estaba muy preocupado por lo que el conde podría pensar de el.

Se echo algo de agua en su rostro pues sentía que le quemaba y se dispuso a dormir estaba cansado.

Mientras en los cuartos de los esclavos el enfrentamiento entre una de las esclavas y la esclava blanca había empezado, la esclava negra acusaba a junsu de haber roto el hermoso jarrón de la Sra.kim y junsu trataba de defenderse ante la mirada del Sr.kim mientras jaejoong y su madre ignoraban lo sucedido.

Por más que junsu negaba haberlo hecho cosa que era cierto no podía contra tantas personas que lo acusaban, siempre había sido odiado por las esclavas negras quienes lo despreciaban y trataban de dejarlo mal, su madre poco podía hacer por defenderlo ahora que la sra.kim no estaba presente para ayudarla.

-Si no fue junsu…quien lo rompió…- el Sr.kim muy molesto exigía saber.

-Fue la esclava blanca…-decían las esclavas

-No…se lo juro que mi hijo no fue...- la madre de junsu suplicaba al sr.kim que no creyera en las demás esclavas, ya que estas no perdían oportunidad para culpar a junsu.

El Sr.kim molesto por lo sucedido no soportaba mas los problemas que estaba generando junsu siempre era el, siempre algo tenia que hacer mal el único lugar donde podía estar bien era en la cocina pero haber roto aquel jarrón que era un objeto valioso el Sr.kim no podía permitir que esto vuelva ah suceder.

El sr.kim llamo al guardián de los esclavos.

-Sepáralo, mañana ya sabes donde llevarlo y ahí que se encarguen de venderlo…no lo quiero mas aquí…- el Sr.kim dijo furioso.

-No!!...- la madre de junsu grito – No...- dijo abrazando a junsu quien junto a ella lloraba ante su impotencia nada podían hacer.

Las demás esclavas felices pues habían logrado deshacerse del, era lo que siempre habían querido.

El guardián tomo a junsu encerrándolo en uno de los horribles cuartos donde sabían poner a modo de castigo a los esclavos, ahí junsu tenia que pasar la noche ya que al amanecer seria llevado a la “casa de los esclavos” donde Todas las tardes tenía lugar la subasta; se exponían grupos de esclavos.


**
Por la mañana yoochun salio temprano rumbo a cumplir la misión del día despidiéndose de su amigo esperando poder verse en unos días y poder informarle como le fue.

-Yo también estoy de salida nona…-yunho le aviso.

-Tan pronto ya regresa señor…- la nona se entristeció pues no le agradaba que el fuera al palacio lo quería lejos de ahí donde el no pueda sufrir recordando a su amada.

-Tengo que ir no puedo dejar todo nona…pero estaré aquí en unos días…-yunho le dejo saber, aunque ella ya lo sabia y si yunho estaba ahí ahora era por que ella le había insistido que comprara aquella mansión y se alejara un poco de su palacio para que el pueda despejar su mente, aunque su verdadero propósito era que yunho encontrara alguien a quien amar.

-Esta bien señor que tenga buen viaje…- la nona se despidió.

Yoochun ya había recorrido buen camino y antes de llegar a las mansiones de los hombres que el quería ver decidió pasar primero por la casa de los esclavos.

Acercándose ya a la plaza se detuvo al ver que mucha gente estaba ahí aglomerados, bajo de su carruaje entrando entre la multitud.

En grupos de cinco, se les unía, con cadenas sujetas a las argollas de los cuellos, a un largo y pesado tronco de árbol que, puestos en fila, los esclavos esperaban ser subidos uno por uno para ser expuesto y ver quien daba mejor precio por ellos.

La gente alrededor conformada por hombres de la nobleza miraba a las esclavas que eran subastadas como si fueran un objeto que podría calmar su lujuria.

De la manera más vergonzosa el que subastaba a las esclavas decía las condiciones en las que estas se encontraban para después despojarlas de algunas de sus prendas para que así los hombres presentes pudieran apreciar mejor lo que estaban por comprar.

Sin poder soportar más yoochun empezó a alejarse de ahí para subir a su carruaje e ir al encuentro con los hombres que deseaba ver.

-Ahora nos acaba de llegar una esclava….blanca….- dijo el hombre de la subasta a la multitud, yoochun al escucharlo se detuvo.

-Tráiganlo…- dijo aquel despreciable hombre – haber quien quiere llevarse esta hermosa esclava…

Yoochun volteo y pudo ver a 2 hombres que sujetaban a una mujer blanca con ropa de esclava, no podía creer lo que veía.

-Esta esclava…sabe cocinar…incluso sabe leer…les será de mucha utilidad créanme…además es virgen…- el hombre intentaba animar a los presentes a comprarla, la multitud murmuraba pues no siempre veías una esclava blanca.

Yoochun se acerco para mirar más de cerca a la pobre esclava quien estaba muy asustada y con lágrimas aun en sus mejillas, yoochun sintió más rabia de la que ya le producía aquellos actos.

-2 barras de oro…- un hombre ofreció mirando a junsu lascivamente.

-Yo…3 barras de oro….- los hombres fueron ofreciendo por la esclava, yoochun al verlos se enfureció pues notaba muy bien en la mirada de aquellos hombres cual era el propósito de obtenerla, miro a la esclava que se mostraba mas asustada y no pudo evitar sentir pena por ella, si uno de esos repudiables hombres la compraban su vida iba ser un infierno.

Los hombres que sujetaban a junsu lo voltearon dejándolo ahora de espaldas y rasgaron su ropa dejando su espalda descubierta, mostrando su blanca piel.

-4 barras de oro…- otro hombre ofreció y el subastador esperaba una oferta mas para entregar a junsu a su nuevo dueño, yoochun sentía cada vez más furia.

Ahora aquellos hombres pretendían romper aquella falda que cubría la parte baja de la esclava para exponerlo, cuando yoochun vio lo que pretendía cerro sus manos en puño furioso.

-Yo ofrezco 7 barras de oro por la esclava…-Finalmente soltó yoochun, esperando que yunho no se enfadara con el destino que le dio al oro que el le entrego.

-Vendido!!….- dijo el hombre pues nunca habían ofrecido tanto por una esclava, envió a los 2 hombres que entreguen a yoochun la esclava blanca.

-Una buena compra señor- algunos hombres se acercaban a yoochun para felicitarlo- espero poder darle una visita…- dijo uno de ellos sonriendo.

Yoochun no se había detenido a pensar lo que hacia, lo único que tenia en mente ahora era mantenerla en su casa juntos a sus esclavos a los cuales el daba un mejor trato pues les pagaba un sueldo como a cualquier empleado y no los maltrataba ni siquiera se aprovechaba de alguno de ellos odiaba a quienes lo hacían.



7 comentarios:

  1. waaaaaaaaaaaaaa...ya viene el YooSU!!!!

    graciaaaaaaaaaass!!

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  2. Oooooooooh!!! Por fin el YooSu ya esta juntito siiiiiiii YooSu love <3 <3 <3 mmmmm Yoochun tu como siemore tan lindo, por eso es que todas te amamos n.n

    ~sigue leyendo~ (°^°)»

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  3. chunnie compro a suu,no quiero ni pensar lo que le hubieran hecho esos hombres.

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  4. menos mal que yoochun la pudo comprar si no pobre de su que fuera de el con esos hombres puercos y pervertidos

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  5. Pobre Junsu llo an separado de su madre que poca verguenza las esclavas, siendo una persona que tiene poca belleza por fuera eso no los puedo cualpar pero por lo poco que les queda almenos a de cuidar su belleza interna.
    Junsu estara bien con Yoochun ?¿?

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