sábado, 31 de marzo de 2012

La Edad de la Inocencia - Capitulo 18 - Parte 1




POEMA - Lo que me haces sentir (Pensamientos de Yunho)

Nuevamente……
Me ha tocado verte
Alejarte de mí.

¿Puedes imaginar cuanto dolor siento con esto?
¿Cuánta falta me haces?
No pasan ni cinco segundos
Y siento que dejo de respirar
Si no te encuentro a mi lado
Siento que parte de mi corazón
Se quiebra al verte ir así…………. Sin mí.

Nuevamente……..
Estoy aquí sin tus caricias,
Sin esa bella sonrisa que es solo MIA
Y que opaca a cualquiera que este a tu lado

Otra vez………
Me encuentro sin tu respiración agitada en mi pecho
Sin tu calido abrazo, sin tus besos
Sin aquel inocente rostro
Diciéndome “te amo”,
Aquel que ilumina mi existencia
Y hace más llevadera mi vida

¿Cómo pude llegar a amarte de este modo?
¿Cómo te llevaste mi amor tan fácilmente?
¿Cómo es que mi corazón puede sentirse muy tonto
De haberse rendido de esa manera a tu inocencia,
Tu calidez y la dulzura de cada palabra tuya?
¿Cómo pudiste entrar de ese modo a mi corazón
Que en algún momento pensó en dejar de latir y de amar?

Solo verte…….
Me provoca poseerte,
Llegar a tus labios a tu cuello,
Lograr la sensación de ya no poder más
Y llegar a poseer la brillantez de tu alma pura,
Dejar tus huellas impresas en mí
Y lograr marcarte como mió.

Es por eso……
La sola idea de pensar
En que tu padre intenta alejarte de mi lado
Me duele, me aterra y me descontrola
Saber que intenta que otro hombre
Pose sus ojos sobre ti
Me llena de ira, de cólera
Pero……...
Muy en el fondo de temor
Por que…….
¿Quién no podría enamorarse de ti,
Si eres el ser mas perfecto que conozco?
¿Quién no podría caer rendido ante tu belleza?
Me carcomen los celos de solo pensarlo
Sin embargo…..

Siento que no es lo único que tendremos que afrontar
La angustia también pone en peligro nuestra felicidad
Sobretodo la tuya……
Y eso es algo que me preocupa también,
No quiero que nadie te haga daño
No quiero que nadie se atreva a hacerte llorar
Pero…….

Se que si tan solo te enteras de lo que dice la gente
Podrás hacerlo,
Tus ojos se llenaran de lágrimas
Solo de sentirte culpable de no darme un hijo

Por eso….
No quiero que vayas a esa fiesta
No quiero que expongas así tu felicidad
No quiero que te hieran
Ni que pongan en peligro tu tranquilidad.

Por ahora
Solo puedo prometerte algo….
Así hallan obstáculos,
Así todos se interpongan en nuestro amor
Te juro que lograre
Que no vuelvas a tener esa tristeza en tu rostro,
Cada vez que veas el amanecer,
Por que lograre que vuelvas a mi lado
Y te quedes conmigo hasta el final de nuestros días
Hasta que nos hagamos viejitos
Y veamos a nuestros hijos crecer

Por que confió en que será así
Por que confió en que nuestro amor lo lograra
Solo debes confiar en mí
Y esperar un poco más
¿Crees que podrás ?...............

By: Peregrina(Pamin)


Muy temprano por la mañana Jaejoong se había despertado, hacia como 2 días que se había separado de su esposo y ansiaba mucho que su madre pronto le dijera cuando iba volver a verlo; esa mañana después de haber desayunado se había recostado sobre uno de sus sillones con la mirada en el techo de su cuarto, el único consuelo que lo ayudaba a soportar las horas y los minutos que permanecía lejos de él eran los recuerdos de las dos noches ya vividas a su lado, en sus brazos.

En su rostro se dibujaba una sonrisa en cuanto recordaba los momentos pasados con Yunho y pronto un leve sonrojo coloreaba su mejilla al venir también el recuerdo de las caricias y los besos que se habían dado.

Las nodrizas hacendosamente iban alistando la ropa de Jaejoong, como si él fuera a vestirse aquel día pues al estar todo el tiempo dentro de su habitación él prefería tener puesto su camisón de dormir, no se sentía con ánimos de cambiarse si solo iba a estar encerrado dentro de su habitación, pero sus nodrizas siempre intentaban convencerlo de ponerse algo más que una simple bata.

La Sra. Kim no había tenido éxito en encontrar la carta de la cual el conde le había mencionado, lo único que le quedaba hacer es preguntar al joven que recibía la correspondencia y que entregaba a su esposo, creía que tal vez el podía ayudarle y decirle si había alcanzado a ver aquella invitación que tanto estaba buscando pero de la cual no se atrevía a preguntar a su esposo pues ella debía de fingir no saber nada sobre esa invitación.

Ya había pasado unos días desde que se entero que aquella invitación pudo haber llegado a su casa, necesitaba saber si realmente había llegado a las manos de su esposo o no; camino por el pasillo saliendo del salón en busca del esclavo del cual pensaba obtener información.

Antes de cruzar la puerta la Sra. Kim logro ver a varias de sus esclavas dirigiéndose hacia las escaleras, pero lo que le llamo la atención fue que ellas sostenían en sus manos unas cajas, se apresuro para alcanzarlas.

Al verlas ya subiendo las escaleras, ella también subió.

-Deténganse…-Dijo mientras las alcanzaba -…Que es lo que llevan ahí?…-Pregunto cuándo ellas se detuvieron y voltearon a verla.

-Señora…nosotras…no sabemos…

-Qué?...entonces a donde lo llevan …-Dijo observando las cajas en las manos de sus esclavas, y entendió que solo podía ser ropa lo que había dentro.

-Al cuarto de Jaejoong…su esposo nos pidió que lo llevemos ahí…

-Donde?…-Respondió mirándolas pues se sorprendió al saber que lo llevaban a la habitación de su hijo.

-Querida…-Dijo el Sr. Kim desde lo alto de la escalera, ella levanto su mirada -…Ustedes lleven eso a donde les pedí…-Ordeno el Sr.kim a sus esclavas quienes se movieron rápido al escucharlo, subieron las escaleras mientras la Sra. Kim subía también pero despacio.

Cuando alcanzo a su esposo y dejo un beso sobre su mejilla logro ver que el traía en una de sus manos un sobre y por el diseño de aquel sobre se pudo dar cuente que se trataba de la invitación que tanto había estado buscando.

-Por qué…ordenaste a las esclavas llevar…

-Querida por favor ven…lo sabrás en cuanto estemos en la habitación de Jaejoong…-Contesto el sin dejarle terminar su pregunta.

Aun recostado sobre el sillón Jaejoong observaba su mano la cual había sido lastimada la última vez que se vio con Yunho, pero los rasguños en sus dedos ya habían desaparecido por completo como también la mancha que había tenido en el costado de su cuello.

Continúo observando sus manos sin prestar atención al llamado a su puerta, una de sus nodrizas se apresuro a abrir creyendo que se trataba de la Sra.Kim, pero al abrir la puerta se encontró con 3 jóvenes esclavas quienes ingresaron a la habitación trayendo en sus manos las bellas cajas.

-Ustedes…qué?- Dijo la nodriza de más edad al verlas entrar, pues las esclavas ya dejaban sobre el piso las cajas.

-Orden del patrón…-Una contesto, al escucharlas Jaejoong volteo su rostro y las vio, al ver lo que habían dejado en su piso se apoyo con sus manos y se sentó, miro a su nodriza esperando que ella le explicara lo que pasaba, pero solo encontró en su mirada la misma incertidumbre que a él lo aquejaba.

Pronto su padre cruzo la puerta de su habitación mientras las esclavas se iban retirando y las nodrizas se iban acercando a una prudente distancia y saludaban al señor Kim.

Al ver a su padre Jaejoong se levanto rápidamente, su madre entro también a la habitación y entonces el poso su mirada sobre ella.

El Sr.Kim una vez dentro de la habitación de su hijo lo miro rápidamente para luego acercarse a las cajas sobre el piso.

-Bien…-Dijo mirando a su esposa -…hemos sido invitados a una reunión muy importante…-Dijo mostrándole la carta, la cual ella tomo rápidamente -…y eh decidido que iremos…

-Es hoy!!…-susurro la Sra. Kim mientras leía; su esposo se había encargado de ocultar aquella invitación de ella para evitar que pudiera encontrar alguna excusa y evitara que Jaejoong fuera.

-No pretenderás qué?…-Dijo ella mirándolo, sabiendo su intención -…Jae…no irá…-Dijo acercándose a su esposo.

-Por supuesto que si…

-No!…no puedo permitirlo…-contesto despacio para que solo el pudiera escuchar, mientras Jaejoong se sentaba despacio pues había creído que no había llegado la invitación a su casa ya que no le habían mencionado antes.

Recordó las palabras Yunho donde le pedía que se negara a ir a la fiesta en caso de que la invitación llegara; miro a su padre, debía negarse, debía intentarlo al menos para poder ver a Yunho cuando sus padres estén en la fiesta esa noche.

-Lo siento…pero yo no deseo presentarme en…

-Iras quieras o no…-Su padre se apresuro a decir antes que el pudiera terminar de hablar -…así que no intentes negarte, tu aras lo que te ordene…-Dijo muy serio el Sr. Kim.

Al escucharlo Jaejoong apretó sus labios, la sensación de impotencia ante las palabras de su padre lo invadió, no desea ir ah esa fiesta si eso le iba costar no estar cerca de Yunho aquella noche, ansiaba tanto verlo, pero no se sentía capaz de enfrentar a su padre, además que bien sabia que sus esfuerzos iban a ser en vano, su única esperanza era su madre pues era la única que podía ayudarlo.

-No hay más que decir…así que prepárenlo y vístanlo -Dijo el Sr. Kim mirando a las nodrizas y se volteo para salir de la habitación.

-Espera…-La Sra. kim dijo saliendo tras de él.

El entro en su habitación, su esposa le dio el alcance a unos escasos segundos de diferencia y cerrando la puerta lo enfrento.

-No…no puedes hacerle eso a tu hijo…-Dijo ella sorprendida por la actitud de su esposo.

-Dime por qué no debe de ir?...-Contesto él a modo de pregunta -…dame una razón…

-Una razón?…hay miles de razones para que Jaejoong no asista…pero la más importante es la humillación a la que será sometido si va…

-No veo por qué…es el conde quien está envuelto en el escándalo…y mi hijo ya no está a su lado…es libre y debe acompañarnos sin temor, no veo el por que ocultarlo….

-No!!!...-Contesto ella pues debía encontrar la manera de convencerlo de dejar a su hijo fuera de esa fiesta -…Si tienes un poco de piedad por tu propio Hijo…le evitaras pasar ese mal rato…

-No…querida…el ira con nosotros y no hay mas que decidir…-Contesto sin la mas mínima intención de complacer a su esposa en lo que le pedía; la hubiera complacido en otro momento pero su afán por herir al conde era mas fuerte, quería darle en donde mas le dolía y sabia bien que llevando a su hijo a la reunión donde el conde iba asistir podía ser un duro golpe al orgullo del conde, y el desea verlo sufrir.

La Sra. Kim respiro Hondo, trato de clamarse pues debía pensar la mejor manera de solucionar el problema ahora, sabia que su esposo no iba desistir de llevar a su hijo a la fiesta así que solo le quedaba una cosa por hacer.

-Esta bien…querido, pero solo puedo permitirlo con una condición...-Al escucharla el la miro.

**

En la habitación las nodrizas ayudaban a Jaejoong quien ya estaba en la tina de baño, dos de ellas dejaban caer por sus brazos las esencias, mientras la 3era iba ayudándole con el cabello.

El estaba impacientado por que su madre aun no regresaba y sus nodrizas ya estaban cumpliendo con la orden de su padre, tenia la esperanza de que ella pronto volviera y le diera la noticia de que siempre si su padre desistió de llevarlo y así podría encontrarse con Yunho esa noche.

Al terminar de asearse salio envuelto en su bata de baño mientras se sentaba a esperar mirando hacia la puerta como si su madre fuera a entrar en cualquier momento.

Sus nodrizas iban sacando la ropa que había dentro de las cajas, una de ellas fue por Jaejoong para poder empezar a vestirlo, el negó con su cabeza tratando de evitar que lo vistieran pero sabia que no podía hacerles eso a ellas, ya que solo seguían las ordenes de su padre, después de unos segundos de haberse resistido a levantarse se levanto.

Antes de dejar caer la bata de baño la puerta de su cuarto se abrió, su madre entraba a su habitación, las nodrizas se detuvieron y miraron a su patrona quien ya se acercaba a su hijo.

-Lo siento cariño…pero debes ir con nosotros…-Ella le dijo.

-Que?...No…-Susurro negando con su cabeza pues sus esperanza de que su madre lograra persuadir a su padre se habían esfumado, la tristeza se incremento en su corazón y su madre pudo ver el dolor en su mirada.

-Escúchame…-Dijo ella atrayendo la mirada de su hijo - …lo veras….te prometo que estarás a su lado…solo confía en mi…-Susurro la Sra. Kim sosteniendo el rostro de su hijo, Jaejoong la miro y sintió la calidez confortante de sus palabras las cuales tranquilizaban a su herido corazón, asintió con su cabeza pues ahora tenia una luz de esperaza.

-Debo irme ahora…-Susurro dejando de sostener el rostro de su hijo -…por favor continúen…-Dijo a las nodrizas para que se acercaran y cambiaran a su hijo, ella abandono la habitación pues debía ir y cambiarse también.

Las nodrizas le quitaron la bata de baño y empezaron a vestirlo con el corsé que había dentro de una de las cajas, para después vestirlo con el hermoso vestido que sacaron de la otra caja, su padre se había encargado de comprar un vestido que resaltaras mas su belleza.

Tras varios minutos de haber empezado ah cambiarlo Jaejoong estaba totalmente vestido y solo quedaba arreglar su cabello el cual fue cepillado por una de sus nodrizas quien coloco un hermoso adornado sobre el a modo de sombrero.

Su imagen era hermosa y era de esperarse que su presencia en aquella fiesta no fuera ser opacada por nadie pues iba ser difícil que alguien no volteara a mirarlo.

Mantuvo su mirada frente al espejo cuando de pronto la puerta de su cuarto se abrió, las nodrizas se separaron de él y se pusieron en fila al ver que se trataba del Sr. Kim quien ingresaba a la habitación.

-Déjenme un momento solo con el…-Ordeno a las nodrizas y ellas obedientemente salieron de la habitación.

Jaejoong se extraño pues su padre normalmente no solía ingresar a su habitación para conversar con él y menos pedirle a sus nodrizas lo dejaran solo, pues él era un hombre muy estricto y muy poco en toda su vida había tenido la iniciativa en buscarlos para hablar.

-Solo tengo que darte unas indicaciones…que espero las cumplas…-Dijo el Sr. Kim -…no quiero que por ningún motivo te atrevas a mirar al conde…

-Qué?…-Jaejoong se sorprendió por lo que escuchaba, no entendía por que su padre le prohibía siquiera mirarlo.

-No intentes refutar mi decisión…así que si te cruzas con él, ni siquiera le dirigirás la palabra, ni una sola mirada…él será como un extraño para ti…

-No!…-susurro negando con su cabeza sintiéndose incapaz de poder cumplir con lo que le pedía, pues lo único que lo consolaba al estar en esa fiesta y no poder estar al lado de él, era que podría alcázar a ver sus ojos y ahora hasta esa mínima comunicación que el necesitaba de Yunho se la estaban quitando.

-Jae…Obedéceme…espero te comportes agradablemente con las personas que se acerquen a saludar…solo ah esa persona…-Dijo refiriéndose al conde -…solo a él no quiero que veas…-Dijo alejándose para salir de la habitación.

-No podré…-Susurro Jaejoong para sí mismo cuando su padre salió de su habitación, se volteo y miro su imagen en el espejo, se dejo caer sobre sus piernas, sentado en el piso dejo caer sus lágrimas.

Las nodrizas entraron y al verlo corrieron hacia él, preocupadas al verlo llorar le preguntaban qué era lo que su padre le había dicho que lo había lastimado al punto de arrancar las lágrimas de sus ojos.

Al escuchar el balbuceo de los labios de Jaejoong que trataba de contarles lo que su padre le había ordenado, la nodriza de mayor edad se apresuro a consolarlo.

-Solo obedece…y cuando estés con el…podrás explicarle todo, veras que el conde te entenderá…no te preocupes…-Ella amablemente trato de calmarlo mientras le secaba las lagrimas con su pañuelo.

-Si…-Jaejoong le contesto en un susurro pues recordó que su madre le prometido que el vería a su esposo esa noche -…gracias…

-Debes levantarte…tu madre vendrá pronto y es mejor que no te vea así…-Dijo la nodrizas ayudándole a levantarse, mientras las otras nodrizas arreglaban las faldas de su vestido y le acomodaban bien el cabello.

Dos golpecito en su puerta y una de sus nodrizas se apresuro a abrir.

-El señor espera a su hijo…pide que por favor bajen…-Una joven esclava hablo y luego se retiro, pues el Sr. Kim le había enviado a avisar a las nodrizas que escoltaran a Jaejoong hasta el primer piso donde él y su esposa lo esperaban listos ya para partir.

Dándole el ultimo retoque y revisando que Jaejoong realmente esté listo salieron de la habitación acompañándolo, se mantuvieron tras el siguiendo su paso.

Su madre y su padre lo esperaban en el pasillo que llevaba a la salida de la casa, tomo el brazo de su madre y juntas salieron mientras su padre los seguía por detrás y las nodrizas salieron hasta la puerta a despedirlos.

Dentro del carruaje Jaejoong se sentó junto a su madre; deseaba preguntarle cómo iba poder ver a Yunho pero no podía su padre estaba frente a ellas así que solo le quedaba esperar a que ella le avisara cuando seria el momento en que lo podría ver.

El Sr. Kim dio la orden a su cochero de partir y su carruaje empezó su viaje a la mansión donde se realizaría el baile.


**

En aquella cocina donde había trabajado junto a la esclava negra desde el día en que había llegado a vivir a la mansión del Joven Yoochun quien ahora era su amado y padre del hijo que esperaba; volvía a estar ahí ayudando en pequeñas cosas, permanecía sentado adornando unos pastelitos para Yoochun mientras la esclava negra le ayudaba pasándole las cremas.

Sentía que no podía existir mas felicidad que la que vivía pues cada día en que despertaba y tenía a Yoochun durmiendo a su lado abrasándolo su corazón latía más aprisa.

Las dulces caricias de su amado sobre su vientre quien estaba más que ilusionado con la espera de su hijo, Junsu no podía evitar esbozar una sonrisa mientras decoraba los pastelitos al recordar los momentos junto a Yoochun, quien ahora estaba fuera de la casa, había salido a regañadientes a llevar una carta para que sea entregada urgentemente ese día, donde se disculpaba por no presentarse en la fiesta de la cual él no tenía pensado ir si no podía ir con su amado Junsu.

-Puedo ver cuán feliz eres…-La esclava negra dijo a Junsu haciendo que él la mirase.

-Si…-Contesto él con una sonrisa menos tímida -…nunca creí poder ser tan feliz…-Dijo asiendo una pausa -…solo me gustaría…poder compartir esta felicidad…con mi madre…-Susurro mirando a los pastelitos que decoraba; la extrañaba, no había día en que no la recordase y siempre deseaba que ella esté bien.

-Tu madre…seguro la podrás ver…solo debes pedirle…- Dijo la mujer y Junsu levanto su mirada.

-No se…tal vez sería pedir demasiado…-Susurro bajando su mirada nuevamente.

-No temas…todo lo que ahora estás viviendo…toda esa felicidad no desaparecerá…es justo que la veas y el te dará ese regalo…solo debes decírselo… - Junsu la miro, sabía que debía escucharla pues si antes lo hubiera echo tal vez no habría sufrido tanto al ocultar su embarazo de Yoochun.

-Si…tienes razón…- Contesto Junsu con una sonrisa y ella correspondió a su sonrisa, el volvió a seguir decorando los pastelitos mientras la esclava negra buscaba sobre la mesa algún ingrediente para la comida que preparaba.

-Oh…debí olvidar traerlo…-Susurro para sí misma.

-Que…? –Junsu pregunto mirándola.

-Oh nada…no te preocupes…-Dijo ella tratando de quitarse su delantal.

-Dónde vas? –Pregunto al verla quitándose su delantal.

-Eh olvidado traer…del almacén unos condimentos…

-Iré yo…-Dijo Junsu levantándose…

-No espera…no es necesario yo lo haré…-Dijo la mujer tratando de detenerlo ya que Yoochun le había encargado secretamente que cuidara de Junsu y que no lo dejara hacer mucho esfuerzo.

-Déjame hacerlo por favor…creo poder, además que conozco de donde traer…- Junsu se defendió, deseaba ayudar mas, además que creí que era demasiado para la mujer ya que era algo mayor y bajar las escaleras de la entrada le parecía mucho para ella pero no para él.

-Junsu…-Ella susurro su nombre.

-Estaré bien…no me ara mal caminar un rato…-Dijo caminando hacia la salida de la cocina.

-Está bien…pero ve con cuidado…-Ella no podía detenerlo ya que el ahora era también como su patrón, solo le indico cuales eran los condimentos que necesitaba y Junsu salió en busca de ellos.

Al salir de la mansión camino en dirección al almacén donde otro joven esclavo se encargaba ahora de cuidar, él le solicito los condimentos necesarios y empezó a retirarse para volver a la casa.

Al estar fuera del almacén, camino por el costado del establo, en donde se detuvo en cuanto escucho unos murmullos, volteo su rostro un poco hacia un costado desde donde pudo ver a varios esclavos caminado en dirección a la casa donde ellos habitaban que estaba a unos cuantos metros de distancia.

Su mirada se quedo fija justo en el joven rostro que reconoció en cuanto lo vio, desvió su mirada y empezó a caminar otra vez.

-Junsu…-Lo llamo haciendo que se detuviera, despacio volteo y lo miro.

-Jasufa…-Dijo cuando lo vio ya cerca, trato de mantener la mirada pues se sentía avergonzado por lo que había pasado entre ellos antes, se sentía mal al recordar como prácticamente lo había utilizado, su corazón se oprimió al ver sus ojos, sabía que lo había lastimado y necesitaba ahora decirle lo mucho que le dolía no haber considera sus sentimientos -…yo…lo siento…perdón…-Susurro y sus lagrimas cayeron por su mejilla pues no pudo controlarse, bajo su mirada.

-No te disculpes…por favor no llores…-Susurro Jasufa observando a quien aun amaba.

-Pero…yo…-Balbuceo levantando su mirada, llevo su mano a sus labios para acallar su llanto.

-No tienes la culpa…soy yo quien debe disculparse…

Al escucharlo Junsu negó con su cabeza pues se consideraba el único culpable y quien debía pedir perdón pues le había pedido aquella vez que lo aceptara aun sabiendo bien que no podría quererlo porque siempre iba amar a Yoochun.

-Jasufa…no quise lastimarte…- Junsu susurro mientras intentaba secar sus lágrimas con la mano que tenia libre.

-Olvidemos lo sucedido… y empecemos de nuevo…-Dijo Jasufa tratando de que pudieran al menos mantener una amistad para que así cuando se cruzaran en algún momento pudieran verse a la cara sin algún problema, sabía bien que lo amaba aun, pero le deseaba toda la felicidad con Yoochun ya que ahora Junsu era feliz.

-Si…-Contesto asintiendo con su cabeza; sintió en su corazón una tranquilidad que creyó que no sentiría si no era perdonado por él.

-Puedo?…-Dijo Jasufa con algo de temor observando el abultado vientre de Junsu, estiro su mano y lo coloco sobre su vientre en cuanto Junsu le dio su aprobación, Jasufa sonrió -…Tendrás un hermoso bebe…-Susurro y Junsu sonrió al escucharlo.

-Gracias…-Contesto en cuanto Jasufa retiro su mano de su vientre -… creí que no trabajabas cerca a la…

-Si…solo eh venido por algunas cosas…que necesitaba y me iré otra vez…pero me alegra haber podido verte antes de irme, ahora puedo hacerlo sabiendo que…

-Junsu!!...-La voz de Yoochun sonó llamándolo tras él, Jasufa llevo su mirada por encima del hombro de Junsu y pudo ver a su patrón acercándose.

Ante el llamado Junsu volteo, Yoochun hacia unos segundos había llegado estacionando su carruaje por un costado de la casa, se encaminaba hacia Junsu sorprendido al ver al Joven esclavo Jasufa conversando con su amado.

-Yoochun…-Susurro Junsu mientras lo observaba acercándose.

-Señor buenas tardes…-Dijo Jasufa saludándolo cuando el ya estuvo cerca de ellos, temió que su acercamiento pudiera enfadar a su amo, no quería que hubiera algún malentendido ya que el solo quería disculparse con Junsu.

-Buenas tardes…- Le contesto Yoochun cuando estuvo cerca y llevo su mano hacia la espalda de Junsu para abrasarlo.

-Me retiro señor…-Dijo sabiendo que su presencia ahí ya no era la apropiada.

Yoochun asintió con su cabeza y Junsu volteo su rostro para mirar al esclavo quien se despidió de el haciendo reverencia pues ahora el era como su patrón.

Sin esperar a que el esclavo desapareciera de su vista Yoochun atrajo el cuerpo de Junsu rodeándolo por la espalda con sus brazos y Llevo sus labios pegándolas a la frente de Junsu donde dejo un dulce beso sobre ellos, luego se miraron a los ojos por unos segundos.

-Volviste pronto…-Susurro Junsu y lo rodeo con sus brazos.

-Si amor…no puedo soportar estar mucho tiempo lejos de ti…así que me apresure en venir…-Susurro en sus cabellos.

Se esbozo una sonrisa en el rostro de Junsu al escucharlo pues el también no podía estar lejos de Yoochun por mucho tiempo.

-Junsu…-Susurro muy despacio Yoochun -…Que quería? Jasufa…-Pregunto sin poder aguantar más; necesitaba saber que era lo que habían estado hablando pues al verlos juntos por unos segundos los celos se habían apoderaron de él pero después su control volvió en cuanto vio los ojos de Junsu los cuales estaban llenos de amor.

-El…se disculpo por…- Susurro sin poder continuar hablando pues temía hacerle recordar.

-Entiendo…-Dijo Yoochun en cuanto Junsu se quedo en silencio, sabía bien a qué se refería y no quería recordar o hacerle recordar lo sucedido, pero no podía evitar mencionar lo que sus ojos le decían. Lo sostuvo del rostro y lo miro.

-Lloraste…-Dijo deslizando su mano por su mejilla; sus ojos estaban algo rojos por las lágrimas derramadas.

-Ah…yo…solo un poco…-Susurro bajando su mirada.

-No volverán a caer mas lagrimas…- Yoochun susurro mientras daba suaves besos sobre el costado de los ojos de su amado.

-No…nunca más…-Contesto Junsu dándole una sonrisa la cual Yoochun correspondió y solo unos segundos después sus labios se juntaron en un dulce beso.

-Vamos a casa…-Susurro Yoochun en cuanto sus labios estuvieron libres, le sujeto la mano y trato de quitarle la bolsa que lleva en su otra mano para poder ayudarle pero Junsu rápidamente la alejo.

-Yo puedo…-Contesto pues se creía capas de poder llevar la bolsa.

-Está bien…- dijo Yoochun convencido de que Junsu no lo iba dejar que lo ayude; caminaron sujetados de la mano acercándose a los escalones de la entrada, pero se detuvieron en cuanto el sonido de los cascos de unos caballos empezaron a sonar fuertemente, Yoochun supo que un carruaje se acercaba. Soltó la mano de Junsu y camino un poco separándose de él para ir a ver de quien se trataba mientras Junsu permaneció parado mirándolo.

Pronto un carruaje apareció estacionándose frente a Yoochun a unos cuantos metros de distancia, en cuanto vio la insignia del carruaje supo de quien se trataba y eso lo desconcertó.

“Acaso la duquesa ah venido a visitarme, no, eso sería muy extraño…” se decía en su mente mientras observaba al cochero abrir la puerta del carruaje.

-Go Ah Ra?…-Yoochun susurro en cuanto la vio descendiendo del carruaje; solo ella podía ser y sabia que es lo que ella quería, Junsu miro a la mujer y luego a su amado quien parecía conocerla.

-Oh…Yoochun…al fin un rostro conocido…-Dijo Go Ah Ra mientras se acercaba, le dio su mano en cuanto estuvo cerca a él, Yoochun la tomo y beso, pero ese gesto hizo que Junsu desviara su mirada.

-Ah que debo tu visita… debo advertirte que Yunho no se encuentra aquí…

-Lo se…pero también se que tu conoces donde esta viviendo…y necesito que me ayudes…-Contesto.

-Yo?…-Dijo pretendiendo decirle que no sabía pues no quería que ella llegara a la casa de su amigo ya que estaba seguro que solo le causaría problemas pues conocía de su capricho por él.

-Tal vez si lees esto quieras ayudarme...Toma…-Dijo rápidamente sacando una nota la cual Yoochun recibió y en cuanto la abrió pidió disculpas a su amigo en su mente pues la nota estaba escrita por la duquesa tía de Yunho quien le pedía que ayudara a su sobrina en ubicar la dirección de la casa que su sobrino el conde había comprado para huir del castillo y la cual ella no conocía.

-Ya veo…-Susurro Yoochun mientras leía.

-Quien es…?-Susurro Go ah ra despacio mirando a Junsu quien ya estaba por subir los escalones, Yoochun miro a la prima de Yunho.

-Que?...

-Quien es…-Dijo mirándolo para luego llevar su mirada sobre Junsu -…acaso te casaste y te atreviste a no invitarme…o es que simplemente la robaste…oh! pero si esta embarazada…-Dijo mas fuerte asiendo que su Junsu la escuchara y se detuviera -…o tal vez es una empleada tuya…perdón…-Dijo fingiendo equivocarse.

-No…-No es mi empleada.

-Junsu!!…-Yoochun lo llamo, el volteo pero no se atrevió a acercarse pues temía hacerlo, se mantuvo parado ahí observando a Yoochun quien se acercaba y el cual levanto su mano para que lo tomara -…el bebe que espera es mío…-Dijo mirando a su amado y sosteniendo su mano -…pronto nos casaremos….- susurro y Junsu bajo su mirada.

Los labios de Go ah ra se abrieron de la sorpresa no esperaba una respuesta como esa – Bueno debo felicitarte y a usted...-Dijo dirigiéndose a Junsu.

-Gracias…-Le contesto Junsu asintiendo con su cabeza.

-Pasemos…te apuntare la dirección…-Dijo Yoochun.

-Si…-Contesto ella sin salir de la sorpresa.

Entraron a la mansión, Junsu tomado de la mano de Yoochun mientras Go ah ra los observaba y no dejaba de mirar a Junsu sintiendo curiosidad por saber cuál era su apellido y ver de qué familia venia.

Una vez dentro Junsu se soltó de la mano de su amado para ir a la cocina y llevar los ingredientes que la esclava negra necesitaba.

-Regresa…-Yoochun le susurro y el asintió con su cabeza.

-Con permiso…-Se disculpo Junsu mientras se retiraba y Yoochun y Go ah ra se sentaban en los sillones.

Con papel en mano Yoochun tomo una pluma y sin poder rehusarse a ayudarla por pedido de la duquesa escribió la dirección de la casa de Yunho, solo le quedaba desear que el cochero sea un despistado y así no llegara donde su amigo vivía pero sabía que esperar algo como eso podía ser imposible.

Resignado escribió los datos necesarios -…Listo…aquí tienes…-Dijo el entregándole la nota a la prima de su amigo.

Junsu regresaba al salón para hacer compañía a su amado como le había pedido, además que no le gustaba la idea de dejar a esa mujer con Yoochun, sintió un leve dolor en su corazón mientras camino por el pasillo acercándose a la puerta.

-Gracias…-Dijo Go ah ra sosteniendo la nota con una sonrisa en su rostro pues ahora si llegaría a la mansión donde Yunho vivía, doblo la nota y la guardo - …ah…y... No me contaras donde conociste a esa bella joven?...-Susurro intrigada.

Al alcanzar a oír sus palabras Junsu se detuvo antes de cruzar la puerta, se quedo parado sin poder siquiera moverse y entrar.

-Disculpa que no pueda saciar tu curiosidad…lo único que puedo decirte es que estoy muy enamorado y muy feliz por que seré padre…

-Es Bueno saber que estas enamorado…nunca pensé que serias atrapado…eres de los hombres difíciles de casar…-Dijo sonriendo pues conocía de su afán de conquistador, pero no lo había visto nunca comprometido.

-Debo confesar…que me alegra mucho haber conocido a Junsu…pues no creo haber podido amar a nadie más…

-Ohh…-Dijo ella abriendo sus labios al escucharlo hablar.

Con las lágrimas por su mejilla Junsu pego su espalda a la pared que lo separaba de su amado y la mujer, sus palabras le habían hecho derramar sus lágrimas pues Yoochun mencionaba cuanto lo amaba.

-Bueno no quiero quitarte más tiempo…creo que debo irme…-Dijo levantándose incapaz de seguir escuchando tanta melosidad del amigo de Yunho, ahora deseaba irse y llegar pronto a la casa del hombre que quería tener.


-Adiós… me despides de tu amada – Dijo saliendo con Yoochun tras suyo acompañándola, ambos no se habían percatado de la presencia de Junsu.

Cuando finalmente el carruaje de ella se alejo el volvió al interior de la misión encontrando a Junsu cerca a la puerta del salón, se acerco a el y al ver las lagrimas en su mejilla lo abraso.

-Que sucede…por que lloras?...-Dijo angustiado – Te duele algo…dime…

-Si - Junsu contesto y Yoochun se asusto pues temía por su amado y su hijo.

-Que?...donde…-Dijo alarmado esperando una respuesta.

-El corazón…

-El...el...que?...-Dijo mas asustado.

-Pero de felicidad…Te amo! – Junsu contesto abrasándolo y el alma volvió al cuerpo de Yoochun quien correspondió el abraso.


**

El carruaje del Sr.Kim iba haciendo su entrada por el gran portal bellamente adornado el cual daba pase a un camino de piedra rodeado de árboles y desde donde se podía ver la gran casa.

Una hermosa mansión con una gran puerta y bellos balcones, muchas flores adornaban el lugar.

La belleza del lugar lo atraía, mantuvo su mirada observando mientras el carruaje iba acercándose más y más a la gran mansión.

La suave caricia sobre su brazo lo hizo volver la mirada a su madre quien estaba sentada a su lado, ella le sonrió pues necesitaba hacerle ver a su hijo que todo iba estar bien.

El carruaje se detuvo, el Sr.Kim descendió ayudando a su esposa y luego su hijo también, se alejo un poco acercándose a su cochero para darle indicaciones y fue en ese instante en el que la Sra. Kim aprovecho para susurrar a su hijo.

-Mantente en todo momento a mi lado…-Susurro suavemente la Sra.Kim muy cerca del oído de su hijo, este volteo y la miro y unos segundos después asintió con su cabeza pues tampoco tenia pensado estar lejos de ella y mas al saber que no podía estar cerca de su esposo de quien esperaba no se enfadara al verlos ahí ya que le había pedido que evitara a toda costa ir, cosa que no había logrado.

-Vamos…-Dijo el Sr. Kim avanzado hacia su esposa la cual asintió con su cabeza y subieron los escalones de la entrada, junto a Jaejoong.

En el interior muchos invitados ya disfrutaban de la tarde donde por el momento algunas jóvenes doncellas iban turnándose para tocar el piano y demostrar así una que otra cualidad en la música.

La Sra.kim saludo junto a su esposo a quienes ella consideraba gente noble y trato en todo momento no acercarse a aquellas que solo se atreverían a interrogarla sobre el problema que había entre su esposo y el esposo de Jaejoong, quería evitar que su hijo escuchara algún murmullo sobre su separación.

Se sentó junto a su hijo luego de saludar, el Sr.Kim sentado también conversaba con algunos amigos muy cerca de su esposa, los jóvenes mayordomos iban pasando algunos bocaditos. Jaejoong mantenía su mirada donde las jóvenes iban tocando el piano, la melodía era hermosa y lo hacia sentir muy tranquilo.

Mientras que por la entrada que daba paso a la mansión poco a poco iban ingresando los carruajes trayendo más invitados al tiempo que la tarde iba pasando pues ya empezaba a oscurecer cada vez más.

Listo en su caballo negro Yunho se despidió de su nona, había decidido no llevar su carruaje pues no pensaba quedarse mucho tiempo en aquella fiesta y necesitaba salir rápido de ahí; pues al haber tantos carruajes creyó que tendría alguna dificultad al intentar salir sin llamar mucho la atención.

Cubriéndose con su capa negra azoto suavemente al caballo y este rápidamente empezó andar, llevándolo lejos de su mansión, con pesar Yunho tuvo que ir a aquella fiesta pues debía cumplir con presentarse, lo único que lo alegraba es saber que después pasaría a recoger a su amado.


**

Una hora después cuando el cielo era tan oscuro que solo la luna alumbraba el camino Yunho diviso la mansión, apresuro azotando suavemente a su caballo.

La música en el lugar ahora ya no era amenizada por las jóvenes doncellas, las cuales ahora Iván bailando en el medio del salón junto a los demás.

El Sr.Kim se levanto para saludar algunos hombres que llegaban a la fiesta, su esposa tubo que acompañarlo pero antes se encargo de que su hijo también lo siguiera.

Una voz que le era familiar la hizo voltear en cuanto escucho su nombre, ahí acercándose hacia ella y su esposo venia una de las mujeres que ella había evitado saludar y ahora se acercaba seguro para hacerle alguna pregunta indiscreta, no podía permitirle que se acercarse así que camino hacia ella sin pensarlo dos veces pues era la única forma que encontró de alejarla de su hijo y que este no escuchara sus palabras.

El Sr.Kim solo alzo su mano como saludo a la mujer y dejo que su esposo fuera hacia ella ya que la mujer parecía interesada en hablar con su esposa y el no tenia nada de que hablar mas que cruzar el saludo, así que espero parada con su hijo a su lado la llegada de esos hombres importantes, a los cuales tenia pensado saludar.

Jaejoong mientras tanto al ver a su madre alejarse recordó lo que ella le había dicho y quiso ir tras ella pero antes de que pudiera voltearse su padre le sostuvo del brazo.

-Quiero que te muestres amable y sonriente…-Susurro el Sr. Kim.

-Qué?…-Jaejoong soltó de sus labios al escucharlo.

-Esas personas son importantes y no quiero que por ningún motivo te muestres descortés si intentan alagarte…- al escuchar su susurro Jaejoong miro a los hombres que se acercaban.

-Pero…-Susurro; no quería y no podía sonreír, no si no se trataba de quien amaba, además que no podía andar sonriéndoles pues tenia un esposo y no podía permitirse escuchar halagos de otros.

-Complace a tu padre…-Contesto el Sr.Kim cuando creyó que su hijo protestaría. Jaejoong no tubo tiempo para decir algo mas PUES aquellos hombres ya estaban a escasos pasos de ellos, el volteo su rostro y miro a los danzantes en el medio de la pista cuando uno de los hombres estuvo ya dando la mano a su padre.

-El es mi Jaejoong…-Escucho decir a su padre y volteo encontrándose con la mirada de aquel hombre.

-Mucho gusto…-Dijo el joven un tanto mayor que Jaejoong y quien estiro su mano esperando la suya, incapaz de ofender al hombre le entrego su mano la cual el joven sin dejar de mirarlo llevo a sus labios dejándole un beso.

-Hermosa…-Dijo soltando la mano de Jaejoong y manteniendo su mirada sobre el cautivado por la belleza que tenia frente suyo.

-Gracias…-Contesto Jaejoong y desvió su mirada.

-Me gustaría poder bailar con su hija si usted me lo permite…-El joven Pregunto al Sr.Kim, al escuchar Jaejoong abrió sus ojos grandes manteniendo su mirada en los danzantes.

-Por su puesto…-Contesto el Sr.Kim, al escuchar la respuesta de su padre Jaejoong bajo su mirada era incapaz de voltear y refutar la decisión de su padre.

-Bien…entonces en cuanto aya terminado de tocar esta pieza…- Dijo el joven refiriéndose a la música -…volveré para tener el honor de bailar con su hermosa hija…ahora si me disculpan debo pasar a saludar a los demás…

-Claro siga…-Contesto el Sr.Kim y Jaejoong volteo asintiendo con su cabeza al joven que aun lo miraba y a quien no había visto antes y que de seguro no sabia y poco le importaba que el este casado.

-Ohh…mi querido amigo…- Dijo el Sr.Kim, Jaejoong simplemente no quiso mirar solo mantuvo su mirada otra vez hacia el centro del salón -…hace mucho que no se dejaba ver…Duque de Márquez…

-ah…-Susurro Jaejoong muy despacio al escuchar de quien se trataba, volteo para mirar y ahí estaba frente a su padre dándole la mano el Duque de Márquez padre de Keita.

-Jaejoong…me alegra verte…-Dijo el Duque saludándolo, pues hacia mucho que no lo veía.

Sin poder hablar Jaejoong solo lo miro; no podía continuar ahí, deseaba ir junto a su madre, no soportaba la idea de ver a Keita, no quería.

-Y…su hijo hace mucho que no lo veo…-Pregunto el Sr.Kim mientras Jaejoong buscaba con la mirada a su madre.

-OH…el estaba justo por aquí…-Dijo el duque volteando a buscar con su mirada a su hijo, mientras que Jaejoong asustado continuaba mirando entre la gente buscando a su madre.

-Ya lo vi...le pediré que venga…-Dijo el duque.

-No…-Susurro Jaejoong muy despacio al escuchar que Keita se acercaría y tendría que saludarlo, su mirada busco a su madre por todo el salón y no lograba verla pues había mucha gente.

-Jaejoong…-Su padre lo llamo -…que te pasa…-Dijo atrayendo su mirada.

-Nada solo…yo…-Contesto nervioso sin saber como explicar lo que pasaba, no podía decirle que no quería ver a keita y mucho menos que no quería saludarlo.

-No se te ocurra…desairar al duque…-Dijo mirando a su hijo - ni siquiera le contestaste a su saludo pórtate educadamen…- El Sr. Kim se detuvo de golpe sin completar la palabra con su mirada lejos del rostro de su hijo, Jaejoong mantuvo su mirada sobre el esperando continuara con lo que le estaba diciendo.

-Escucha…-Susurro el Sr.Kim sin mirarlo.

-Le escucho padre…-Dijo extrañado por que su padre mantenía la mirada lejos hacia un costado de el.

-No voltees…ni siquiera te muevas…- Jaejoong lo miro desconcertado sin entender por qué le pedía eso -…El conde…quiero que evites mirarlo recuerda bien lo que te dije…- entonces entendió a quien su padre observaba -…ni una sola mirada me escuchaste…ahora aquí viene el duque recuerda todo lo que te dije…- Jaejoong se agito Yunho estaba ahí y lo iba ver cerca de Keita, mantuvo su mirada en su padre esperando que un milagro lo sacara de ahí lejos de esa terrible situación.

-Joven Keita…-Saludo el Sr.Kim cuando estuvo cerca, “no no”, Jaejoong repetía en su mente.

-Un placer verlo Señor…-Contesto Keita estrechando su mano, al escuchar su voz Jaejoong cerro sus ojos.

-Jae…su padre lo llamo y el abrió sus ojos, volteo y ahí a unos cuantos pasos estaba el a quien no deseaba ver nunca más y a quien alguna vez amo, desvió su mirada por unos segundos los cuales bastaron para ver a Yunho entrando por la gran entrada del salón, asustado rápidamente volvió su mirada antes de que Yunho lo viera, se agito de solo pensar en eso.

Acababa de llegar y tan pronto como entro logro ver el rostro del Sr.Kim quien por unos segundos lo miro fijamente, avanzo entre la gente que al igual que el ingresaba al salón, llevo su mirada nuevamente hacia el Sr.Kim y se detuvo de golpe al lograr ver el hermoso rostro que tanto amaba y que no había logrado ver antes por la gente que se cruzaba.

-Desgraciado…-Mascullo entre dientes molesto, ahora confirmaba lo desalmado que podía ser el Sr.Kim al anteverse a traer a Jaejoong a esa fiesta.

Miro a su amado mientras caminaba despacio saludando a cada paso sin desviar la mirada de la imagen de Jaejoong, quien estaba tan hermoso, su corazón latía fuerte tan solo de verlo, deseo ver sus ojos pero Jae parecía no darse cuenta de su presencia así que llevo su mirada a la persona que su amado parecía mirar y al reconocer al hombre frente a su esposo apretó sus manos en un puño deteniéndose de golpe, no podía creer lo que veían sus ojos.

-Un gusto volverte a ver…-Se atrevió a decir Keita mirando fijamente a Jaejoong quien hacia lo posible por soportar mirarlo, no quería contestarle pero la mirada de su padre le decía que contestara, eso lo puso más nervioso y agitado.

-Jae…-Su padre susurro y sin poder evitarlo incapaz de poder salir de ahí y sabiendo que Yunho ya lo debía estar mirando, cerro sus ojos unos segundos para volver a mirar Keita y contestar su saludo.

-El…el…-Balbuceo Jaejoong -…gusto es…mió…-Susurro con dolor, pues lo odiaba.

3 comentarios:

  1. Ala el papá sí se pasa, que mala leña, pobre mi YunJae está sufriendo por la culpa del papá ò.ó en serio el papá de JJ es malo hasta la médula ò.ó aaasssshhh!! Viejo estúpido ojalá y se arrepienta por todo lo que le está haciendo a su hijo ò.ó

    Oooooooww!! Mi amado YooSu sí disfruta de su felicidad siiiiii!! Que siga así ^(*v*)^ ya mi YunJae ya irá a disfrutar de su felicidad y puro love para mis parejas, lo siento Min pero tú no te puedes quedar con la mamá de JJ xD

    ~sigue leyendo~ Y(O.O)Y

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  2. con un padre como ese para que quiere enemigos pobre de jae con ese papa que le a tocado es como estar en el infierno es mas malo que el diablo ese señor que no le haga caso jae que se de la vuelta y que se baya con yunho y se alegren de la fiesta pues a qui ese hombre haciéndolo sufrir e imponiendo le a ese keita que nomas lo a lastimado y por otro lado esa víbora esperando a yunho en su casa ahora si que les están lloviendo las desgracias espero y se puedan ir juntos y no los encuentren ni el padre ni esa mugre vieja

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  3. No se como puede existir podres como el
    La vida de Jae seria mucho mas hermoso sin su padre

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