LOVE JYJ & TVXQ: La Edad de la Inocencia

POEMA

Amor?

Que significa e implica esa palabra?

En realidad no lo se

Solo se que al mencionarla

Se vienen a mi mente dos cosas

Tu nombre ……..

Y mi bebe………

Si ,

Este bebe

que aunque no se como es

se que me da una felicidad

indescriptible

que no se como explicar mis emociones

solo se ………..

que veo mi cuerpo cambiar

muero por sentir sus pataditas fragiles

por saber como sera

por tenerlo en mis brazos

y protegerlo de todo

incluso de ti……….

Se que tu no me quieres

Que solo estuviste conmigo

Por que me necesitabas

Que solo soy un esclavo mas

Quiero soñar que

Tu me amas

Que deseas al igual que yo este bebe

Soñar no cuesta

Por eso con los ojos humedos

Trato de imaginar una vida juntos

Una vida de familia

Al lado de nuestro bebe

Aunque sea por un minuto

Pensar que tu

Estas a mi lado

En la espera de esta nueva vida

que estas conmigo dandome valor

que estas conmigo haciendome perder el miedo

por que tengo miedo

mucho miedo……

de no ser lo suficiente para mi bebe

de no protegerlo bien…

se que no puedo cambiar las cosas para mi bebe

no puedo cambiar el hecho de que

no viva dentro de una familia feliz

y daria mi vida por ello

juro que lo haria…..

por otro lado tengo miedo

de que tu me lo arrebates

que lo alejes de mi lado

solo por el simple hecho

de que tambien es tu hijo

por eso……….

Sere fuerte

Aunque este solo en esto

Sere valiente

Por que con este bebe dentro

Jamas fui tan feliz

Y hare todo por el

Aunque eso implique

alejarme tambien de ti……….

Por que soy un esclavo……

Un esclavo tuyo……….

Un esclavo de tu amor……

Un esclavo de nuestro amor

Que ahora se aloja en mi interior

Y que me hace muy feliz.

Aunque tu no lo sepas………….

Perspectiva de Junsu

By: Peregrina (Pamin)

En su cuarto descansaba a pedido de la esclava negra quien mando por la tarde a Junsu pues había logrado convencerlo de dejar sus quehaceres.

Sentado sobre su cama recordaba las palabras de Yoochun y trataba de comprender por que el había decidido llevarlo al palacio del rey, no veía la necesidad de ir, que podía hacer el ahí, pero sabia que no podía negarse, no había nada que pudiera hacer mas que aceptar eh ir con el.

Con tristeza recordaba también que no había podía juntar el valor suficiente para hablar con Jasufa, lo había ido a buscar nuevamente pero su determinación desaparecía en cuanto lo tubo frente suyo, sabía que no tenía derecho de hacerle eso, de dejarlo con la incertidumbre de no saber que es lo que quería decirle.

Se recostó despacio sobre su cama al sentir un leve mareo, respiro hondo, cerro sus ojos y llevo sus manos a su vientre el cual le parecía que ya empezaba a crecer, paso sus manos por debajo de su prenda, abrió sus ojo y decidió que la próxima vez que encontrara a Jasufa le diría todo, no podía esperar mas tiempo.

Dejo caer sus lagrimas pues le dolía su corazón estaba muy enamorado de Yoochun y no sabia como quitarlo de su corazón, sollozo, decidió que esta iba ser la ultima vez que lloraba, necesitaba despedirse de ese sentimiento pues ya había postergado demasiado su platica con Jasufa y ahora si debía hablar con el, sollozo mas fuerte al imaginar a Yoochun enterándose de su relación con el esclavo, en su corazón había guardado la esperanza de que tal vez Yoochun si lo quería aun que sea un poco, pero al ver que su amo parecía no querer tenerlo cerca por una parte le entristeció, pero que a la vez le daba la oportunidad de evitar que el se enterara de su embarazo.

Sollozo despacio con sus manos sobre su vientre su única alegría era el bebe que iba tener, sonrió entre lagrimas al imaginarse aquel pequeño cuerpecito que sabia le daría muchas alegrías y a quien pensaba darle todo su amor, pues él era el fruto de su amor, al pensar en aquel bebe sentía que era capaz de soportar cualquier cosa, con tal de protegerlo y tenerlo consigo.

Seco sus lagrimas, no pensaba volver a derramarlas no por aquel sentimiento que estrujaba su corazón cada vez que vía a Yoochun y sabia que no era para el, que no merecía si quiera estar a su lado.

Solo le quedaba enterrar aquel sentimiento y guardar lo vivido con Yoochun en su corazón como un recuerdo ahora que tenía el regalo más hermoso que había recibido en su vida el hijo que llevaba en su vientre.

Permaneció recostado un rato mas en su cama hasta que llego la hora de ir al despacho de Yoochun, al cual se dirigió como todos los días lo hacia y en donde no lo encontraba pues siempre salía.

Camino por el pasillo que lo lleva a la puerta del despacho, se detuvo de golpe al ver a Yoochun quien salía, se sorprendió al verlo pues imagino que había salido.

Sus miradas fijas por unos segundos hasta que Junsu bajo su mirada y Yoochun se aparto de la puerta permitiendo a Junsu avanzar y entrar.

-Eh dejado unos documentos sobre el escritorio…te agradecería te encargaras de ellos primero…- dijo Yoochun cuando Junsu estuvo dentro del despacho.

-Si…señor…- contesto Junsu sin voltear a mirarlo -…no se preocupe…yo me encargo…

Yoochun aun parado cerca de la entrada lo observo, sin tener la fuerza de ir y exigirle porque estaba con Jasufa, se agito, volteo evitando mirarlo.

-Gracias…- dijo y avanzo alejándose del despacho.

Dejo de rodearlo con sus brazos, busco el rostro de su amado, llevo su mano y la poso en su mejilla.

-Ya no tienes hambre…- dijo Yunho tratando de olvidar aunque sea por un momento aquella invitación.

-No…-JaeJoong negó con su cabeza pues se había hostigado con tanto dulce, al escucharlo Yunho sonrió.

Sujeto el rostro de su esposo con ambas manos y acerco su rostro al suyo.

-Dime…deseas salir del cuarto…o prefieres que nos quedemos aquí…- susurro observando los ojos de JaeJoong.

JaeJoong bajo su mirada al pensar en las palabras de Yunho, creyó que si salían del cuarto tal vez Yunho lo dejaría con la nona y se alejaría del , y por alguna razón sentía que quería estar cerca suyo, no quería alejarse del, Yunho al ver la reacción de JaeJoong quien alejo su mirada , dejo libre su rostro.

-Que sucede…- pregunto Yunho esperando que JaeJoong volviera su mirada hacia el.

Al escucharlo Jaejoong miro a su esposo, mirando aquellos oscuros ojos, quería decirle que lo único que necesitaba es estar cerca suyo, apretó sus manos sobre la suave tela de su camisón a la altura de sus piernas, Yunho se percato y observo las manos de su esposo, volvió la mirada a Jaejoong quien tenía una expresión de dolor en su rostro.

-No me dejes…- casi grito abrasando a Yunho pegando su mejilla en el pecho de su esposo y rodeándolo con sus brazos ante el asombro de Yunho.

-No…no…te dejare…- dijo llevando sus manos a los brazos de Jaejoong haciendo que desasiera su agarre, y lo movió, quedando Jaejoong con el rostro frente suyo.

Su cuerpo tembló ante la separación que Yunho hizo, lo miro a los ojos, quería entenderlo porque le decía que no lo dejaría y sin embargo deshizo su abraso.

-Cuando te dije si deseabas salir del cuarto…no fue por que quisiera estar lejos de ti…lo que más deseo es tenerte cerca mío…pero creí que tal vez deseabas estar en los jardines y disfrutar de la tarde…- dijo Yunho acariciando su mejilla -…pero juntos…los dos…- susurro observando los ojos de Jaejoong que brillaban por las lagrimas contenidas y entendió que debía tener más cuidado con sus palabras pues su esposo aun estaba susceptible.

-Deseas ir ahora a los jardines…- pregunto Yunho bajando su mano de la mejilla de jaejoong el cual negó con su cabeza sin decir una palabras.

Yunho retrocedió sobre la cama dejando que su espalda chocara contra el respaldar de la cama donde se recostó un poco, flexiono su pierna dejando la otra estirada, con ojos sorprendidos Jaejoong lo observo.

-Ven…- lo llamo Yunho quien estiro sus manos hacia su esposo para que este se acercara, sin pensarlo Jaejoong se acerco y se sentó entre el espacio que dejaba la pierna flexionada de Yunho y la otra que quedo estirada.

Jaejoong se recostó sobre el posando su mejilla sobre su pecho y acurrucándose entre los abrazos de Yunho que lo rodearon.

Su corazón se lleno de felicidad al sentir el calor de Yunho, aquellos fuertes brazos que lo rodeaban y que le daban tanto amor, más de lo que alguna vez imagino que pudiera sentir.

-Te amo…- susurro Yunho sobre su cabello, al escuchar Jaejoong poso sus manos sobre el pecho de Yunho y levanto su mirada encontrándose con la de su esposo.

-Yo también….te amo…- susurro, Yunho poso su mano en su mejilla y llevo sus labios a la frente de su esposo, dándole un pequeño beso.

-Entrégate a tu sueño…mi amor…yo estaré aquí…- susurro Yunho al ver que Jaejoong luchaba por mantenerse despierto.

Con su mano Yunho recostó la cabeza de Jaejoong sobre su pecho pegando su mejilla, sin poder mas sus ojos se fueron cerrando y los brazos de Yunho lo volvieron a rodear.

Al amanecer Junsu se sobresalto sobre su cama al ver la hora, se había quedado dormido mas de lo normal, rápidamente se cambio para ir a la cocina y ayudar a la esclava negra, camino hasta llegar a la puerta de la cocina donde se detuvo antes de entrar, pues tenia vergüenza por su tardanza, aunque el sabia que ella prefería dejarlo dormir mas.

-Buenos días…- Junsu saludo al empujar la puerta y entrar, el silencio en la cocina le sorprendió al no escuchar la voz de la mujer, Junsu quien tenía la cabeza agachada a modo de disculpa por su tardanza, levanto su rostro y miro a su alrededor, ella no estaba y eso era extraño pues siempre solía encontrarla en la cocina.

Avanzo y pudo ver que la esclava había estado preparando los alimentos pues tenia algunas verduras lavadas, se apresuro a ayudar llevándolas a la mesa donde se sentó, esperando que la esclava pronto volviera.

Empezó a picar las verduras dándose cuenta que platillo pensaba hacer la esclava, mientras cortaba no podía dejar de preguntarse a donde había ido la mujer, pensó entonces que tal vez había salido por algunos ingredientes del almacén algo que el siempre hacia, pero al haberse quedado dormido creyó que la mujer fue por ellos.

Llevo su mirada a la puerta cuando le pareció escuchar unos pasos, dejo de picar manteniendo la mirada hacia la puerta.

-Junsu!…- dijo la esclava negra al verlo.

-Lo siento…- se apresuro a decir levantándose.

-Ven Junsu…el joven Yoochun quiere hablar contigo…- dijo la mujer mirándolo desde la puerta, observando el miedo en el rostro de Junsu al escucharla.

-Que…pero…- dijo nervioso.

-Me mando por ti…no temas…- dijo la esclava acercándose -…tiene algunas indicaciones que darte…

-Pe...Pero…

-Ven…- dijo la esclava tomando de la mano a Junsu llevándolo hasta el despacho de Yoochun, totalmente asustado se dejo llevar por la esclava, no entendía que podía estar pasando y le asustaba que Yoochun haya descubierto su embarazo, tembló cuando estuvieron frente a la puerta.

La esclava empujo la puerta entrando y Junsu entro tras ella despacio, Yoochun estaba sentado tras su escritorio, levanto la mirada cuando entraron.

-Señor…acá esta Junsu…- dijo la esclava negra parándose a un lado dejando que Yoochun pudiera verlo.

-Usted…quería hablar conmigo…- dijo Junsu bajando su mirada.

-Si…-Dijo Yoochun levantándose, caminado hasta estar frente -…como ya habíamos estado conversando…- dijo Yoochun hablando a la esclava negra -…Junsu me acompañara a una reunión en el castillo del rey, necesito que por aquel día trates de encargarte de todo en la cocina, la esclava negra asintió con su cabeza mientras Junsu levantaba su mirada observando a su amo.

-Y también necesito que ayudes a Junsu…- dijo acercándose a su sillón, tomo unas cajas y las levanto acercándolas a su esclavo, quien al ver a su amo pararse frente a el con esas cajas solo pudo mirarlo sorprendido.

-Toma…es para ti…es la ropa que necesitaras para que me acompañes…- dijo esperando que Junsu levantaras sus manos y las sostuviera.

-Si señor…Gracias…- contesto Junsu sujetando las cajas, Yoochun se alejo y miro a su esclava negra.

-Deseo que le ayudes con las prendas…- dijo Yoochun dirigiéndose a la esclava negra -…necesitara ayuda para vestirse…- dijo mirando a su esclava mientras Junsu bajaba su mirada sorprendido al escucharlo.

-Si señor no se preocupe…- contesto la mujer asintiendo con su cabeza.

-Gracias…- Yoochun le agradeció y llevo su mirada a Junsu -…mañana por la tarde saldremos, así que hoy tomate el día de descanso…- dijo Yoochun ah Junsu quien levanto su mirada con temor.

-Si…señor…- contesto Junsu

-Ahora pueden retirarse…- dijo Yoochun volteándose evitando mirar a Junsu.

-Como diga señor…- contesto la esclava negra -…vamos Junsu…- dijo la mujer ayudándolo con una de las cajas, cuando la puerta sonó Yoochun volteo, camino hasta llegar a su sillón donde se dejo caer, llevo su mirada al techo, sus ojos brillaban por las lagrimas contenidas ya no sabia si lo que hacia estaba bien, pero lo único que quería es tenerlo cerca y evitar que Junsu esté cerca de Jasufa, llevo sus manos a sus cabellos y cerro sus ojos tratando de calmarse.

Junsu y la esclava fueron hasta su cuarto donde dejaron las cajas, se sentó observando las cajas, la esclava negra sentada frente a Junsu mirándolo.

-No piensas abrirlas…- Pregunto la mujer, Junsu levanto su mirada hacia la esclava y negó con su cabeza. La mujer al ver los ojos de Junsu que parecían contenerse para no dejar caer las lagrimas, trato de hacerle ver que Yoochun estaba siendo más que amable con el.

-Puedo asegurar…que el joven Yoochun esta mas que interesado en ti…para hacer lo que esta asiendo…- al escucharla Junsu la miro sorprendido y luego de unos segundos bajo su mirada.

Negó con su cabeza, pues no deseaba hacerse alguna ilusión creía que Yoochun jamás podría fijarse en el y quererlo mas aya de su cama, no podía darse el lujo de pensar que el sentía algo por él.

-Junsu…se que te dije…que eh visto esta historia repetirse muchas veces…pero en realidad lo que te esta pasando a ti es diferente…tal vez me equivoque…y…

-No…por favor no…- suplico Junsu no quería escuchar mas, quería continuar con su decisión y temía sufrir haciéndose alguna ilusión.

La esclava lo observo apenándose al verlo triste, creyó que mejor debía dejar que Junsu se diera cuenta solo que su amo pudo haberse enamorado de él.

-Está bien…será mejor que te deje…- dijo la esclava negra levantándose para salir del cuarto.

-Gracias…- susurro Junsu, la mujer al escucharlo se detuvo pero después continuo y salió del cuarto, Junsu llevo su mirada a las cajas, no se sentía capaz de abrir y ver la ropa que ahí había, se recostó sobre su cama y observo aquellas cajas que estaban muy cerca del.

Entre sus brazos su esposo dormía profundamente, se separo de el recostándolo suavemente.

Sentado Yunho observo a su dormido esposo, se levanto de la cama, tenia pensado pasar un hermoso día junto a Jaejoong pues al recordar que el día de mañana tendría que llevarlo al castillo del rey le preocupaba, no quería pensar en los malos entendidos que de seguro su prima estaría dispuesta a ocasionar, necesitaba regalarle el mejor día a su esposo pues que creía que Jaejoong no la iba pasar muy bien en aquella fiesta, además que sabia que le iba costar mucho protegerlo y todo por que había una hora en la que los hombres solían pasar a otro salón donde podían conversar de negocios sin ser molestados por sus mujeres.

Camino hasta cruzar el jardín y llegar a su cuarto donde busco su ropa y se cambio, sabia que necesitaba hablar con Jaejoong sobre el cuarto en el que compartirían y así poder mudar sus cosas y no tener que irse todas las mañanas para poder cambiarse, pero creyó que esa conversación por ahora podía esperar así que una vez listo volvió al cuarto de su esposo.

Se acerco hasta la cama y se sentó, el cuerpo de jaejoong empezó a moverse suavemente y sus ojos intentaban abrirse dando unos cuantos parpadeos, yunho se acerco y apoyo sus manos sobre la cama a cada lado del cuerpo de su esposo, su rostro quedo frente al de Jaejoong a una cierta distancia, deseaba que lo primero que Jaejoong viera al abrir sus ojos fuera a el.

Finalmente gano su batalla contra sus pesados parpados, sus ojos abiertos ya, pudo ver el rostro de Yunho frente suyo, provocando que abriera mas sus ojos ante la sorpresa.

-Dormiste bien?…- pregunto Yunho, sus miradas fijas una con la otra se mantuvo por unos segundos.

-Si…-susurro bajando su mirada, alejándola de los fuertes ojos de Yunho.

-Es bueno escuchar eso…- susurro Yunho acercando su rostro, al darse cuenta Jaejoong llevo su mirada a los ojos de Yunho y antes que pudiera dar un parpadeo los labios de Yunho estuvieron sobre los suyos, incapaz de resistirse a esas caricias sobre sus labios dejo que sus parpados se cerraran correspondiendo al beso de Yunho.

Esta vez Yunho dejo los labios de Jaejoong de forma sorpresiva al sentir que si continuaba besándolo solo iba aumentar mas su fuerte deseo por tenerlo bajo su piel y hacerlo suyo, creía que debía controlarse y darle tiempo a Jaejoong de acostumbrarse a su nueva vida como su esposo.

Yunho con el rostro separado de Jaejoong observo a su esposo quien tenia la respiración levemente acelerada y sus ojos aun cerrados, miro aquellos labios entre abiertos que parecían esperar por los suyos llevo sus labios y dejo un suave y pequeño beso sobre los de su esposo.

Cuando los ojos de Jaejoong se abrieron Yunho le dio una sonrisa y después de unos segundos fueron correspondidos con la hermosa sonrisa de Jaejoong, Yunho se incorporo quedando sentado mientras su esposo hacia lo mismo.

-Debes tener hambre…- Yunho pregunto sabiendo perfectamente que así era pues el día anterior poco había probado alimentos apenas y las cerezas que la nona les trajo, pues se habían quedado sobre la cama abrasados toda la tarde y el resto de la noche, Jaejoong asintió con su cabeza.

Yunho se levanto y fue donde el ropero donde empezó a buscar algún vestido para su esposo mientras la mirada de Jaejoong le seguía.

Dos suaves golpes en la puerta hicieron que Yunho se detuviera y tomara uno de los vestido, su mirada fue hacia la puerta sabiendo bien quien era.

-Señor…- llamo la nona tras la puerta del cuarto.

-Pasa…- Yunho le permitió cruzar la puerta.

-Buenos días…- saludo la nona cuando estuvo dentro del cuarto, ella llevo su mirada a Yunho quien tenía un vestido en sus manos y luego llevo su mirada a Jaejoong.

-Buenos días…- Jaejoong le saludo, la nona al escucharlo sonrió.

-Permítame señor…- dijo la nona acercándose a Yunho para que el le entregara el vestido, con el vestido en sus manos la nona se acerco a Jaejoong, ella soltó los lasos que agarraban la hermosa tela transparente que yacía atada a los postes de la cama, cubriendo en forma de cortina, la nona se sentó cerca a Jaejoong, al ver lo que la nona hacia Yunho sonrió parado cerca del ropero cerrando la puerta.

-A ver…- dijo la nona mostrando el vestido a Jaejoong quien empezó a quitarse su camisón para que la nona le ayudara a poner el vestido que Yunho escogió.

Yunho llevo su mirada a la cama y observo la espalda desnuda de su esposo, sonrió nuevamente pues la nona había soltado las hermosas telas para evitar que Yunho viera a su esposo mientras lo cambiaba.

Contemplo la blanca piel de su esposo la cual pocos segundos después fue cubierta por su largo cabello que había estado hacia delante, camino acercándose rodeando la cama buscando el rostro de su esposo, camino despacio, Jaejoong miro al pie de su cama y levanto la mirada encontrándose con la de Yunho quien caminaba sin despegar la mirada de el, mientras la nona terminaba de ponerle el vestido, Jae bajo su mirada y volteo su rostro observando ahora al nona.

-Estas listo…- dijo la nona levantándose, Yunho pronto estuvo cerca de la nona, estiro su mano hacia su esposo, Jaejoong lo miro y puso su mano sobre la de él.

Jaejoong pretendía bajar de la cama cuando su mirada la llevo al piso donde sus zapatos no estaban, la mirada de Yunho siguió la de su esposo y la nona también lo hizo.

-Espera!…- dijo la nona y se apresuro a ir al ropero en busca del zapato de Jaejoong, un suave frote sobre sus manos hicieron que el buscara la mirada de Yunho, este guiño su ojos y mostró su otra mano la cual la había tenido hacia tras y sostenía los zapatos de Jaejoong.

-Pe…pero…- Jaejoong susurro abriendo sus ojos grandes al ver que Yunho tenía en sus manos sus zapatos.

-Shuu!…- yunho llevo uno de sus dedos sobre su labio indicando a Jaejoong que no avisara a la nona, Jae lo miro sorprendido, lo siguió con la mirada mientras Yunho soltaba su mano y se agachaba para ponerle los zapatos.

Yunho agachado ya con una mano tomo el pie de Jaejoong y con la otra empezó a ponerle el zapato, cuando esta calzo perfecto Yunho llevo ambas manos por el tobillo de su esposo acariciándolo subiendo despacio, Jaejoong apretó sus manos sobre las sabanas y su corazón se acelero, Yunho lo observo y sonrió cuando las mejillas de su esposo se tornaron rojas, se detuvo cuando sus manos llegaron a su pantorrilla y las faldas del vestido tapaban sus brazos, Jaejoong se agito.

Mientrastanto la nona aun buscaba los zapatos que eran para ese vertido, Yunho tomo el otro zapato e introdujo el pie de Jaejoong , una vez que el zapato fue calzado Yunho repitió en aquella pierna aquellas caricias que iban subiendo lentamente por el tobillo de Jaejoong.

-Que…extraño…- susurraba la nona mientras buscaba

-Yun..Yunho…- jaejoong susurro queriendo suplicar que se detuviera pues se estaba avergonzando y temía que la nona pudiera verlos, pero Yunho solo observo aquellos hermosos ojos que por unos instantes se serraron ante sus caricias.

Se detuvo cuando su manos sostuvo la pantorrilla de su esposo, dejo libre a Jaejoong y se levanto, se acerco y lo rodeo con los brazos pegando el rostro de Jae a su pecho pues sus mejillas estaban bien rojas, lo cubrió cuando la nona dejo de buscar y entendió que se había tratado de una travesura de Yunho, quien el ver que su nona no le permitió vestir a su esposo decidió ser el quien le pusiera los zapatos y así poder tocar la hermosa piel de su esposo.

Yunho sonrió complacido mientras abrasaba a su esposo, la nona se acerco y jalo de la oreja a Yunho obligándolo a que soltara a Jaejoong.

La nona se acerco a jae quien tenía aun las mejillas rosadas.

-Vamos…es hora de desayunar…- dijo la nona tomando la mano de Jaejoong, quien ya puesto sus zapatos bajo de la cama y llevo su mirada a Yunho quien le dio una sonrisa y asintió con su cabeza para que obedeciera a la nona.

La nona camino llevando a Jaejoong mientras Yunho tras suyo camino y se adelanto para abrir la puerta, Jae paso primero quedando la nona tras suyo.

-Por que alejas a mi esposo de mí…- susurro Yunho en el oído de su nona

-Mi niño sabes bien que no es así…lo único que quiero es que Jaejoong desayune…- susurro la nona.

-Pero pude haberle ayudado a vestirse…creo poder…- susurro Yunho con una sonrisa.

-Usted no piensa dejarlo descansar verdad?...- susurro la nona -…además no esta bien que usted ande cambiando a su esposo…

-Nona…no hay nada que no aya visto y que no pueda mirar…- susurro Yunho sonriendo y avanzo hasta alcanzar a Jaejoong a quien tomo de la mano, su nona sonrió y movió su cabeza en negación, pero feliz de ver a Yunho tan enamorado.

Después de haber tomado su desayuno en el comedor Jaejoong caminaba por los jardines, Yunho a unos pocos metros de distancia observaba cada paso de su esposo y a su lado su nona lo acompaño.

-Joven…no debe preocuparse por la fiesta del rey…- susurro la nona dándose cuenta de la preocupación de Yunho quien no podía engañarla pues lo conocía muy bien.

-Temo llevarlo…- susurro Yunho observando a Jaejoong quien distraído caminaba delante de ellos a una distancia que evitaba que pudiera escuchar los susurros.

-Pero…si es por la duquesa creo que usted pronto podrá cumplir con su deseo y…

-No…- Yunho le interrumpió mirándola, ambos se detuvieron, la nona lo miro atentamente.

-Mi niño…debe usted tener un hijo…acaso no quiere…

-No nona…Jae no está preparado para un embarazo...no ahora – susurro llevando la mirada a su esposo -…no permitiré que se embarace…- Yunho creía que Jaejoong era muy débil y temía hacerle daño al intentar embarazarlo, así que lo había estado cuidando desde el principio, cuando lo tomo por primera vez lo cuido de no penetrarlo totalmente no solo para no lastimarlo y causarle dolor si no para poder salir de el antes de dejar su semilla, de la misma forma cuando lo tomo en la piscina aunque no pudo evitar entrar totalmente en el, cuido mucho no terminar dentro de su esposo.

La nona guardo silencio pues entendía a yunho, ella creía que el temía mucho perder a Jaejoong, sabia lo mucho que le había costado superar su desamor y ahora el solo quería cuidar a su esposo de cualquier sufrimiento.

-Además…no es mi tía la que me causara problema…- Yunho hablo ante el silencio de su nona -…es la presencia de Go Ah Ra…lo que me preocupa, se que tratara de acercarse a Jaejoong y lo peor es que tendrá la oportunidad…

-Lo entiendo…- susurro la nona pues entendió que Go Ah Ra estaría en el mismo salón que Jaejoong cuando todos los hombres pasaran a conversar lejos de sus mujeres -…tal vez deba preparar a Jaejoong para esa fiesta al vertiéndole del peligro…- susurro la nona y Yunho la miro.

-Tienes razón…eso es lo único que puedo hacer ahora…gracias –dijo Yunho alejándose de su nona, llego a alcanzar a su esposo quien ya estaba algo lejos de ellos, la nona dio la media vuelta y camino en dirección al castillo, pues debía preparar las prendas de la condesa ya que mañana era la tan esperada fiesta.

-Me extrañaste…- susurro Yunho tras Jaejoong haciendo que este se sobresaltara por la sorpresa y sonrió sin voltear a mirarlo -…por que yo te eh extrañado estos segundos que te alejaste de mi sin piedad…- susurro Yunho en su oído, Jaejoong movió su rostro y su cuerpo en su dirección al sentir el cálido aliento de Yunho en su oído, sus miradas se encontraron, Yunho le sonrió.

Lo rodeo con sus brazos pegando el cuerpo de su esposo al suyo, Jaejoong con sus manos sobre el pecho de Yunho se sorprendió por el sorpresivo abrazo.

-Jae…- susurro Yunho en su oído -…hay algo que debes saber…

Al escucharlo Jaejoong alejo su cuerpo para poder ver el rostro de su esposo, pero antes que Jaejoong quede libre de los brazos de su esposo Yunho lo tomo de la cintura.

-Que…pasa…- Jaejoong pregunto intrigado mirando los ojos de su esposo.

-Es sobre la fiesta de mañana…ahí encontraras a muchas personas buenas y otras que lo único que querrán es ofenderte…- Jaejoong abrió sus ojos grandes al escuchar sus ultimar palabras -…debes cuidarte de Go Ah Ra…ella seguro estará ahí y lo único que quera es lastimarte, así que trata de alejarte de ella, no escuches sus palabras y si no puedes…recuerda que sus palabras son solo para hacerte daño… ella disfruta lastimándote….

-Pero…pero que?...no hice nada para que me odie…- susurro Jaejoong nervioso.

-tú no hiciste nada…si ella no te quiere no es por ti… todo lo hace para lastimarme…sabe que la única forma de herirme es haciéndote daño…

-Pero…no entiendo porque te odia… - susurro sin comprender Jaejoong, al escucharlo Yunho deseo poder explicarle que era porque ella lo amaba pero él no pudo corresponderle, el miedo de que Jae malinterpretara sus palabras hicieron que el callara esa parte de la historia.

-Está en su naturaleza el disfrutar lastimar a los demás…- susurro Yunho pegando a su cuerpo a Jaejoong atrayéndolo por la cintura y llevo sus labios sobre los rosados labios de su esposo, besándolo suavemente, sin poder resistirse Jaejoong correspondió y llevo sus manos por el cuello de Yunho, lo rodeo con sus brazos tras su cuello, entregándose al beso.

Después de pasar la tarde en el jardín Yunho distrajo a Jaejoong para no volver a la conversación de su prima, paseo con el por todo el alrededor del castillo por cada jardín que tenía el palacio, volvieron al castillo cuando Yunho creyó que Jaejoong estaba cansado de tanto caminar.

En su cuarto Jaejoong se puso su camisón mientras Yunho había ido a su cuarto a cambiarse, entro en su cama, se recostó esperando por su esposo, en los minutos que Yunho demoraba en venir Jaejoong pensaba en la fiesta y en lo desagradable que iba ser ver a Go Ah Ra, pero tenía pensado obedecer a su esposo y no escucharla.

Pronto Yunho cruzo la puerta del jardín y entro a la habitación, recostándose al lado de su esposo a quien abrazo, dejando un beso sobre su frente.

Temprano Junsu se levanto, su mirada se quedo fija en aquellas cajas, desvió su mirada y camino en dirección de la cocina había llegado el día en que iría junto a Yoochun al palacio del rey, el solo hecho de pensar que estaría rodeado de gente de la clase alta lo hizo temblar, no sabía que podía hacer el ahí.

-Buenos días…- Junsu saludo al entrar en la cocina.

-Buenos días…- contesto la esclava negra y puso el desayuno de Junsu en la mesa -…toma rápido y ve al cuarto me desocupo en un rato…- dijo caminado hacia las ollas revisando que no se le quemara nada.

Junsu se sentó y empezó a tomar su desayuno, alejo la tasa de sus labios al darse cuenta que era leche lo que tomaba, hizo el mayor esfuerzo por tragar la leche que tenía en su boca, pues le había agarrado mucho asco y no podía tomarlo.

-Debes tomarlo Junsu…- la esclava le resondro -…lo necesitas…hazlo por tu bebe…- al escucharla Junsu tomo nuevamente la taza y la llevo a sus labios, por su bebe estaba dispuesto a tomarlo aunque le costara aguantar lo desagradable que sentía el sabor.

Después de haber terminado de desayunar Junsu empezó a tomar las verduras y a picarlas cuando la esclava estuvo distraída.

-No junsu no deberías hacer eso…- dijo la esclava negra al verlo -…deberías estar alistándote…ve yo te doy en alcance en un rato y te ayudo…- dijo la mujer quitándole las verduras a junsu y levantándolo, empujándolo, sacándolo de la cocina.

-Pero…- junsu dijo pues el quería ayudarla.

-Nada de pero…no olvides es una orden de tu amo hoy no tienes que trabajar…termino pronto y te alcanzo…ve…- la esclava le insito a ir a su cuarto.

Junsu se dio la vuelta pues sabia que debía obedecer la orden de su amo quien le había pedido que no trabajara ese día ya que por la tarde estarían saliendo al castillo.

Entro a su cuarto y al ver las cajas quiso salir de ahí, pero se detuvo sabia que debía obedecer, se acerco al lado de su cama donde el tenia una pequeña mesa con cajones, saco de ella lo necesario para poder darse una ducha.

Se dirigió al cuarto de baño, donde se desnudo y dejo que el agua cayera sobre el, deslizo sus manos por su vientre ya tenia casi un mes de embarazo y apenas se podía ver un ligero crecimiento que a simple vista no se notaba, pero sus manos lograban sentir la diferencia, suspiro retirando sus manos, deseaba tanto sentir a su bebe moverse pero aun era muy pronto, permaneció un buen rato en el agua relajándose ya que estaba muy nervioso por que debía salir con Yoochun.

Cuando regreso a su cuarto la esclava negra lo esperaba sentada, avanzo despacio temeroso pues ya había llegado el momento de abrir las cajas y ver lo que debía ponerse, se sentó sobre su cama y miro a la mujer.

-No piensas abrirlo…- dijo ella refiriéndose a las cajas, Junsu bajo su mirada y observo un momento las 2 cajas que tenia cerca de su cama, regreso su mirada a la esclava.

-Bien lo are yo…- dijo y se acerco agachándose para abrir la caja, Junsu la siguió con la mirada, la mujer quito la tapa de la primera caja, la más grande.

Los ojos de Junsu se abrieron grandes de la sorpresa al ver el interior de la caja.

-Que hermoso…- dijo la mujer sacando el vestido, levantándolo para poder apreciarlo mejor.

Un hermoso vestido color perla con bordados de flores celestes y rosadas que tenía la parte de adelante encaje del mismo color del bordado que bajaba desde el pecho y se extendía por todo el largo del vestido, la esclava negra volteo a mirar a Junsu.

-No…- Junsu negó con su cabeza mirando el vestido -…yo no debo ponerme…no puedo…

-Junsu…- susurro la esclava -…debes hacerlo, así el joven lo ah decidido….

-Pero…ese vestido…-susurro Junsu al ver lo hermoso que era y creía que no debía ponérselo pues era demasiado, nunca había vestido uno de esos y jamás pensó en toda su vida que algún día podría ponérselo.

La esclava negra dejo el vestido sobre la cama de Jusnu mientras sacaba las demás prendas, entre ellas el corsé y los encajes que iban bajo el vestido, abrió la otra caja y en ella se encontraba el zapato.

-Será mejor que empecemos…- dijo la mujer pues debía ayudarle a vestirse ya que Junsu no sabía cómo ponerse toda esa topa -…ven…- ella lo llamo, Junsu dudo unos segundos pero se tubo que levantar y acercarse pues no tenia caso negarse.

Desnudo Junsu dejo que la mujer lo ayudara a vestirse, pego su mano a la pared cuando la mujer empezó a ajustar el corsé en su cuerpo.

-No podremos ajustarlo mucho…ya que estas embarazado…- hablo tras Junsu la mujer -…así que solo entallare un poco y lo atare… - al escucharla Junsu asintió con su cabeza.

Cuando finalmente la esclava negra termino de vestir a Junsu, la mujer lo miro quedándose al sombrada de lo hermosos que lucia.

-Nadie podrá siquiera imaginar que no eres una dama…- dijo la mujer arreglándole su cabello, emocionada la esclava adornaba el cabello de Junsu.

-Pero no soy…- susurro triste Junsu -… soy solo…

-No…olvida hoy quien eres…si el te esta dando la oportunidad de ser otro...debes disfrutar…iras al palacio de un rey…- dijo la esclava tratando de animar a Junsu.

-Si…- dijo con una leve sonrisa.

-Vamos el debe estar esperando…deben partir al castillo del rey…no esta nada cerca…- dijo la esclava llevando a Junsu al salón.

Junsu camino tras la esclava negra temiendo ver a Yoochun, le avergonzaba vestir tal hermoso vestido, mientras avanzaba al salón su corazón iba golpeando cada vez mas fuerte contra su pecho.

-Señor…- dijo la esclava negra deteniéndose cuando entro al salón, Yoochun estaba parado mirando por la ventana, al escuchar a su esclava llevo su mirada a ella, la mujer se movió poniéndose cerca de la pared dejando que Yoochun pudiera ver a Junsu quien se había parado tras ella.

Ahí frente a el la hermoso imagen de Junsu quien solo se embellecía mas por el vestido que lucia, Yoochun abrió sus ojos grandes al verlo, pero sus ojos dejaron de mostrar sorpresa cuando Junsu levanto su mirada tímidamente.

-Vamos…- dijo Yoochun acercándose a la puerta y abriéndola para que Junsu saliera.

-Suerte…-le susurro la esclava a Junsu, cuando este empezó a alejarse para salir.

Cuando cruzo la puerta, vio el carruaje que los esperaba, pero también pudo ver a Jasufa quien lo observaba desde la puerta del establo, desvió su mirada y camino hacia el carruaje, al lado de la puerta el chofer de Yoochun le ayudo a subir mientras Yoochun venia acercándose para subir.

Junsu nervioso pues en el interior del carruaje estaría solo con Yoochun, al verlo subir y sentarse frente a el, desvió su mirada.

Yunho despertó y entre sus brazos acurrucado Jaejoong dormía, se levanto alejando las manos de su amado suavemente, dejo el dormitorio, se dio un baño en la piscina del jardín y después fue a su cuarto donde empezó a cambiarse, pero antes de terminar agarro las prendas que le faltaban, apenas y su pantalón se había puesto, regreso al cuarto de su esposo para continuar cambiándose ahí.

Parado cerca de la cama de su esposo Yunho se ponía la camisa.

-…Buenos días…se puede…- la voz de la nona se dejo escuchar tras la puerta.

-Si nona…- Yunho le dio permiso, mientras en la cama Jaejoong empezaba a moverse, despertándose, llevo sus manos a su rostro tapándose de la luz que molestaba su visión.

-Señor…aquí traigo el traje de su esposo…acaba de llegar…- dijo la nona cargando las cajas con la ropa.

-Gracias…- Yunho le agradeció.

Jaejoong al escuchar la voz de la nona retiro sus manos de su rostro y las apoyo sobre la cama levantándose, sentándose.

-Buenos días…Condesa…- la nona saludo.

-Bue...Buenos días…- Jaejoong contesto apenado por que se había quedado dormido y Yunho ya estaba levantado cambiándose.

-Jaejoong…vamos…- la nona lo llamo para llevarlo a bañarlo.

-Si…-contesto Jaejoong bajando de la cama y antes que pudiera alcanzar a la nona Yunho lo tomo del brazo jalándolo, con ambas manos lo sostuvo del rostro y le robo un beso, cuando Jaejoong tubo sus labios libres sus ojos solo podían mirar a los de su esposo quien aun lo sostenía, Yunho le sonrió.

-Señor…déjelo ya…- la nona resondro a Yunho y tomo de la mano a Jaejoong alejándolo, llevándolo al jardín, cerró la puerta una vez que estuvieron dentro.

Una vez que la puerta del jardín se cerro Jaejoong se despojo de su ropa de dormir y entro en las aguas de la piscina, sonrió por el beso que sorpresivamente Yunho le robo.

La nona fue echando en la piscina las dulces esencias de baño en el agua, mientras Jaejoong se bañaba y jugaba con el agua. Después de varios minutos en los cuales Jaejoong permaneció dentro del agua la nona lo insito a salir, con pesar salió de aquellas aguas que lo habían cautivado por su dulce aroma, la nona lo ayudo a secar su cuerpo, le puso un camisón de baño y lo cubrió con una capa.

Cuando salieron Yunho ya estaba casi listo, una joven entro al cuarto trayendo el desayuno, lo puso en la mesita que estaba en medio de los sillones.

-Será mejor que desayunen y luego te cambio…- dijo la nona a Jaejoong y este asintió con su cabeza.

-Por favor desayuna con nosotros…- Yunho le rogó

-No señor…no está bien….

-Pero pedí que trajeran tu desayuno nona así que tendrás que acompañarnos…- Yunho le dejo saber sonriéndole y ella no pudo negarse.

Jaejoong se sentó junto a la nona y Yunho frente a él.

-Señor…se quedara en el palacio del rey…- la nona pregunto

-No lo creo…- dijo Yunho pues no quería permanecer mucho tiempo ahí sabiendo que exponía a su esposo, miro a Jaejoong quien llevaba su tasa a sus labios -…pienso regresar hoy mismo…tal vez regrese en la madrugada…por favor ordena que se turnen y que siempre haya alguien quien pueda abrir las rejas del castillo….

-Si…señor no se preocupe…

-No…está lejos…el palacio del rey…- Jaejoong pregunto preocupado por tener que regresar muy tarde.

-No realmente…pero si prefieres nos quedamos…-Yunho contesto al ver la preocupación en su esposo, Jaejoong asintió con su cabeza -…entonces nos quedaremos…

-Gracias…- Jaejoong contesto.

-Igual yo hablare con los guardias para que estén en las rejas por si a caso vuelve señor…

-Está bien…- dijo Yunho tomando el último sorbo de su tasa.

-Sabes si llego alguna carta…- Pregunto Yunho a su nona.

-OH si señor pero no pude traérselas…lo siento…- dijo la nona

-No te preocupes iré por ellas…- dijo Yunho levantándose y se acerco a Jaejoong a quien dio un beso en su frente -…regreso pronto…- le susurro asiendo que su esposo se sonrojara, Yunho se alejo y cruzo la puerta del cuarto.

La nona se levanto cuando termino de desayunar y fue donde las cajas y las abrió, Jaejoong se levanto cuando dejo la tasa sobre la mesita y se acerco a la nona.

-A ver ahora si Jaejoong empezaremos a cambiarte -…dijo la nona y este se quito la capa que lo cubría y se despojo de la ropa de baño.

Después de haberse puesto Los primeros encajes, Jaejoong se volteo y puso sus manos sobre el poste de la cama del cual se agarro, pues sabía que ahora le pondría el corsé.

La puerta se abrió y Yunho entro al cuarto trayendo en sus manos una carta, se detuvo cuando vio a Jaejoong pegando su frente y sosteniéndose del poste de su cama mientras la nona rodeaba la cintura y pecho de Jaejoong con el corsé.

-Ah…- el primer quejido de dolor escapo de los labios de Jaejoong cuando la nona ajusto el corsé.

-Pero…que…- dijo Yunho al escuchar a su esposo quejarse -…es necesario que lo tortures así…- se quejo Yunho y Jaejoong al escuchar su voz levanto su mirada.

-Señor…solo debo ajustar un poco…- la nona contesto pero Yunho no estaba conforme no quería que Jaejoong sufriera al ponerse ese vestido.

-Estoy bien…- Dijo suavemente Jaejoong -...continua por favor nona…- susurro alejando su mirada de Yunho pegando su frente otra vez al poste.

Yunho no podía seguir viendo como la nona ajustaba aquel corsé al frágil cuerpo de su esposo, pero no podía impedirlo ya que su esposo estaba de acuerdo, se dio la vuelta y salió del cuarto, camino en dirección al salón y así poder leer su carta.

Después de 2 quejidos mas de dolor de Jaejoong, la nona pudo atar el corsé cuando vio que había logrado entallarlo bien.

-Lo siento…no quise lastimarte…- se disculpo la nona.

-Estoy bien nona…estoy acostumbrado a usas el corsé…- contesto Jaejoong tratando de quitar la culpa en su nona.

-Ahora el vestido…- susurro la nona tomando la prenda y mostrándole a Jaejoong quien se enamoro del vestido que era de un color entre el melón y el rosado, era el vestido más hermoso que había visto y de un maravilloso diseño.

-El joven lo acaba de comprar…es un hermoso modelo verdad?…- dijo la nona al ver que a Jaejoong le gustaba el vestido, este asintió con su cabeza.

La nona espeso a ponerle quedando como siempre perfecto en el cuerpo de Jaejoong, como si cualquier vestido que se puniera fuera exactamente hecho para él, la nona al verlo con el vestido se maravillo pues con aquella prenda solo resaltaba mas su gran belleza, ella se acerco a la caja y tomo los hermosos zapatos dorados y los puso en el piso para que Jaejoong pusiera su pie dentro de los zapatos.

La nona cepillo el cabello de Jaejoong dejándolo suelto y poniendo unas cuantas rosas en su cabello del mismo color del vestido, un gran collar en su cuello y por último los guantes blancos.

Yunho regresaba al cuarto pues había leído la carta que era de Yoochun informándole que estaría en la fiesta del rey y que deseaba hablar con él cuando pasaran al salón, donde los hombres se reunían para hablar de negocios lejos de sus mujeres y así poder conversar con mas calma.

Yunho empujo la puerta del cuarto y guardo la carta en su bolsillo, levanto la mirada y se detuvo de golpe, su corazón golpeo fuerte contra su pecho, sintió que el aire le falto por unos segundos.

Maravillado por la hermosura de su esposo Yunho avanzo despacio sin poder despegar su mirada de Jaejoong quien bajaba su mirada y se sonrojaba al ver como Yunho lo observaba.

-Hermoso…verdad? …- la nona le hablo al conde, quien solo observaba a su esposo deslumbrado.

-La criatura más hermosa…- susurro Yunho y al escucharlo Jaejoong levanto su mirada encontrándose con la de su esposo, sonrió nervioso sintiéndose intimidado por la intensa mirada de Yunho.

-Amor…debemos irnos…-susurro Yunho estirando su mano, acercándose a su esposo para que lo tomara, asintió con su cabeza y tomo la mano de Yunho, la nona tomo el saco que Yunho había dejado en el sillón y camino tras los jóvenes esposos saliendo para despedirse de ellos.

El hermoso carruaje blanco estaba listo en la entrada del castillo esperando por el y su esposo, Jaejoong abraso a la nona dándole un beso en la mejilla, se despidió de ella y subió al carruaje con la ayuda de Yunho quien sujeto su mano.

Cuando Jaejoong estuvo dentro del carruaje Yunho volvió su mirada a su nona y se acerco a ella.

-Mi niño se olvidaba…- ella dijo mostrándole el saco, Yunho lo tomo y se lo puso sonriendo.

-Gracias…- susurro besando la frente de su nona.

-Diviértanse…- la nona dijo antes que Yunho subiera al carruaje.

-Lo aremos nona…- dijo Yunho abriendo la puerta del carruaje -…por favor ve despacio…- Yunho le hablo al chofer de su carruaje, el deseaba que Jaejoong observara todo el paisaje camino al palacio del rey, pues poco lo había sacado de su castillo y como tenia mucho tiempo para llegar a la fiesta, decidió ir despacio y disfrutar junto a su esposo la vista desde las ventanas del carruaje.

Entro al carruaje y se sentó frente a su esposo quien al verlo le sonrió y el devolvió la sonrisa.

El carruaje empezó a moverse y Jaejoong llevo su mirada a la ventana, Yunho abrió mas las cortinas que cubrían para que pudieran apreciar mejor y se acerco a Jaejoong sentándose a su lado, tomando la mano de su esposo entre las suyas.

Conforme el carruaje avanzaba y se alejaban del castillo Yunho enseñaba a Jaejoong los hermosos lugares y le explicaba las historias que algunos encerraban.

***LA FIESTA***

Jaejoong observaba al sombrado por los hermosos paisajes y bellas lagunas que daban la bienvenida al castillo del rey, podía divisar el gran castillo, muchos carruajes delante suyo y tras suyo iban llegando.

Yunho presiono suavemente la mano de su esposo para atraer su mirada, Jaejoong lo miro a los ojos.

-Jae…- susurro Yunho y no pudo continuar, solo lo miro, había querido recordarle que si se encontraba con su prima Go ah Ra, que no la escuchara y que tratara de evitarla si era posible, pero creyó que mejor era no mencionarla y olvidarse de ella, ya que en aquel gran castillo y con tantos invitados esperaba que su esposo no se la encontrara -…te amo…- susurro Yunho y beso su mejilla, el carruaje se detuvo.

-Vamos…- Yunho dijo tomando la mano de Jaejoong, lo ayudo a bajar, Yunho puso su brazo para que Jaejoong lo tomara mientras avanzaban a los amplios escalones que lo llevaban a la entrada del palacio, grandes balcones y grandes puertas lucían abiertas mostrando la belleza del interior del salón del palacio, donde se iba realizar el baile.

Aun la luz del día alumbraba el lugar y las familias con mayor poder iban llegando, Yunho diviso a lo lejos el carruaje de su tía, pero no logro a ver el del esposo de su prima, al menos se sentía tranquilo de saber que aun no tenía que preocuparse por su presencia.

Cruzaron la gran puerta del castillo, la gente ahí al ver al conde y su esposo lo saludaron haciendo reverencia, Jaejoong a su paso dejaba al sombrados a los invitados por la gran belleza que poseía, se detuvieron en la puerta del gran salón y desde ahí pudieron ver a toda la gente de la nobleza reuniéndose.

A la entrada al salón eran anunciados por un hombre del rey que iba mencionando los grandes títulos de algunos invitados antes que entraran en el salón y así todos puedan saludarlos.

-El conde de Provenza y su esposa! …- dijo el joven y todos llevaron sus miradas a Yunho reconociéndolo mientras el avanzaba al interior del salón junto a Jaejoong quien sostenía el brazo de su esposo, atrayendo la miradas de todos, después de recibir el saludo de los invitados mientras avanzaban a tomar su mesa guiados por el joven que los anuncio, Yunho diviso a su tía, se disculpo del joven para que este no se molestara en guiarlo y así el pudiera ir a saludar a la duquesa.

-Un placer verla…- Yunho dijo tomando la manos de su tía y dejando un beso sobre ella.

-Me alegra verte…- dijo ella, viendo que Yunho volvía a las reuniones de sociedad a las cuales el había rehusaba ir antes cuando sufría por su antiguo amor -…Jaejoong!…- dijo la duquesa mirándolo y él hizo reverencia a la duquesa, ella sonrió al ver la hermosura del esposo de su sobrino, el cual llamaba la atención de los demás invitados.

Satisfecha la duquesa dejo que su sobrino y su esposo tomara asiento en sus respectivas mesas, ella no tenía pensado molestar a Jaejoong con el tema del embarazo ya que Yunho le había pedido más tiempo, se conformaba al ver que aun nadie mencionaba nada sobre la descendencia del conde.

-Una buena elección…para un conde…- la mujer de la mesa contigua dijo a la duquesa mirando a Jaejoong.

-Si…yo no puedo equivocarme al conseguir una esposa para el…- contesto la duquesa muy orgullosa como si ella fuera quien eligió a Jaejoong para esposa de Yunho.

Los sirvientes del rey iban sirviendo vino en cada mesa, listos para el brindis cuando el rey hiciera su entrada ya que habían llegado la mayoría de los invitados más importantes entre ellos duques, condes y nobles de buenas familias.

Se anuncio la entrada de los reyes, Yunho se levanto y Jaejoong lo siguió, todos aplaudieron a la entrada del Rey y la Reina, con copa en mano los reyes agradecieron la presencia de todos sus invitados y brindaron, deseando que todos disfrutaran de la fiesta.

La oscuridad del atardecer se iba incrementando las grandes y hermosas arañas de focos iban encendiéndose al interior del salón, Jaejoong llevo su mirada a uno de los balcones y pudo ver que la oscuridad ya caía.

-Conde…- el rey saludo a Yunho -…me alegra que haya venido…- dijo estrechándole la mano, al escuchar la voz Jaejoong volteo alejando su mirada del balcón.

-Siento no haber asistido a su fiesta el año pasado…- Yunho se disculpo, Jaejoong se sorprendió al ver al rey hablando con su esposo.

-…Su esposa…- dijo el rey mirando a Jaejoong.

-Un placer conocerlo…-Jjaejoong dijo levantándose y haciendo reverencia al rey.

-Joven y Hermosa…- dijo el rey deslumbrado por la impresionante belleza de la condesa, Yunho aclaro su garganta ante la fija mirada del rey sobre su esposo, quien ya rodeaba los 40 años y solía buscar jóvenes amantes, el rey se apeno en su interior de no haber encontrado antes el a tal hermosa criatura quien era esposa del conde y a quien él hubiera gustado mucho tener bajo su protección, pero sabiendo que era esposa del conde se resigno.

-Disfruten de la velada…- dijo el rey retirándose a saludar a los demás invitados.

Los músicos empezaron a tocar las bellas melodías y los invitados empezaban a bailar ante la mirada de los reyes que se habían sentado y observaban a sus invitados.

Hacía ya mucho que Yunho bailo con su esposo en la fiesta que el Sr.kim realizo en nombre de su bienvenida, miro a su esposo quien observaba con una sonrisa a la multitud bailar.

Yunho se levanto y se acerco a Jaejoong quien sentado lo miro levantando el rostro.

-Me permites…esta pieza…- susurro Yunho tendiéndole la mano y Jaejoong sonrió posando su mano sobre la de su esposo.

En aquella gran fila que formo los bailarines en medio del salón danzaron, sosteniendo sus manos y acercando sus cuerpos, Jaejoong sonreía y desviaba su mirada de su esposo quien le devolvía la sonrisa, Yunho no podía sentirse más feliz al ver la sonrisa de su esposo que solo embellecía mas su rostro, el amaba verlo feliz.

Cada vez más invitados se unían al baile, haciendo que salón se vea lleno de gente por todos lados, ellos continuaron bailando las hermosas melodías que fueron cambiando los músicos.

Jaejoong logro ver a la duquesa bailando también, sonrió al verla, Yunho atrajo el cuerpo de su esposo y lo sujeto de la cintura.

-Esa sonrisa no fue para mí…- Yunho susurro celoso al ver que Jaejoong había sonreído a alguien, Yunho detuvo sus pasos.

-Es…es…- Jaejoong intento decirle que su tía estaba muy cerca tras suyo y era a ella a quien le sonrió.

Yunho volteo su rostro reanudando el baile dejando libre la cintura de Jaejoong, pudo ver a su tía quien danzaba, se alivio, pues había temido mirar, pero el impulso por ver quien osaba coquetear a su esposo fue más fuerte.

-Ahora entiendo el por qué de tu sonrisa… -susurro Yunho cuando atrajo el cuerpo de su esposo y lo pego a él, ambos sonrieron con sus rostro muy cerca.

Jaejoong se sobresalto al escuchar los sonidos de los fuegos artificiales, volteo su rostro miro hacia el gran balcón y pudo ver las hermosas luces de colores en el cielo.

-Quieres verlos…- Yunho susurro en su oído y el volteo a mirarlo y asintió con su cabeza sorprendido por las hermosas luces que había visto -…ven…- Yunho dijo sosteniendo su mano abandonando el baile, cruzando la gran puerta, entrando al gran balcón que tenía muchas flores en su entrada, grandes y hermosas.

Yunho soltó la mano de Jaejoong quien avanzo sorprendido por las bellas luces en el cielo, que salían disparadas manipuladas por unos hombres que desde los lagos iban encendiéndolas.

Apoyo sus manos en el balcón y observo sorprendido nunca antes había visto algo tan hermoso, Yunho tras suyo observo también las luces en el cielo oscuro.

-Es hermoso…- susurro Jaejoong.

-Lo es…- Yunho contesto y Jaejoong volteo a verlo -…pero no tan hermoso -…dijo Yunho tomando la mano de su esposo atrayéndolo hacia el -…por que yo tengo en mis manos lo mas hermoso que existe en el mundo…- al escucharlo Jaejoong se sonrojo y Yunho sonrió, lo tomo del cintura y despacio bailo con el, sus miradas iban y miraban las bellas luces para después volverse a encontrar, en medio del balcón bailaron un bella y suave canción.

Yunho se detuvo, Jaejoong alejo su mirada del cielo y miro a su esposo quien llevo una de sus manos a su mejilla, la mirada de Yunho siguió el rose de su mano sobre la mejilla de su esposo, Jaejoong movió su rostro como queriendo seguir la mirada de su esposo y la mano que lo acariciaba que quedo justo sobre sus labios, Yunho miro sus hermosos ojos, adorando el sonrojo en las mejillas del.

Acerco mas el cuerpo de su esposo sujetándolo de la cintura, Jaejoong miro a Yunho quien llevaba su mano tras su cuello.

-Yun…Yunho espera…nos verán…- susurro Jaejoong cuando el rostro de su esposo estuvo mas cerca al suyo.

-Que nos vean mi amor…eres mi esposo…- susurro Yunho y estrecho sus labios con los suyos, besándolo dulcemente, Jaejoong poso sus manos sobre el pecho de su esposo.

Soltó los dulces y suaves labios de Jaejoong solo para volverlos a atrapar con suaves movimientos, sin poder resistirse Jaejoong correspondía a esos suaves besos.

-Yun…-susurro Jaejoong cuando Yunho volvió a dejar libres sus labios.

Con una leve sonrisa Yunho volvió a atrapar los labios de su esposo, ante su timidez empezó a avanzar haciendo que Jaejoong retrocediera y así se alejaran del medio del balcón y no ser vistos por los invitados, quería darle más privacidad a su aun tímido esposo, quedaron lejos de la visión de los demás gracias a las grandes flores que habían cerca de la puerta del balcón.

Yunho desprendió sus labios y Jaejoong con la respiración ya acelerada abrió sus ojos y vio que ahora nadie podía verlos, Yunho le sonrió nuevamente y atrapo sus labios, con más confianza Jaejoong se dejo guiar por los labios de su esposo correspondiendo sus besos, llevo sus manos y rodeo su cuello, mientras Yunho con ambas manos lo sujetaba de la cintura, ambos unieron sus labios entregándose a esa dulce rose.

Sus labios seguían unidos por suaves caricias, Jaejoong entreabrió sus ojos, y de golpe separo sus labios de los de Yunho, había visto a Go Ah Ra, quien estaba parada en la puerta del balcón.

-Que sucede?...- Yunho pregunto a Jaejoong quien había alejado sus labios sorpresivamente y de golpe, Jaejoong jadeaba por la falta de aire, llevo su mirada al lugar donde había visto a Go Ah Ra parada mirándolos y ahora ella ya no estaba, regreso su mirada s su esposo.

-Nada…- susurro con la respiración entrecortada y abraso a Yunho pegando su mejilla al pecho de su esposo.

Yunho creyó entender lo que le pasaba a su esposo pues la hora en que debía dejarlo solo se acercaba, el debía ir junto a los hombres a otro salón y dejar a Jaejoong con todas las damas, le apenaba tener que dejarlo pero tenía que hacerlo e ir a encontrarse con Yoochun quien ya debía haber llegado.

-Jae…estarás bien…- susurro Yunho sobre su cabello y Jaejoong asintió con su cabeza sin levantar la mirada, no quería preocuparlo, iba hacer caso a su consejo de no escuchar a Go Ah Ra, necesitaba confiar en si mismo y poder enfrentarla si era posible.

-Voy ah estar bien…- dijo desasiendo su abrazo y levantando su mirada a su esposo, al escucharlo Yunho quiso creer que así seria.

-Te eh dicho ya lo hermoso que estas hoy…- susurro Yunho rodeando la cintura de su esposo y acercándolo a él, Jaejoong sonrió tímidamente posando sus manos sobre el pecho de su esposo, sus mejilla se tornaron rosadas, Yunho se deleito, amaba ver aquel rubor en su blanca piel el cual Jaejoong aun solía mostrar cuando él lo halagaba -…te amo...- susurro acercando mas su rostro, beso los labios de su esposo y luego beso su mejilla.

Soltó la cintura de su esposo, debía dejarlo ahora, sostuvo su mano mientras lo miro por un momento y camino, sus manos continuaron sujetas, Jaejoong camino hasta la puerta del balcón siguiéndolo y después sus manos se separaron con un último rose de sus dedos, Yunho volteo cruzando el salón para ir al salón contiguo, Jaejoong lo observo mientras el se alejaba.

-Oh…que tiernos!!…- la voz de Go Ah Ra se dejo escuchar, Jaejoong llevo su mirada a las flores que estaban a su lado cerca de la puerta, la prima de Yunho se había escondido ahí, Go ha ra salió dejándose ver.

-Buenas noches…- Jaejoong la saludo y ella sin contestar pudo contemplar en su totalidad a quien consideraba su rival, con celos y envidia observo el hermoso vestido que Jaejoong lucia el cual era mucho más hermoso que el suyo.

-Puedo ver…que ustedes se llevan mejor…- dijo ella caminado, acercándose a Jaejoong -…se besan y se dicen dulces palabras…ja!…- dijo en modo de burla, pero en el fondo sentía mucha cólera -…seguro crees en todo lo que te dice…que inocente…-susurro.

-Con permiso…- Jaejoong volteo para alejarse de ella e ir al salón donde se reunían todas las damas, pero Go Ah Ra no tenía pensado dejarlo huir, tras suyo lo siguió.

-Espera…- dijo alcanzando a Jaejoong, caminado a su lado – somos familia…no puedes tratarme así…- susurro ella para que solo él pueda escucharla ya que a su alrededor también caminaban las mujeres que iban al otro salón, Jaejoong no le contesto y trato de alejarse caminando entre las mujeres.

-Espera…- dijo nuevamente Go Ah Ra, pero esta vez tomo del brazo a Jaejoong lo sujeto impidiéndole avanzar, el volteo y la miro sorprendido, quedaron frente a frente.

-Suéltame…- Jaejoong dijo liberándose de su agarre.

-Porque me evades?…- ella pregunto hipócritamente.

-Lo siento…pero no quiero escucharte…

-El te lo prohibió verdad?...- dijo acercándose a Jaejoong, sin contestarle el solo la miro -…te has preguntado por qué el teme tanto que yo hable contigo…

-Se la razón…ahora déjame en paz…- dijo Jaejoong recordando las palabras de Yunho quien le contó que Go Ah Ra disfrutaba lastimando a las personas.

-Que fue lo que te dijo…- ella pregunto -…por qué no me dices… te aseguro que te mintió…

Al escucharla Jaejoong se volteo para no seguir hablando con ella, camino otra vez y ella volvió a alcanzarlo.

-Cometes un gran error al no escucharme…- dijo ella tras Jaejoong.

-Basta!…- Jaejoong dijo mientras avanzaba entre las mujeres, por el gran pació que lo llevaba al salón, se detuvo de golpe al ver una bella mujer caminado hacia el salón que tenía un rostro conocido, parpadeo tratando de aclarar su visión, pues no podía creer que él fuera -…junsu?…- susurro observando como se alejaba y no lo vio mas pues las demás personas lo tapaban.

Go ah ra aprovecho que Jaejoong se detuvo y se puso frente a el, atrayendo su mirada.

-No!…- Jaejoong dijo pasando por su lado queriendo alcanzar a quien el creía que era Junsu, necesitaba ver de cerca y comprobar que no se equivocaba, pero Go Ah Ra lo detuvo sosteniendo su mano, Jaejoong volteo.

-Te acostaste con el verdad?…- dijo Go Ah Ra -…si fue así…déjame decirte que solo te utilizo - al escucharla Jaejoong se paralizo y ella aprovecho esa oportunidad -…te preguntaras como me di cuenta que te le entregaste…- susurro -…el sabe como seducir y conseguir lo que quiere…- susurro caminado alrededor de Jaejoong.

- Con esas dulces palabras…que te susurra al oído, se burla de ti…- dijo frente a el -…por que el no puede amar a nadie que no sea…ella…- dijo cruelmente refiriéndose a la anterior prometida de Yunho -…él nunca la olvidara…

-Basta!...- Jaejoong dijo volteándose recordándose que no debía escucharla, ni creerle, camino.

-El la ama…y tu solo eres su juguete…si se caso contigo fue por que la duquesa le exigió tomar una esposa…- dijo agarrando a Jaejoong para que no se alejara -… el no te puede querer…puedo asegurar que solo te ha llevado a la cama una vez…por que no te desea…no puede la quiere a ella…

-No!...- Jaejoong jalo su brazo para que la soltara, no podía escucharla más, trato de no mostrarle lo mucho que sus palabras le estaban afectando, el nudo en su garganta le dolía y tubo que apretar sus ojos por un instante para no dejar caer alguna lagrima -…vete…- dijo Jaejoong zafándose de su agarre.

-No me crees…- dijo acercándose -…Es por eso que él no quiere que hables con migo…yo lo conozco, el teme que yo te diga la verdad…Que el ama aun a aquella mujer…

-Por qué…por qué me dices todo esto…- dijo tratando de aguantar sus ganas por llorar.

-Por que no es justo que él te utilice…dime el te contó que yo lo amaba…- al escucharla Jaejoong abrió sus ojos grandes de la sorpresa.

-El me sedujo y me llevo a la cama como lo a echo contigo…- Jaejoong llevo sus manos a sus labios sorprendido -…pero después no quiso tocarme más…- dijo ella creyendo que Yunho no podía haberse acostado mas de una vez con Jaejoong, pues estaba segura que el cuidaría de no asustarlo ya que Jaejoong había sido virgen -…el solo la desea a ella, a quien el amaba con locura…y a la cual el seguro le hacía el amor con pasión…- susurro en su oído, Jaejoong retrocedió y antes que aquellas lagrimas brotaran y cayeran por sus mejillas volteo y avanzo rápido alejándose de Go Ah Ra quien ya no lo seguía pues había logrado desahogarse por la furia que sentía al comprobar que Yunho se había acostado con Jaejoong y que además se amaban.

Trato de tranquilizarse, limpio sus lagrimas pues no quería llamar la atención a su alrededor, no le iba creer ninguna palabra a ella, respiro despacio queriendo olvidar sus palabras y tratando de no pensar en los últimos días que estuvo cerca de Yunho, no quería relacionar lo vivido con su esposo y las palabras de Go Ah Ra, trataba de no pensar y creer en su esposo a quien el amaba.

Llego al salón y vio otra vez a la joven de hermoso vestido que tenia el rostro de Junsu, camino acercándose, Junsu ponía su manos en la pared pues un fuerte mareo quiso tumbarlo al piso, pero el se apoyo cerrando sus ojos, al no poder mas, dejo que su cuerpo descendiera lentamente, sentándose en las gradas de una de las escaleras que estaba cerca.

-Junsu?...- dijo Jaejoong, al reconocer esa voz el subió su mirada y ahí frente suyo Jaejoong estaba parado, su amigo a quien hacia mucho no veía -…eres tu…- dijo jaejoong sentándose a su lado -…pero…- dijo sin entender ya que Junsu era esclavo y estaba en la fiesta del rey con un hermoso vestido.

-Jaejoong…- susurro Junsu, ambos sonrieron y se abrasaron.

-No lo puedo creer…- susurro Jaejoong contento de ver a quien fue su amigo, se separo del abraso y lo miro.

Sin poder dar una explicación, Junsu bajo su mirada avergonzado por estar en una fiesta que no le correspondía, sintió un pequeño dolor en su estomago, llevo su mano a sus labios cuando las nauseas lo volvió a molestar.

-Qué pasa?...- dijo Jaejoong preocupado -…Junsu estas bien…

-Si…- dijo el respirando despacio, cuando la sensación de vomitar se fue, levanto su mirada a Jaejoong.

-Como esta mi madre…- Junsu pregunto y Jaejoong se entristeció.

-Junsu…yo ya no vivo con mis padres…- le confeso

-Que…

-Si…me case…- Jaejoong dijo y Junsu se sorprendió sintiendo alegría por el.

-Con keita…- dijo sonriendo creyendo que Jaejoong había logrado casarse con aquel chico del cual parecía estar locamente enamorado, al escucharlo Jaejoong lo recordó y se entristeció, sintió un fuerte dolor en su corazón pero al recordar ahora las palabras de Go Ah Ra.

-No…el no…- dijo despacio aguantando su dolor -…mi esposo es el conde de…

-Pero…tu no lo…- dijo Junsu sin entender por que Jaejoong no se caso con keita.

-No…no lo digas…yo no lo quiero…- susurro dejando caer una lagrima, pero esa lagrima no era por el recuerdo de keita si no por el dolor y la duda que Go Ah Ra había sembrado en el.

-Lo siento…- Junsu se disculpo entristecido-…No me hagas caso…- Jaejoong limpio sus lagrimas -…ahora dime quien te compro…quien es tu amo…- Junsu bajo su mirada al escucharlo.

-Yoochun…así se llama…- Junsu susurro y Jaejoong se sorprendió pues era el amigo de su esposo, el joven Park Yoochun.

-Yo lo conozco…Junsu le diré que te deje con migo…pagare el no se negara…

-No…- Junsu negó con su cabeza, no quería que Jaejoong se enterara de su embarazo y no quería causarle problemas, pero en realidad el no quería alejarse de Yoochun, se conformaba con verlo aunque no pudiera estar con el.

-Pero…

-No…Jaejoong solo te causaría problemas…- susurro Junsu.

-Jae…- la voz de Yunho se dejo escuchar, el y Junsu voltearon mirando hacia el frente, ahí parados frente a ellos Yunho y Yoochun los observaban, no se habían dado cuenta cuando llegaron pues habían estado conversando y no escuchaban los pasos a su alrededor.

Junsu se levanto alejándose un poco de Jaejoong ante la mirada de Yoochun, Jaejoong se levanto también mirando a los ojos de su esposo quien también lo miraba, desvió su mirada al recordar las palabras de Go Ah Ra, no sabia como hacer para no creer en esas duras palabras.

-Me alegra…que ayas tenido compañía y que mejor si es alguien que conoces…- dijo Yunho atrayendo la mirada de su esposo.

-Gracias por haber estado a su lado…- Yunho dijo mirando a Junsu, conociendo quien era y que había sido el esclavo del padre de Jaejoong, pues Yoochun le alcanzo a contar, pero el no logro contarle toda la historia, solo logro decirle que se había enamorado de su esclavo, al principio Yunho se había sorprendido pero después animo a su amigo a luchar por lo que sentía.

-De nada señor…- Junsu contesto.

Yoochun saludo a Jaejoong haciendo reverencia.

-Junsu…debemos irnos…- Yoochun dijo y Junsu asintió con su cabeza.

-No…espera!…- Jaejoong dijo, él quería pedirle a Yoochun que le entregara al esclavo que alguna vez fue de su familia.

-Jae…- Yunho susurro -…por favor despídete de Junsu…- al escucharlo Jaejoong lo miro y volvió a recordar las palabras de Go Ah Ra, sintió el nudo en su garganta al ver que Yunho no lo dejo hablar con Yoochun, deseo no obedecerle, pero no podía hacer eso, llevo su mirada a Junsu y se acerco a él.

-Junsu…- dijo Jaejoong triste.

-Por favor si ves a mi madre dile que estoy bien…- susurro Junsu y sin tener el valor de abrasar a Jaejoong por la presencia del conde y de su amo, se alejo.

-Si…lo haré…- Jaejoong dijo siguiendo con la mirada a su amigo, quien se alejaba, Yoochun se despidió de Yunho y después de Jaejoong y camino cerca de Junsu alejándose, desapareciendo entre la multitud de invitados.

-Ven…- Yunho levanto su mano hacia Jaejoong para que este lo tomara, triste puso su manos sobre la de su esposo, Yunho con su otra mano sujeto la cintura de su esposo y lo atrajo pegándolo a el, Jaejoong quiso evitar mirarlo.

-Mi amor…has llorado…- dijo Yunho cuando impidió que Jaejoong desviara su rostro, pudo ver la humedad en los hermosos ojos de su esposo.

Negó con su cabeza, queriendo ocultarle la verdad.

-Te cruzaste con ella…- Yunho dijo refiriéndose a Go Ah Aa, Jaejoong bajo su mirada y negó con su cabeza dejando caer una lágrima la cual Yunho rápidamente limpio.

-Jae no me mientas…- susurro.

-No…- dijo negando con su cabeza.

-Entonces dime el por qué de esa lágrima…

-Es…es que…Junsu…- dijo Jaejoong incapaz de contarle lo que su prima le había dicho, aun quería creer con todas sus fuerzas que ella le había mentido, Jaejoong luchaba por no recordar sus palabras, necesitaba olvidar.

-Jae…- Yunho susurro y abraso a su esposo, pues no podía conseguirle a ese esclavo por el cual creí que su esposo lloraba, ya que no podía quitárselo a su amigo, y le apeno pues veía que Jaejoong tenía una amistad con él.

El correspondió a su abraso repitiéndose en su mente que Go Ah Ra mentía, no podía ser verdad que Yunho no lo amara y que todas las hermosas palabras que el siempre le susurraba fueran mentira.

-Vayámonos…por favor…- Jaejoong suplico haciendo su mayor esfuerzo por no llorar.

-Pensé que querías quedarte…- Yunho dijo recordar sus palabras en la mañana.

-No…no quiero…- Jaejoong suplico.

-Esta bien…- Yunho dejo libre del abraso a su esposo y lo tomo de la mano sacándolo del lugar,

El carruaje empezó a alejarse del castillo del rey, en su interior Yunho y su esposo sentados uno junto al otro, Jaejoong tenia apoyado su cabeza sobre el pecho de Yunho mientras el lo rodeaba con sus brazos, Jae había cerrado sus ojos tratando de dormir pues no podía borrar de su cabeza todas las palabras de aquella mujer, con cada minuto que pasaba el se desesperaba pues sentía un leve dolor, como si una espina estuviera clavo en su corazón, lastimándolo.

¿Se acostó con ella? las preguntas en su mente empezaban a brotar “No te ama” escuchaba claramente como si Go Ah Ra estuviera ahí repitiéndole esas terribles palabra, Jaejoong se sobresalto abriendo sus ojos de golpe.

-Que…sucede…- Yunho susurro sosteniéndolo del brazo, mirando a su esposo quien levantaba su rostro.

-Nada…- Jaejoong susurro negando con su cabeza con la tristeza en su mirada –solo tube…un sueño…- dijo desviando su mirada hacia la ventana.

Yunho no pregunto mas, se había dado cuenta desde el momento en que lo vio junto a Junsu que algo le pasaba, podía sentir lo distante que su esposo se había vuelto, creía saber que era lo que había pasado, pero no pensaba interrogarlo, no ahora, iba darle un tiempo mas para que el solo decidiera contarle, Yunho sostuvo la mano de su esposo mientras el mantenía su mirada hacia la ventana.

El carruaje apresuro su paso por lo tarde que era, las rejas del castillo se abrieron en cuanto los guardias que cuidaban la entrada escucharon y reconocieron el carruaje blanco del conde, ellos habían estado esperando por el por orden de la nona.

Yunho bajo primero del carruaje cuando este se detuvo en frente de su castillo, Jaejoong sentado parecía no querer bajar.

-Jaejoong…- Yunho lo llamo levantando su mano para que el lo tomara y pudiera bajar.

Sin dar una mirada a su esposo Jaejoong puso su mano sobre la de Yunho y dejo que el le ayudase, descendió del carruaje y avanzo por delante de su esposo subiendo los escalones para entrar al castillo. Antes que Jaejoong pudiera alcanzar la manija de la puerta Yunho paso su mano por el costado de Jaejoong y abrió la puerta para que el entrara.

Yunho observo a su esposo cerrando la puerta del castillo, había un silencio en todo el lugar pues todos, tanto la nona como los demás empleados ya dormían, Jaejoong avanzo por el pació sin siquiera esperar por su esposo quien tras suyo caminaba. Subío las escaleras sosteniéndose de la baranda, avanzando cada vez más rápido.

Cuando finalmente estuvo por el pasillo del 3er piso su corazón palpito rápido deseaba estar en su cuarto pero quería llegar antes que Yunho, quería estar solo, necesitaba estar solo y calmarse, no quería tenerlo cerca, le dolía pensar que Go Ah Ra no había mentido, cruzo el pasillo pasando ya el cuarto de Yunho y a pocos pasos estaba su cuarto.

-Detente…- Yunho lo tomo del brazo haciendo que Jaejoong se girara, sus miradas se quedaron fijas una del otro –…que intentas…- dijo Yunho dándose cuanta que Jaejoong intentaba alejarse del, no pudo aguantar mas, al ver que no pensaba contarle.

-Suéltame!…- Jaejoong soltó a secas y Yunho se sorprendió, si había tenido alguna duda de que algo le pasaba a su esposo ahora estaba seguro que así era, la fría palabra de Jaejoong le dolió, pero pudo ver en los ojos de Jae la tristeza después de haber hablado así, como si estuviera confundido -…ven…- Yunho lo jalo sosteniéndolo del brazo, llevándolo a su cuarto.

-No…- Jaejoong suplico, no quería entrar al cuarto Yunho, quería estar en su cuarto solo, pero las palabras de Jaejoong solo provocaron en Yunho el enfado. Abrió con una mano la puerta de su cuarto y obligo a Jaejoong a entrar, cerro la puerta con seguro ante la mirada de Jaejoong quien ya libre del agarre retrocedía mirando como su esposo aseguraba su puerta, Yunho volteo para mirarlo, sus miradas fijas una en la otra, en aquel cuarto que estaba alumbrado apenas por la luz de la luna que entraba por la gran ventana

-Ahora me dirás que es lo que te pasa…- Yunho dijo caminado acercándose a Jaejoong -…por que estas alejandote de mi…- al escuchar Jaejoong abrió sus labios sin poder soltar alguna palabra -…no te dejare salir de este cuarto hasta que me digas que pasa…- Yunho dijo queriendo que el le contara, pero el bien se imaginaba lo que le sucedía.

-Es…- Jaejoong nervioso trataba de encontrar algo que decir, por pero no quería decirle lo que Go Ah Ra le había dicho, pues le aterraba, pensaba ahora que ella podía haber dicho la verdad y no quería saber -…es…que…yo…Junsu…- salio de sus labios sin pensar, Yunho al escucharlo se le escapo una leve sonrisa desganada.

-Piensas que voy ah creer que estas así…por ver al esclavo…dime la verdad…- Yunho exigió serio.

-Es… es verdad…- Jaejoong nervioso hablo.

-No mientas!…- Yunho dijo algo molesto -…me di cuenta perfectamente que la humedad en tus ojos y tus lagrimas no eran por el esclavo…fue Go Ah Ra verdad?…la viste…hablaste con ella…- Jaejoong se agito recordando las palabras de Go Ah Ra, negó con su cabeza tratando de sacar esos recuerdos de su mente -…que te dijo…- Yunho exigió.

-Ella dijo…que tú…- nervioso balbuceo -…la sedujiste…y te acostaste con ella…- Soltó ante su exigencia.

-Miente…- Yunho contesto a secas.

-ah…que…que tu aun amas a…- Jaejoong le costaba hablar, llevo sus manos a su pecho pues le dolía -…que no la has olvidado y que…- las palabras de Go Ah Ra retumbaron en su mente, se agito -…No soy ella, Yunho - dijo fríamente Jaejoong. Dejando caer las manos, retrocedió y apartó la mirada.

Él se puso rígido al escucharlo.

-¿Eso fue todo lo que te dijo…? - se detuvo.

Jaejoong sin mirarlo asintió con su cabeza, Yunho se acerco y tomó su cara con ambas manos y giró su cabeza de modo que el tuviera que encontrarse con su contundente mirada.

-Jaejoong, sé que no eres Ella. Al principio ella fue la razón por la que me case contigo…- Yunho dijo pues el no podía negar que lo único que había querido es evitar que Jaejoong sufriera como su amada lo hizo -… pero tú eres mi verdadera compañera.

Aunque oyó sus palabras, se acordó de cómo Yunho celo al principio que el se pusiera las ropas de su ex prometida.

-La conocí en la ópera. Nuestra relación era muy diferente. Mi deseo por ella se desarrolló con el tiempo…- Yunho dijo creyendo que era mejor contarle a Jaejoong mas detalles de su antigua relación.

-¿Aun la amas? - lamentó preguntar, pero de algún modo se sentía conectado a esa mujer debido a Yunho.

Él dejó de moverse y lo miró durante largo rato antes de contestar.

-Sí, la amaba. Era una buena persona. Mi amor por ella es más fuerte ahora que nunca.

El corazón de Yaejoong se contrajo por su revelación. Bajo la mirada hacia su cuello para que él no viera el dolor que provocaron sus palabras.

Yunho rozó su mejilla y luego puso sus manos a ambos lados de su mandíbula, levantando su barbilla para que su mirada encontrara la suya una vez más.

-Porque si no fuera por ella, nunca te habría encontrado.

Jaejoong parpadeó para evitar las lágrimas y tragó para apartar el nudo que se había formado en su garganta al oír sus dulces palabras.

“Seguro le crees en todo lo que te dice…que inocente” en su mente el recuerdo volvía a torturarlo, Jaejoong retrocedió queriendo alejarse, desvió su mirada aun confundido.

Yunho lo sostuvo de la mano evitando que se alejara.

-Ahora que te he encontrado, no puedo imaginar mi vida sin ti, Jaejoong -…Jae volteo su rostro y se encontró sus ojos acerados.

- Yunho...- Susurro.

Sus ojos ardían con intensidad mientras continuaba con la voz ronca -… Quiero dormir contigo en mis brazos cada mañana durante el resto de nuestras vidas.

Le dolía el corazón por sus palabras. Conseguía llegar a lo más profundo de su alma. Dios, haz que pare, por favor.

-Para – Jaejoong suplico , pero Yunho ya había pasado su limite y no podía con el deseo que sentía por tenerlo.

- Quiero probar tu dulce sabor otra vez, sentir tu cuerpo rodeando el mío, oírte gritando de placer…- Jaejoong se sonrojo ante sus palabras -Te amo…- Yunho susurro y lo jalo hacia el, sosteniéndolo de la cintura

- ¡Para, Yunho! - Jaejoong suplico posando sus manos en el pecho de su esposo, tratando de mantener distancia, queriendo resistirse.

- ¡No lo haré! Eres mi esposo, Jaejoong.

Yunho lo atrajo más hacia sí, aplastando sus labios con un beso violento y dominante, su lengua invadiendo su boca. Su desmedido deseo hizo que el de Jaejoong se encendiera. Le envolvió el cuello con los brazos y devolvió el besó, necesitando su contacto, su conexión. Su corazón brincó. Él le estaba demostrando con sus actos, más que con sus palabras, que realmente el que le importaba era él, y no la mujer de su pasado.

Aquel beso baja como un relámpago hasta los dedos sus de los pies y volvió a subir arrasándolo todo a su paso, tocando todos los puntos correctos. Le temblaron los muslos, se le contrajo el estómago y le dolieron los pezones de tanto desear que lo acariciara.

Yunho soltó de golpe los labios de Jaejoong, sus ojos se abrieron y sus miradas se encontraron, La mirada de Yunho brilló con un incontrolable deseo, los labios de Jaejoong se abrían y se cerraban suavemente por los jadeos incontrolables.

-Serás mío ahora…- Yunho susurro

-Yun…Yunho…- Jaejoong susurro suavemente entre jadeos.

- Estas en mi cuarto ahora, precioso. No tengo que pedirte permiso… - su expresión se tornó seductora - ... Pero lo voy a hacer. Permítemelo, Jaejoong… - se inclinó diciéndolo cerca de su oreja, mientras deslizaba su lengua por su cuello -. Quiero entrar en tu hogar, continuamente.

Ese doble ataque lleno de ternura recorrió su cuerpo, haciendo que sus pezones se endurecieran, le dolía el alma por la necesidad de sentirlo dentro suyo, una vez al menos. Jaejoong buscó en su interior la fuerza para poder resistir esa tentadora voz y la lengua que la atormentaba.

Sus labios rozaron su cuello y Jaejoong dejó que su cabeza cayera contra su pecho. Que duro era resistirse, pensó. Quiero probar la pasión, se dijo en su mente.

Las manos de Yunho fueron apresuradamente desvistiendo a su esposo, tratando de quitarle el hermoso vestido, Jaejoong poso sus manos sobre su pecho dejando que él le quitara la ropa, cuando Yunho quito el vestido, llevo sus manos y se desvistió ante la mirada de Jaejoong quien jadeando y sonrojado, desvió su mirada cuando él se quitaba el pantalón.

Lo jalo atrayéndolo para poder quitarle aquel corsé que apretaba su delgado cuerpo, deslizo el corsé quedando sus cuerpos desnudos, llevo sus manos y pego el cuerpo de su esposo al suyo.

Suspirando sintió como se derretía, no podía resistir más su magnetismo. Yunho sonrió contra sus labios deslizando la lengua dentro, fundiendo su boca con la de él. Colocando los brazos en su cintura, Jaejoong devolvió el beso, caricia por deliciosa caricia.

Yunho gimió y lo acercó más, profundizando el beso, encerrándolo todavía más bajo su hechizo provocativo. Deslizó las manos por su espalda y agarró su trasero. Moldeando sus suaves curvas a su duro cuerpo, apretó el calor de su erección contra su vientre y susurró: No más sensaciones reprimidas. Quiero explorar tu cuerpo entero de verdad.

Esas palabras hicieron temblar a Jaejoong. Recorrió los músculos de su espalda, perdiéndose en la fuerza que sentía debajo de sus dedos. Sólo esta vez, quiero sentir el deseo que hay entre nosotros y saber que no es un sueño, pensó para sí mismo.

Yunho enredó sus dedos en el pelo de Jaejoong echándole hacia atrás la cabeza para poder recorrerle con sus labios desde el mentón hasta la garganta. Jaejoong se estremeció de delicia cuando le empezó a mordisquear la sensible curva entre el cuello y el hombro.

Lo cogió entre sus brazos cargándolo, lo llevaba a su cama.

Jaejoong llevo su mirada a la elevada cama de cuatro postes estaba hecha con una madera lisa y suave, los postes eran gruesos y completamente tallados. Un edredón de un blanco níveo cubría la cama, haciendo juego con la decoración, en su mayor parte blanca, de la habitación. Ciertamente esta era la primera vez que el observaba con detenimiento el lugar.

Yunho dejó suavemente a Jaejoong en la cama y la miró fijamente. Con los cabellos negros extendidos en las sábanas blancas y sus rasgados ojos marrones llenos de esa inocencia que lo caracterizaba formaba un retrato hermoso y tentador. El pecho se le contrajo de amor. Antes de que pudiera acostarse a su lado.

El corazón de Jaejoong le golpeaba con fuerza en el pecho esperando con anticipación su próximo movimiento.

- Ábrete para mí, Jaejoong, amor. Quiero tocarte entero - le dijo suavemente Yunho tomándolo de los tobillos para que abriera más las piernas.

El las separó aún más, su respiración cada vez más irregular, mientras las manos le iban dando un metódico y lento masaje en las piernas, desde abajo hasta alcanzar la parte interior de sus muslos. Yunho abrió sus manos alrededor de ellos, inclinando la cabeza, dejando un rastro ardiente con la lengua hasta llegar a su sexo. El tibio aliento no hacía más que acentuar la excitación y la humedad cuando empezó a saborearlo. Agarrando con más fuerza sus muslos, los abrió más todavía y rozó la húmeda intimidad de Jaejoong con su implacable lengua.

El gemido de Jaejoong se convirtió en un ahogado grito de sobresalto cuando Yunho, con un profundo gruñido la estrechó más, devorándole el miembro. Gritó, mientras se aferraba a su cabeza buscando un apoyo. El corazón le latió con fuerza ante esa experiencia.

Él lo miró con gesto travieso antes de hundirse de nuevo en su sexo lamiendo, esta vez sí, su entrada. Jaejoong arqueó su espalda dejando escapar un agudo y rasgado gemido de placer.

Yunho levantó la cabeza, sus ojos reflejaban una enorme excitación.

- Relaja las piernas. Quiero observarte mientras lo hago - le dijo mientras apretaba los muslos hacia abajo.

Jaejoong obedeció, separándolas más para él. Él sonrió, abriendo la entrada de su sexo para observarlo por completo.

- Estás tan sonrojada y mojada - le dijo deslizando un dedo en su interior. Jaejoong gimoteó de necesidad.

- ¿Te gusta esto? —le dijo enarcando una ceja.

Con el dedo Yunho hizo pequeños círculos en el interior de su entrada y lo miró de nuevo -. Dímelo - ordenó.

- Sí…- jadeó ante esa presión constante que él aplicaba, levantando las caderas, buscando la liberación a ese tormento—. Te quiero dentro de mí…- dijo sin darse cuenta de sus palabras, preso del deseo.

En sus labios se formó una sonrisa de satisfacción extremadamente masculina y lo penetró con un dedo profundamente. Estaba sin aliento, mientras la recorrían sensación tras sensación de placer. Él se acercó más, inclinándose sobre el para capturar con su boca un pezón y agregó otro dedo a su sensual exploración mientras con el pulgar apretaba su miembro.

Besando el pecho con ternura levantó la cabeza para mirar sus ojos mientras su mano seguía con la magistral caricia.

- Córrete para mí, Jaejoong - le dijo hundiéndose más en el. El aliento totalmente inestable mientras sus caderas acompañaban el rítmico movimiento de su mano. El cerró los ojos antes esas emociones que la destrozaban.

- No —dijo con voz baja y controlada— no cierres los ojos, Jaejoong, quiero verte cuando te llegue el orgasmo.

Jaejoong se mordió el labio. Colocó sus brazos en los hombros de él y se arqueó una vez más cuando el pulgar empezó de nuevo a acariciar en círculos la inflamada y excitada protuberancia.

- ¡Yunho! - exhaló el nombre mientras las primeras ondas de su orgasmo empezaban a recorrer su cuerpo, tensando su estómago y acelerando el latido de su corazón.

- Repite mi nombre de nuevo, Jaejoong - le susurró con una intensa expresión.

No tuvo necesidad de insistir. Su cuerpo se sacudía entre los deliciosos espasmos del clímax, Jaejoong gritó su nombre de nuevo.

- ¡¡Yunho!! - mientras su húmeda y sensibilizada intimidad se contraía alrededor de aquellos dedos acariciantes una y otra vez.

Cuando su cuerpo paró de temblar, Yunho se inclinó para besar su cuello. Inhaló profundamente, bebiendo su excitante aroma.

-Me seduces por completo - le dijo con un suspiro.

Jaejoong jadeaba sin poder contestar.
- Oh, no estoy agotado, todavía, mi amor - dijo Yunho mirándolo con una oscura ceja enarcada y una sonrisa pícara en los labios.

Jaejoong abrió mas sus ojos al escucharlo jadeando sin control, Yunho lo tomo de la cintura y lo levanto sentándolo,

-Te…Am…- trato de decir Jaejoong pero no pudo acabar la frase antes de que sus labios fueran capturados por un posesivo beso. Gimió deleitado cuando él lo empujó hacia el colchón, inclinándose violentamente sobre su esposo y se arrodilló encima de el.

Subió los brazos hacia los fuertes hombros, deslizando los dedos sobre los abultados bíceps, valorando las formas y huecos del pecho que tenía encima de él. Yunho apoyó su cuerpo en el suyo. Sus ojos oscuros se encontraron con los de él mientras posicionaba sus muslos en sus caderas, apretando su erección contra su ardiente hendidura.

Extendió sus piernas en silencio para acomodarlo. Yunho bajó las manos por sus brazos a sus caderas donde las envolvió con sus dedos largos y en esas enormes manos, manteniéndolo quieto para penetrarlo contundentemente. Jaejoong jadeó de placer, el corazón le palpitaba con fuerza mientras se agarraba al pecho de Yunho con fuerza, arqueándose en busca de sus embestidas.

Cuando deslizó su miembro en su interior Yunho sonrió maliciosamente ante su invitación y entro del todo en el con un rápido empujón... un empujón tan profundo que tocó su matriz.

-Jaejoong…- lo llamó suavemente, abrió los ojos y cruzó la mirada con los suyos, Obsequiándole una tensa sonrisa, Yunho encajó la mandíbula y empezó a moverse. Utilizó lentas y metódicas embestidas pensadas para acrecentar su placer, conservando su respiración regular y acompasada. Jaejoong no quería nada de eso. Él ya había refrenado su propio placer demasiadas veces por el. Arqueó su espalda, levantó sus caderas y acompañó cada una de sus embestidas con las suyas, reclamando más, aumentando el ritmo.

Las sensaciones crecían, intensos remolinos se sucedían en su bajo vientre. Sus caderas y muslos se estremecían, su sexo suplicaba más fricción, una presión más fuerte. Los labios de Yunho capturaron los suyos, sus arrebatadores besos igualaron los fervientes y rítmicos golpes de sus caderas embistiendo contra las suyas.

Jaejoong disfrutaba de esa apasionada relación sexual. Sus duros pezones contra su pecho, doloridos y sensibles, rozaban, se friccionaban, se hinchaban. Yunho marcó un reguero de besos en su cuello, saboreándolo con su cálida lengua.

-Cada vez que estoy dentro de ti es como tocar el cielo Jaejoong…- susurro Yunho.

Su corazón golpeo más fuerte contra su pecho al escuchar su susurro y se sorprendió cuando Yunho rodó para quedar de espaldas y la arrastró completamente encima de él. Pero no tuvo tiempo de considerar la nueva posición porque las manos del hombre empezaron a acariciar todo su cuerpo mientras salía y entraba de su Intimidad con movimientos deliberados y acompasados.

La respiración de Jaejoong se volvió irregular cuando él deslizó una mano entre sus piernas y frotó la humedad alrededor de su miembro, presionándolo mientras sus dedos pellizcaban y enroscaban un rígido pezón. Su cuerpo cedió al sensual ataque y Jaejoong gritó de placer cuando el clímax se cernió sobre el.

Yunho lo besó en el cuello y puso las manos sobre su palpitante corazón durante largo rato. Rodó nuevamente, quedando sobre su esposo.

Su respiración empezó a hacerse más irregular cuando su cuerpo sobreexcitado se preparaba para otro clímax. Jaejoong hundió sus dedos en los hombros de él, imploró:

-¡Por favor, Yunho! – susurro sintiendo que perdería la razón.

Yunho embistió dentro suyo y clavó sus labios en el cuello de el, dándole un suave mordisco. Jaejoong arqueó su espalda echando hacia atrás la cabeza, gritando:

-¡Yunhoí!

Cuando las primeras y trémulas oleadas de placer lo sacudieron, Yunho dejó escapar un profundo y gutural gruñido de satisfacción, hundiendo sus labios en los de su esposo, penetrando su boca con su lengua, tomaba su miel. Jaejoong jadeó ante el intenso goce, ese erótico acto incrementaba su orgasmo, haciendo creer que los espasmos de su corazón durarían para siempre.

Yunho gozaba quitando toda inocencia a su esposo, que nunca había sido robado por otro, puro y dulce. Lo penetro como si fuera la primera vez. Estaba tan sabroso, pero tenía que parar antes que terminara corriéndose dentro del, además que ya era suficiente, mas de lo que el cuerpo de Jaejoong podía soportar. Con pesar, Yunho trato de detenerse, pero le era imposible.

Con una mano cubrió la suya sobre la cama, Yunho le agarró la otra mano y se la bajó al nido de rizos entre sus piernas, haciendo que el gimiera dando su aprobación. Sus dedos guiaron las suyas, moviendo su mano sobre su miembro mientras se clavaba dentro de el una y otra vez hasta que sus cuerpos brillaron por el esfuerzo.

Sin poder evitarlo Yunho se corrió dentro del, Jaejoong sintió como una explosión en su vientre, se arqueo pegando mas su pecho al de su esposo, unió sus gemidos de exaltación con los suyos hasta que lo único que oyó fueron sus pesadas respiraciones mezcladas y el firme latido de su propio corazón contra su pecho. Cuando su respiración se ralentizó, Yunho beso sus hinchados labios.

Lo acurrucó más cerca durante unos pocos minutos, abrazándolo con fuerza antes de retirar su miembro Lo besó en la sien y recostándose a su lado, la atrajo de vuelta contra su pecho. Jaejoong no recordaba haberse sentido nunca tan a salvo y seguro en su vida.

- ¿Estás bien, Jaejoong amor?

Sus ojos volvieron a centrarse con los suyos y sonrió.

-Si…-susurro -… Sólo un poco cansado, eso es todo…- Jaejoong no tenía la menor idea de que hacer el amor podía ser tan intenso y erótico.

Yunho le dio una sonrisa y lo rodeo con sus brazos, sus cuerpos aun agitados por la intensa entrega.

-Te Amo…- Yunho susurro cerca de sus labios y le dio un suave beso.

**

Tras varias horas de viaje de regreso a la mansión de Yoochun en la cual se mantuvieron en silencio, por fin llegaron, Junsu se sintió más aliviado.

Junsu bajo del carruaje con la ayuda de Yoochun, sus miradas se mantuvieron fijas por unos segundos hasta que Yoochun libero su manos, avanzo subiendo los escalones, entrando rápidamente a la casa, camino por el salon.

-Espera…-Yoochun susurro tras Junsu y este al escucharlo se detuvo asustado.

Yoochun deseaba tanto estar cerca del, sin pensarlo camino acercándose, Junsu volteo despacio y se detuvo cuando casi lo tenia frente suyo, Yoochun avanzo hacia él mientras Junsu retrocedía, su espalda choco contra la pared y fue acorralado por el brazo de su amo quien apoyo su mano en la pared a la altura de su rostro.

-Junsu…- susurro Yoochun acercándose más.

-Se…señor…- Junsu dijo nervioso por la cercanía, su corazón latía fuertemente contra su pecho.

Con una suave caricia Yoochun rozo la mejilla de Junsu, provocando que este se agitara.

Los labios de Yoochun atraparon los de su esclavo sin poder resistirse al deseo que tenia por estrecharlos, con sus ojos grandes de la sorpresa Junsu dejo que el le besara, resistiéndose a mover sus labios, pero después de unos segundos su fuerza era vencida y despacio empezó a corresponder.

De golpe Yoochun desprendió sus labios jadeando contra los labios de Junsu quien también jadeaba.

-Lo siento…- susurro Yoochun dándose cuenta de lo que había hecho, se alejo dándole espacio a Junsu para poder huir.

Junsu se volteo y sin detenerse camino apresurado por el pasillo, mientras avanzaba hacia su cuarto unas lágrimas se deslizaron por sus mejillas, aquel beso incremento su deseo por estar cerca del lo cual él creía que no era posible, fue entonces que deseo con todas sus fuerzas no haber sido besado por el ya que solo hería su corazón.

6 comentarios:

★ MolLy ★1 de julio de 2012, 19:09
en serio odie a esa $%&#@ prima ¬¬ por suerte
no consiguió nada con sus mentiras :D

woooo el YunJae fue tan bello *-*
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AlexaSaMorYJMshipperYS10 de julio de 2012, 12:01
Maldita desgra como le pudo decir esas mentiras al pobre de Jae, Jae no tiene la culpa de que ella este enamorada de Yunho y Yunho no le corresponda, que se joda Go Ah Ra que se valla con su marido xD -así o mas enojada la mujer!?-

Pero que bueno que Yunho le aclaro todo a Jae siiiiiiiiii!!! YunJae puro love!!!

Ooooooooowww!!! T.T pobre el YooSu sigue sufriendo, toda la culpa la tiene Yoochun por mula porque no le confieza que es lo que siente xD bueno que sinp sufren no hay historia xD

Felicitaciones Athena eres buena d(*w*)b

~sigue leyendo~ ~»
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Anónimo26 de enero de 2013, 14:49
Te sigo amando a ti y a tu imaginación xD me encanta el yoosu! Jaja creo que solo por esa pareja lo leo aun que también esta buenísimo al yunjae waaaaau me encanta todo lo que escribes voy leyendo 2 veces este fic y bueno esta es la segunda xD
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Unknown1 de junio de 2013, 23:35
ooooooooooooooohhh por fin pude terminar este cap. maldito estudio que no me deja en PAZ.
gracias por el capitulo =)
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yunhokim2 de julio de 2014, 23:55
desgraciada vieja como la odio nomas esta lastimando a jae
no debería de hacer caso de lo que esa arpía diga si el esta consiente de que lo quiere lastimar y de paso a yunho para que la escucha
pero jae es muy feliz con su yunho y esa que se retuerza que no le a salido le intrigar en contra de yunho pues el sale ganando siempre pues jae termina por convencerse de que yunho lo ama y ya no mas a su ex
y yoochun me desespera por que no le dice a junsu que lo ama y termina con esta tortura que los esta matando
solo espero que no sea demasiado tarde cuando se decida a confesarse con junsu y este ya le haya pedido el favor a otro que se encargue de el y su bebe
por dios decídete pronto yoochun y termina por amar libre mente a tu junsu no se te adelante otro
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Jaenekho30 de octubre de 2014, 11:09
Oooooooh k hermosas se ven envidia a muerte haahaha XD
Menos mal que las palabras de Ga ah ra no afecto mucho a nuestro YunJae el amor puro no deja que lo estrope por un poco de mala hierba hahah Xd
Yoochun no se que piensas Junsu tampoco cede
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sábado, 31 de marzo de 2012

La Edad de la Inocencia - Capitulo 14

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