sábado, 31 de marzo de 2012

La Edad de la Inocencia - Capitulo 16


POEMA

Lo recuerdo todo
Cada lagrima
Los deseos de no irme
Como me arrebataron de tu lado
Y tu ultimo beso
Por eso me pregunto
Por que?
Alguien puede contestarme eso?




Cuando podre estar solo a tu lado?
Quiero estar por siempre a tu lado
Ser feliz, sonreir contigo
Sentir cada latido de tu corazon
Y que tu sientas los mios
sentir tu calido abrazo,
tu suave tacto, la escencia de tus besos
y la pasion de tus caricias

pero………….. por que?
Si te amo y se que amas
Hay obstáculos que se interponen entre nosotros?
Por que siento que no nos dejan ser felices
Que hicimos para merecer esto?
Que hice para no poder estar a tu lado?
Tengo tantas preguntas
Pero no encuentro respuestas
Y sufro …….
Mi corazon duele
Mis lagrimas no cesan
Mi torpe cabeza no entiende que
No todos son como tu
Que no todos quieren protegerme
y debido a eso sufrire
llorare y mi pecho cada dia se sentira desgarrado
si no te siento a mi lado

recuerdo cuando mis sentimientos no estaban claros
cuando no podia decirte fácilmente como ahora que te amo
mientras recuerdo cada cosa de ti
cada promesa cada beso incluso cada entrega
viene tu imagen a mi mente
y se que quiero pasar hasta el final de mis dias contigo
solo puedo pensar en la eternidad junto a ti

ahora solo quiero abrazarte fuertemente contra mi
y decirte todo aquello que no pude
que te amo, te deseo y que no me importa mi inocencia
por que ahora se que quiero perderla contigo
que dejare mis temores de lado
y te hare feliz
que no reprimire mis sentimientos
y te demostrare todo lo que quiero darte
para asi no lamentarme
como lo hago en este momento
de no haberte dado todo de mi.

por eso cuando me salves
y vengas por mi
pedire que se detenga el tiempo
para permanecer a tu lado por siempre
por que se que aunque los obstaculos se presenten
nuestro amor nunca cambiara
y siempre estaras a mi lado
y formaremos una familia llena de amor
una familia que deseo
que tu tambien deseas
y que yo te la dare.
Sentimientos de Jaejoong

By: Peregrina (Pamin)



El carruaje blanco del conde siguió de cerca al carruaje negro del Sr. Kim, en todo momento Yunho trato de mantenerse calmado y no dejarse llevar por los sentimientos que lo embargaban pues tenía que pensar fríamente en la mejor manera de regresar a su esposo a su lado, lo más pronto posible pues temía que la separación le afectara a Jaejoong tanto o más que a él, además que creía que el Sr.Kim podría ponerlo en su contra.

-Joven…no puedo creer lo que está pasando - Susurro la nona aun sorprendida por lo acontecido – como es que un padre puede ser tan cruel con su hijo – Dijo triste la nona por lo que el Sr.Kim le hacia a Jaejoong.

-No lo ama…esa es la respuesta – Yunho la abraso – aquel hombre nunca amo a su hijo…está haciendo todo esto para vengarse de mi… - Susurro - pero si se atreve a tratar lo mal…lo acabare…

-Mi niño…con calma recuerde que Jaejoong tiene a su madre, ella lo protegerá… –se apresuro a decir para quitar de Yunho esos pensamientos que solo lo torturarían mas al creer que su esposo seria maltratado por su padre -…además al Sr.Kim no le conviene tener por mucho tiempo a su hijo lejos de su marido pues la gente murmuraría y como es lo usual creerían que usted lo devolvió, eso solo dejaría mal el honor de la familia Kim.

-Espero…le importe su honor – susurro – Pero por lo pronto intentare conversar nuevamente con el y tratare de que lleguemos a un acuerdo pero si se rehúsa me obligara a solicitar una demanda contra el …- Dijo Yunho llevando su mirada hacia la ventanita tratando de confiar en que el Sr. Kim aceptaría negociar el regreso de Jaejoong a su lado pues aquella demanda aria que la corte revisara los documento que la iglesia guarda donde figura la fecha y la aprobación de los padres de Jaejoong a la boda, pero hacer eso tenía sus pro y sus contra algo que preocupaba a Yunho pues al demostrarse que los padres estuvieron de acuerdo con la boda Yunho lograría tener nuevamente a Jaejoong a su lado pero esa revisión tenía un proceso que demoraba alrededor de un mes y Yunho no quería tener a su esposo lejos de su lado por mucho tiempo ya que su amado se podía exponer a un encuentro con Keita.

Diviso al carruaje del Sr.Kim el cual estaba más adelante que el suyo, logro ver a lo lejos que pronto llegarían al camino donde debían separarse, ordeno a su chofer que se apresurara para estar al lado del carruaje del Sr.Kim y así poder ver a su esposo por la ventana.

El carruaje del conde llego a estar al lado del carruaje del padre de Jaejoong , Yunho observo por la venta y pudo ver a su esposo quien estaba rodeado por los brazos de su madre, Jaejoong tenía la mirada en sus manos las cuales estaba muy cerca a su rostro, sus mejías pegadas al pecho de su madre.

Levanto su mirada despacio encontrándose con la de Yunho, sus miradas se mantuvieron fijas por aquel escaso instante antes de llegar al cruce del camino, el carruaje de Yunho se detuvo pues debía dejar que el del Sr. Kim cruzara, sin poder soportar el nudo en su garganta al saber que Yunho ya no estaba cerca dejo caer sus lagrimas y el sollozo escapo de sus labios.

Su madre acaricio su cabello tratando de calmarlo pero sus caricias no lograban desvanecer la pena en el corazón de su hijo.

-Basta de Lloriqueos – Dijo el Sr. Kim serio – No es momento para berrinches…- al escucharlo Jaejoong pego suavemente sus manos a sus labios tapándolos para no dejar que se escuche sus sollozos, los cuales con mucho esfuerzo trato de acallarlos.

-Deja que llore…tiene derecho a desahogarse por su dolor…- se apresuro a decir su madre.

-Pero acaso no ve lo que aquel hombre ah echo a su familia…debería repudiarlo…- contesto el Sr.Kim.

-No querido…suficiente tiene con la separación…no puedes pedirle que deje de amarlo…

-Amor…pero si hasta lloro para no casarse con el…- Jaejoong escucho en silencio pues no podía meterse su palabra no tenía valor y su madre ya estaba a haciendo bastante al enfrentarse a su padre.

-Nosotros lo obligamos a casarse…somos los únicos culpables- susurro su madre y el carruaje se detuvo.

-Hablaremos dentro…-Contesto el Sr. Kim y bajo, ayudo a su esposa a hacerlo y ella cuando estuvo fuera del carruaje espero por su hijo.

Las nodrizas esperaban sentadas en el salón por la llegada de Jaejoong, al verlo se levantaron y fueron a abrasarlo, mientras el Sr. Kim y su esposa avanzaban hacia los asientos, Jaejoong no pudo evitar dejar caer algunas lágrimas.

-Jaejoong…-Su padre lo llamo y las nodrizas lo dejaron, el avanzo a tomar asiento frente a sus padres mientras secaba sus lagrimas, se sentó.

-Bien…escucha lo que tengo que decirte…-Empezó a decir su padre -…desde hoy en cuanto estés dentro de tu cuarto…no podrás salir de ahí sin mi permiso…-Dijo serio y tajante, sus palabras hicieron que las lagrimas volvieran a brotar de los ojos de Jaejoong el cual no podía creer lo que escuchaba, se empezó a agitar -…No saldrás hasta que yo lo decida…y en cuanto te permita dejar tu habitación…las nodrizas se convertirán en tu sombra…-Dijo las últimas palabras mirando a las nodrizas como dándoles la orden, Jaejoong llevo su mirada a su madre como suplicando le ayudara.

Ella con tristeza asintió con su cabeza a su hijo asiéndole ver que debía obedecer a su padre, jae al ver la reacción de su madre abrió sus labios llenándose de valor para protestar.

-Pe…pero…- Balbuceo.

-Silencio!…-Dijo su padre mirándolo -…no te atrevas a cuestionarme…sabes cuál es tu lugar…así que calla y escucha…-Le dijo serio.

Jaejoong con las lagrimas rodando por sus mejillas cerro sus labios, su madre se entristeció pero decidió dejar que su esposo hablara, no podía contradecirlo ahora, pues tenía pensado ayudar a su hijo a volver con el conde pero su esposo debía creer que ella estaba de su lado. Le dolía mucho ver a su niño sufriendo, no le importaba perder todo con tal de verlo feliz otra vez, era lo único que le importaba ahora.

-Ustedes deben mantenerse a su lado…-Ordeno el Sr. Kim a las nodrizas -…nada de consentimientos…quiero que lo vigilen…ahora llévenlo a su cuarto…-Dijo levantándose.

-No!!...-Jaejoong sollozo levantándose-…Por qué… ¿Por qué? Usted me haces esto…-Balbuceo entre lagrimas, su padre lo observo -…Déjame volver con el – Suplico.

-Eso no pasara…-Contesto su padre, su madre se levanto cuando vio a su hijo caer de rodillas al piso, fue a su lado y se agacho para levantarlo, las nodrizas también lo hicieron cuando el Sr.Kim salió sin importarle el sufrimiento de su hijo.

Su madre lo abraso triste al verlo sufrir, no sabía cómo animarlo, sentía que su corazón era presionado fuerte al verlo llorar y no poder decirle que no se preocupara que su padre lo dejaría volver con su esposo.

-Cariño…escucha, el Conde no va permitir que tu padre disuelva el matrimonio…debemos esperar un poco…veras que él lo solucionara…-Susurro la Sra. Kim.

-Madre…por favor… no permitas…que me encierre…-Suplico Jaejoong pues sentía que moriría si no volvía a ver a Yunho.

-Veré que hago amor… por ahora solo obedece…-Dijo ella dándole un beso en la frente y junto a las nodrizas levantaron a Jaejoong, lo condujeron a su cuarto el cual se convertiría en su prisión hasta que su padre decidiera que podía salir.

Ellas entraron con él y lo llevaron hasta su cama donde empezaron a cambiarlo, a ponerle su ropa de dormir para que pudiera descansar. Una de las nodrizas por orden de la Sra. Kim salió en busca de una bebida para su hijo el cual preparaba la madre de Junsu, tenía pensado darle unas yerbas que lo ayudarían a relajarse y así pudiese dormir.

La nodriza regreso rápido y fue a entregarle el vaso con la bebida a su patrona, quien estaba sentada en la cama donde Jaejoong ya estaba sentado y arropado, pero reacio a dormir pues solo podía llorar.

-Debes tomar esto…-su madre le acerco el vaso, pero Jaejoong movía su rostro en negación -…Por favor…te sentirás mejor – Susurro su madre con sus lagrimas a punto de caer, al ver Jaejoong sintió que si seguía mostrando su dolor lastimaba a su madre, pero no podía tranquilizarse, miro el vaso y lo sostuvo.

-Tómalo…-Su madre le insito y el después de unos segundos obedeció llevando el vaso a sus labios y probo -…Bien cariño –Dijo tomando el vaso su madre y llevando su mano a acariciar el rostro de su hijo – Debes confiar en tu esposo…se que ahora te duele mucho todo esto…pero veras que esto es pasajero…-Dijo ella acercando su rostro y besando la mejilla de su hijo.

Jaejoong la rodeo con sus brazos queriendo con todas sus fuerzas creer en las palabras de su madre, la cual dulcemente trataba de animarlo -…Gracias – Jaejoong le susurro.

-Duerme mi niño…-Dijo ella ayudándolo a recostarse y tapando lo bien con la manta -…mañana temprano estaré aquí a tu lado, no te dejaremos solo…- Le hizo saber su madre dándole otro beso en su frente -…ahora debo irme…descansa…-Le dijo y se levanto para dejarlo, las nodrizas siguieron a la Sra. Kim.

Estando fuera del cuarto la Sr.Kim volteo hacia la puerta de su hijo y se acerco, no escucho el llanto de él, quiso creer que la bebida que preparo la Madre de Junsu logro calmarlo, con tristeza tomo la llave de la habitación de la mano de una de las nodrizas y dejando caer una lagrima aseguro la puerta, poniéndole llave.

Las lagrimas cayeron nuevamente al escuchar el sonido en su puerta, pues lo estaban encerrando en el cuarto como su padre había ordenado, se sentó, no podía dormí, se levanto y corrió hasta la ventana donde movió la cortina y miro.

-No me dejes…ven por mi…-Susurro dejando caer sus lagrimas -…moriré…Yunho…moriré…-susurro entre lagrimas mirando por la ventana a la luna la cual brillaba fuerte aquella noche, despacio se dio la vuelta y observo su cuarto aquella habitación en donde vivió antes de casarse, su mirada se detuvo en su cama, recordó los momentos que vivió junto a su esposo envueltos entre esas sabanas, llevo sus manos hacia el abrasándose, sus sollozos se escucharon despacio pues sabía que no podría sentir sus caricias nuevamente y ahora quería estar a su lado en sus brazos.

Camino hasta su cama y entro en ella cubriéndose con la colcha, acurrucándose, sollozo recordando cada caricia vivida sobre esa cama, se abraso a una de las almohadas y pudo sentir levemente el aroma de Yunho el cual lo hacía tranquilizarse, cerro sus ojos queriendo creer que él estaba a su lado, poco a poco las yerbas que bebió fueron haciendo su efecto, pronto Jaejoong dormía abrasado a la almohada inmerso en sus sueños donde no sentía dolor.


**

Sus ojos se hicieron grandes, mantuvo su mirada fija, su cuerpo se quedo paralizado por unos segundos hasta que recobro la compostura y llevo su mirada a los ojos de Junsu de los cuales brotaban las lágrimas.

Dejo caer la prenda de sus manos y despacio avanzo, bajando su mirada deteniéndola en las manos de Junsu las cuales aun se mantenían sobre su vientre tratando inútilmente de ocultar lo que Yoochun ya había descubierto.

El cuerpo de Junsu tembló al ver a su amo aproximarse, su corazón golpeaba fuerte, temía por la reacción de Yoochun quien podía pensar que el bebe en su vientre era de Jasufa pues el no contesto cuando Yoochun le pregunto que desde cuando se acostaba con el esclavo.

Su respiración se acelero conforme Yoochun estuvo más cerca y sus lágrimas caían por sus mejillas, Yoochun ya a un paso suyo tomo sus manos tratando de sacarlas de su vientre.

-No…por favor…- suplico Junsu y Yoochun llevo las manos de Junsu contra la pared, mantuvo su mirada fija sobre el vientre pudiendo ver mejor el pequeño volumen que tenia, luego lo miro a los ojos.

Dejo libre una de las manos de Junsu para poder llevar la suya y ponerlo sobre ese vientre, son su mirada siguió a su mano, Junsu cerró sus ojos cuando Yoochun estuvo a punto de poner sus manos sobre su abultado vientre.

En el instante en que Yoochun pego su mano a la piel del vientre de Junsu el movimiento en el interior del cuerpo de este se sintió en respuesta a su contacto, Junsu abrió sus ojos de golpe cuando sintió a su bebe moverse, su sollozo vino a sus labios.

La mirada de Yoochun cambio, la sorpresa en sus ojos se había ido y ahora esta tenía un brillo especial, por alguna razón, su corazón le decía que el bebe era suyo, levanto su mirada hacia junsu sin quitar su mano del vientre de este.

Sus miradas fijas una de la otra, Junsu mostraba en sus ojos temor y miedo, mientras Yoochun sentía el deseo de abrasarlo y acurrucarlo entre sus brazos, pues él le iba dar un hijo al cual el amaba desde ese mismo instante. Soltó la otra mano de Junsu y llevo la suya al rostro de este, acerco su rostro a él hasta el punto que podían sentir sus respiraciones.

-Es mío… lo sé…-Susurro Yoochun contra el labio de Junsu, al escucharlo intento desviar su mirada pues había sido descubierto y temía perder a su bebe -…no intentes…decirme lo contrario…por que estoy seguro que el bebe que está en tu vientre es mío…-susurro.

Sus labios ser abrieron, pero antes de poder decir algo, las nauseas vinieron a él y tuvo que llevar sus manos a sus labios, un fuerte mareo lo aquejo, sus brazos y su cuerpo se pegaron al de Yoochun, el cual lo rodeo por aquel breve instante en que duro, pues junsu se sobre puso y retrocedió.

-Señor…-balbuceo-…yo…- dijo nervioso por la mirada de Yoochun, no sabía que decir, que hacer solo quería protegerse de que le quitaran a su hijo.

-No…me amas…lo sé…-se apresuro a decir Yoochun -…te lastime mucho…lo siento…-susurro soltando a junsu -…por eso…cuando nazca me lo podrás entregar y podrás hacer tu vida…con el hombre que ames…-Dijo con el dolor en su corazón al recordar la escena del beso de Jasufa y Junsu, sintió que no tenía derecho a interferir por mas que le doliera pues ya Junsu tenía bastante con llevar a su hijo en su vientre.

-No…- junsu negó con su cabeza agitado -…No! – Casi grito pues eso era lo que el había querido evitar y ahora estaba confirmando su temor, cayó al suelo de rodillas llevo su mirada a Yoochun quien lo miro sorprendido -…no me quite a mi bebe…se lo suplico – Dijo entre lagrimas Junsu poniendo sus manos sobre las piernas de Yoochun .

Al verlo suplicar por que no le quitara a su hijo Yoochun se sorprendió pues el no deseaba hacer eso pero creía que Junsu no amaba al niño por la forma en que fue concebido y solo quería quitarle el peso que podía cargar al tener que verlo y recordar el abuso al cual fue sometido. Se agacho quedando a la altura de junsu, se quito su saco y lo cubrió.

-Que estás diciendo…-Susurro Yoochun aun sorprendido mirando a aquellos ojos llenos de lagrimas -…acaso amas al bebe que llevas en tu vientre…-susurro.

-Señor…yo…-Junsu quería decirle cuanto amaba a su bebe que crecía en su vientre pero temía que se diera cuentas que también lo amaba a el, estaba asustado.

-Junsu…-Dijo llevando su mano, rozando a la mejilla de Junsu -…abuse de ti…y te embaracé…- Susurro observándolo sin poder comprender los sentimientos de Junsu pues lo natural para el es que Junsu rechazara al bebe que crecía dentro de el -…amas al esclavo y…

-No…no –Dijo negando con su cabeza -…no amo a Jasufa… – susurro , al escucharlo Yoochun abrió sus ojos grandes, su corazón latió fuerte al escuchar que no amaba al esclavo y sintió que tenía una esperanza, pues quería tenerlo a él y a su hijo-…yo solo quise proteger a mi bebe…no quería que esto pasara y que usted me lo quisiera quitar…por eso yo…hice lo que hice…-sollozo -…daría mi vida por mi bebe…-Soltó sin darse cuenta…- Yoochun entendió lo que Junsu pensaba hacer, pasar a Jasufa como padre de su hijo

-Entonces…Me amas?…-Susurro sujetando con ambas manos el rostro de Junsu y acercando su rostro -…acaso me amas Junsu por que no encuentro otra respuesta al amor que sientes por mi hijo…si es así por favor dilo…por que yo te eh amado desde hace mucho y no soporto mas estar lejos de ti…-Susurro cerca de sus labios.

Dejando caer más lagrimas Junsu miro los ojos de Yoochun -…yo lo amo…lo amo!!…-Dijo entre lagrimas y luego bajo su mirada, el corazón de Yoochun golpeo fuerte contra su pecho había soñado con escuchar esas palabras de los labios de Junsu, sus lagrimas brotaron pues nunca se había sentido tan feliz.

No entendía cómo es que Junsu se enamoro de él a pesar de todo lo que le había hecho, se sentía agradecido con la vida por lo que le estaba dando, pues tenía el corazón de Junsu y un hijo en camino, nada mas podía desear en la vida ya que ahora lo tenía todo, al hombre que amaba.

Lo rodeo con sus brazos, Junsu pego sus manos en su pecho incapaz de creer todo lo que estaba pasando, el lo amaba, había creído que eso era imposible pues el solo era un esclavo más que jamás creyó que podía ser amado por un hombre como él.

-Perdóname…-Susurro Yoochun -…te empuje a hacer…cosas que no querías…-Dijo refiriéndose al beso de Junsu y Jasufa -…si tan solo te hubiera hecho sentir amado…pero temía ser rechazado…-susurro y Junsu se separo un poco para ver su rostro.

-Yo…soy quien debe pedir perdón…no debí ir a…

Yoochun lo silencio poniendo un dedo sobre sus labios -…no digas su nombre –susurro, pero el necesitaba explicarle, con su mano Junsu aparto la de yoochun para poder hablar.

-Escúcheme por favor…Juro que no paso nada entre él y yo…nunca estuvimos juntos…nunca…- Dijo Junsu negando con su cabeza, temiendo que él no le creyera.

-Te creo…-Susurro contra sus labios -…confió en ti…mi amor…-susurro acercando sus labios posándolo sobre las de el, suavemente sus labios fueron envolviéndose en un dulce beso que se correspondieron al instante en que sus labios rozaron.

Yoochun levanto a Junsu en sus brazos y lo llevo a su habitación, lo sentó sobre su cama -…Gracias Junsu…gracias por darme un hijo…-susurro besando sus labios, haciendo que el cuerpo de Junsu se recostara sobre la cama – el solo podía escuchar el fuerte golpe que daba su corazón contra su pecho al sentirse tan amado por Yoochun.

Después de separar sus labios sus miradas se encontraron, ambos se regalaron una sonrisa por el feliz momento que Vivian, acompañados de unas cuantas lágrimas.

-Te amo…-Susurro Yoochun cerca de los labios de Junsu, se separo para verlo, Junsu lo miro con sus ojos llenos de lagrimas -…y a amo a nuestro bebe…-Susurro llevando sus labios a su vientre al cual dejo un pequeño beso, el bebe en el interior del vientre de Junsu se movió cuando los labios de Yoochun tocaron la piel.

Sonrió al ver la respuesta de su hijo, llevo su mirada a Junsu.

-Nosotros también te amamos…-Dijo Junsu llorando de felicidad.

Ambos sobre esa cama se abrasaron y se dieron suaves besos mientras Yoochun daba caricias al vientre de Junsu, después de confesarse el amor que se tenían, durmieron juntos abrasados Yoochun rodeo a Junsu de manera protectora pues había querido mucho estar así con el, saber que cuando despertara en la mañana Junsu estaría a su lado, ese era el amanecer que tanto había deseado y ahora se estaba cumpliendo, como un sueño que vino a aliviarlo de los malos tiempos.


**

Gracias a las Yerbas que preparo la madre de Junsu y que le hicieron tomar en la noche Jaejoong dormía profundamente, ya casi iban hacer el medio día y aun el estaba inmerso en sus sueños.

Su madre junto a dos de las nodrizas entraron al cuarto de Jaejoong, la nodriza de mayor edad se acerco y al verlo aun dormido miro a su patrona.

-No… -Susurro negando con su cabeza - dejémosle dormí un poco mas…- Dijo acercándose a mirar a su hijo quien dormía profundamente.

Las nodrizas se apresuraron a alistar el baño para Jaejoong mientras su madre se sentó en un lado de la cama y mira a su niño dormir, a quien había extrañado tanto desde que se había casado y había ido a vivir al castillo del conde, pero lo prefería lejos y feliz que tenerlo ahí junto a ella cerca y lleno de tristeza, sabía bien que debía ayudarlo a volver junto a su esposo para volver a ver la sonrisa en el rostro de su hijo.

Al cabo de ½ hora las nodrizas tuvieron listo el baño de Jaejoong y con pesar su madre tuvo que intentar despertarlo.

-Cariño…-susurro su madre apartando su cabello de las mejillas de Jaejoong -…despierta…-susurro.

Al sentir la suave mano sobre su rostro y el aroma protector de su madre sus parpados empezaron a moverse intentando abrir sus ojos.

El rostro de su madre estaba frente a él, abrió sus ojos grandes reconociendo el lugar donde estaba , su habitación, había querido creer que cuando despertara iba aparecer en el castillo junto a su esposo, en sus brazos, pero su realidad era otra estaba preso en su habitación por mandato de su padre.

-Debes tomar un baño…Jae…-Susurro su madre al verlo ya despierto, sin ganas y sin ánimos asintió con su cabeza, en sus ojos se podía ver la tristeza que lo atormentaba -…vamos…-Dijo su madre ayudándolo a levantarse.

Las nodrizas llevaron a Jaejoong al cuarto de baño y lo sumergieron en la aguas echando las escencias que a él tanto le gustaban, el dulce aroma de rosas.

Cuando terminaron de ayudarlo a bañarse, le pusieron un camisón blanco de mangas largas, y lo sacaron del cuarto de baño. Su madre esperaba sentado sobre un sillón que estaba algo cerca a la puerta de entrada a su cuarto.

Jaejoong camino acercándose a la ventana de su cuarto mientras sus nodrizas iban buscando la ropa que le pondrían, con su mano abrió la cortina y vio como un carruaje negro se iba acercando, impaciente se ayudo con su otra mano y abrió mas la cortina dejando ver todo su cuerpo por aquella ventana la cual estaba serrada, al darse cuenta que era el carruaje de Yunho pego sus manos sobre el cristal.

El carruaje se detuvo antes de llegar a la entrada de la mansión del Sr.Kim, Yunho descendió del carruaje y dio unos cuantos pasos para acercarse a los escalones que daban a la puerra de la mansión cuando se detuvo y llevo su mirada al cuarto de su esposo.

El corazón de Jaejoong golpeo fuerte cuando sus miradas se encontraron, se pego mas a la ventana por la emoción de ver que su esposo venia, tenía la esperanza de que se lo llevara ese mismo día.

Yunho lo miro deseando con todas sus fuerzas sacarlo de ese cuarto, llevárselo consigo, apenas una noche sin verse, sin estar cerca, aquella mañana al despertar y no ver a su Jaejoong en sus brazos fue tan duro, nunca se había sentido tan solo ni cuando perdió a su anterior prometida, lo necesitaba, quería abrasarlo, besarlo, pero estaban tan lejos y tan cerca a la vez que era una tortura no podía darle su amor, sentía que no podía vivir sin él.

-Que?…no…-susurro Jaejoong cuando sus manos fueron retiradas de la ventana, su madre lo rodeo con sus brazos alejándolo de la ventana la cual se cubrió con las cortinas impidiendo que pudieran verse.

Sus madre lo soltó y fue hacia la venta a mirar que era lo que llamaba la atención de su hijo, el cual no le había hecho caso cuando ella le pedía que se alejara de la ventana, pues Jaejoong había tenido su mirada en su esposo, en ese momento el no veía nada mas y no escuchaba, su atención había estado concentrada en el.

-Oh…es el conde…-Dijo la Sra. Kim al verlo parado mirando hacia ella, desde su lugar la madre de Jaejoong hizo reverencia mostrándole su saludo y el conde respondió de igual forma, cuando la madre de Jaejoong se alejo de la ventana y cerro la cortina Yunho avanzo en dirección a la entrada de la mansión.

-Por…que?...-Jaejoong cuestiono la actitud de su madre al alejarlo de la ventana cuando estaba mirando a su esposo.

-Jae…-su madre susurro estando frente a él -…mírate…no puedes mostrarte así por la ventana…-al escucharla Jaejoong miro su ropa y se dio cuenta que no estaba vestido apropiadamente.

-Lo siento…-susurro -…pero…él es mi esposo…-Jaejoong dijo creyendo que no había hecho algo malo si era su esposo quien lo vio.

-Si…es tu esposo…pero y si otro hubiera sido quien bajaba de ese carruaje…y te hubiera visto…-Contesto su madre -…crees que a él le hubiera gustado eso…

Al escucharla Jaejoong bajo su mirada pues ella tenía razón, pero no se sentía arrepentido pues al menos lo vio y sabía que él estaba ahí para hablar con su padre.

-Bueno cariño ya paso…-Dijo ella abrasándolo.

Dos golpecitos en su puerta llamaron su atención, las nodrizas que estaban arreglando el vestido que pondrían a Jaejoong también llevaron su mirada a la puerta y después miraron a la Sra. Kim.

Ella asintió con su cabeza y fue entonces cuando una de las nodrizas fue a abrir la puerta, cuando esta se abrió Jaejoong pudo ver a su otra nodriza la cual entraba, pero justo tras de ella ingresaba también una mujer vistiendo las ropas de monja o al menos eso era lo que al le parecía, se trataba de una de las madres del convento pues su madre había mandado por ella para que revisara a su hijo y así quitarse algunas dudas.

Jaejoong miro a su madre pues no comprendía que estaba pasando y porque esa mujer entraba a su cuarto.

-Hijo…ella está aquí para…-Dijo su madre incapaz de seguir hablando ante la mirada desconcertada de su hijo- No te asustes…- Susurro ella dejando a Jaejoong y paso a acercarse a la mujer quien era la que se encargaba de revisar a las jóvenes y verificar si seguían siendo vírgenes o no.

Unos cuantos intercambios de palabra entre la madre del convento y la Sra. Kim los cuales Jaejoong escucho como murmullo, no alcanzaba a escuchar, espero ahí parado mirando a su madre.

La mujer lo miro y avanzo hacia él mientras su madre se sentaba en uno de los sillones, el miro a la mujer mientras se acercaba, sus nodrizas venias tras la madre del convento, ella camino alrededor de Jaejoong y después de observarlo bien se detuvo tras suyo.

-Por favor…-Dijo la mujer y de inmediato las nodrizas sostuvieron las faldas del camisón de Jaejoong y empezaron a subirlo, el se asusto sin entender el por qué.

-No…-susurro agitado -…que hacen…-Dijo tratando de detenerlas.

-Cálmate…nada malo pasara…-su madre se apresuro a decir y el la miro, se quedo quieto y las nodrizas continuaron doblaron el camisón dejándolo por arriba de sus rodillas, sin dejar exponer toda su desnudes, la mujer tras suyo le ordeno que separara un poco sus piernas, al escucharla él se agito levemente, asustado obedeció a la mujer tras suyo.

Yunho conversaba con el Sr.Kim, pidiéndole no continuara con su arrebato de mantener a Jaejoong lejos del pues él era su esposo y como tal debía tenerlo bajo su poder, pero el Sr.Kim terco no pretendía darle el gusto y entregar a su hijo pues solo se dejaba guiar por su cólera y su orgullo el cual le decía que no podía dejarse vencer por un hombre que oso estar en su contrata a pesar de que tiene por esposo a su hijo.

Calmadamente Yunho continuo presionando pues quería que todo se arreglara de mutuo acuerdo y estaba dispuesto a darle todo el oro que pidiera, pero el Sr. Kim al verlo tan insistente solo se aferro más a su idea de separarlo de su hijo.

-Pierde…su tiempo…conde…

-Estoy tratando de ser razonable con usted…pero hay un límite y usted ya lo está cruzando…-Dijo Yunho muy serio.

-Mi hijo no volverá a su lado…- le contesto -...así que baya consiguiéndose otra esposa…

-No quiero…a alguien más…-Yunho dijo levantándose -…usted no podrá impedir que Jaejoong vuelva a mi…-Dijo molesto pues solo le quedaba demandar su caso y así se procediera a la revisión de los documentos de su matrimonio.

-Bien…mientras tanto usted no puede ver a mi hijo…-Dijo vilmente el Sr. kim, Yunho apretó sus manos en un puño pues sabía que hasta que no terminara el proceso y se confirmara que su matrimonio fue consentido y que ya había cumplido su periodo para pedir cualquier a nulidad, debía mantenerse a muchos metros de distancia de Jaejoong.

-Será mejor que él esté bien…no le perdonare si se atreve…a ofenderlo…-Dijo molesto Yunho.

-Mi hijo está con su familia…-Se atrevió a contestar -…y quienes lo aman…

-Por su bien Sr. Kim… cuide de el…o se arrepentirá…- Soltó Yunho creyendo que era mejor amenazarlo pues temía dejarlo por mucho tiempo en esa casa, esperaba que la Sra. Kim si lo proteja. Se dio la media vuelta y sin esperar a que el Sr. Kim lo acompañara a la salida camino pasando por el pasillo donde podía ver las escaleras que lo llevaban al 2do piso, llevo su mirada a la puerta de salida para no tentarse de su subir las escaleras e ir por su esposo, el dolor por no poder verlo lo estaba lastimando.

La mujer observo poniéndose bajo las piernas de Jaejoong quien al sentir las manos de ella separando sus nalgas cerro sus ojos y estrecho sus manos asustado.

-Bien…-Dijo la mujer dejando de observar y levantándose -…es todo…-Dijo y las nodrizas bajaron el camisón de Jaejoong cubriéndole las piernas, este se agito pero más calmado porque ya no estaba esa mujer mirándole, examinándolo.

Jaejoong Observo a la madre del convento quien se acercaba a su madre, la cual se sentó y empezó a hablar pero él no alcanzaba a escuchar nada de esa conversación.

-Su Hijo ha sido desflorado…-Susurro la mujer.

La Sra. Kim había esperado esa repuesta, sabia que ya su hijo había pasado por esa experiencia y estaba feliz de saber que el matrimonio de su hijo si había sido consumado.

-Pero…-Susurro la Madre del convento -…Dudo mucho que este en espera…

-Por que…Usted acaba de decir que si hubo contacto sexual…- susurro -…entonces cabe la posibilidad de que este embarazado…

-Por lo que pude ver…su esposo lo cuido muy bien…pues no hay signos…ni siquiera una cicatriz que demuestre…-Dijo callando al ver que la Sra. Kim no comprendía, y decidió ser más directa -…no hubo mucho acto sexual…al menos no lo suficiente y preciso para embarazarlo…puedo asegurar que no está en espera…-susurro desvaneciendo las esperanzas de la Sra. Kim quien creyó que su hijo podía estar embarazado, pues si era así el podría volver a lado de su esposo de inmediato.

-No…puede ser cierto…-susurro apenada y miro a su hijo quien también lo miraba, pero el cual volteo y corrió a la ventana cuando se escucho el ruido de los caballos, Jaejoong miro tras los cristales como el carruaje de Yunho se iba alejando, pego sus manos sobre el vidrio.

-No…no te vayas…-susurro despacio -…por favor…vuelve llévame contigo…- Susurro pegando su frente en el cristal…- Sus lagrimas cayeron sin poder contenerse más.

Su madre y las nodrizas lo miraron no tenía el corazón duro como para ir y apartarlo de la ventana, solo escucharon su leve llanto dejándolo desahogarse.

-Esta segura…-Pregunto la Sra. Kim a la mujer y ella sintió.

-Para que el este embarazado…debería haber tenido más contacto sexual…- susurro.

-Entiendo…- contesto la Sra. Kim.

-Esto es raro…-Dijo la madre del convento -…para un matrimonio que lleva mas meses…lo usual es que sus primeros meses sean de mas…usted sabe…de mas contacto físico entre los esposos…tal vez su hijo aun no se acostumbro…y su esposo fue muy bueno al no exigirle que le cumpliera…normalmente los toman sin su aprobación …

-Su esposo es muy amable…de eso no queda duda…pero debió embarazarlo…ahora que podré hacer para ayudarlos…-susurro.

-Esperar…todo se arreglara…o el debe pedir la revisión publica…-susurro.

-No…él nunca aceptara hacerle eso a Jaejoong…-susurro la Sra. Kim mirando a su hijo quien continuaba en la ventana -…Gracias por todo…-La Sra. Kim dijo levantándose y la mujer también lo hizo, se despidió y una de las nodrizas acompaño a la madre del convento, la cual salio del cuarto.

Se acerco a su hijo y lo alejo de la ventana, este abraso a su madre la cual lo rodeo con sus brazos tratando de consolarlo, ella tuvo que aguantar el no dejar caer sus lagrimas pues necesitaba mostrarse calmada para no trasmitirle aquella tristeza que sentía al ver que su hijo no estaba embarazado, tenía que ser fuerte para que el también lo fuera.

-Ya…mi amor…ven…-Dijo ella llevándolo a su cama, lo sentó.

-Por que…por que se fue…no debió…yo quería ir con el…-susurro, su corazón se sentía dolido por no haber podido tenerlo cerca y abrazarlo, deseaba estar junto a él, verlo más cerca.

-Seguro el quiso verte…no dudes eso…pero deben haberle impedido…cálmate y confía en el…-susurro su madre, sabiendo que su esposo no iba permitir que ellos se vieran a una corta distancia.

Las nodrizas sostenían al vestido que iban a poner a Jaejoong esperando la orden de la Sra. Kim para ir y vestirlo.

El se dejo caer sobre la cama y su madre lo acomodo bien abrigándolo con las colchas, negó con su cabeza mirando a las nodrizas y ellas fueron y devolvieron la ropa al ropero donde lo acomodaron, esperaron sentadas dejando a su patrona y su hijo estar juntos.

-Más calmado ya…-Su madre susurro y el asintió con su cabeza, pues no quería desesperarse, recordaba las palabras de Yunho cuando él le Juro que regresaría a su lado, se aferraba a esas palabras con todas sus fuerzas para no llorar por lo solo que se sentía sin él.

-Duerme…será mejor…-ella dijo acariciándole el cabello -…yo estaré aquí…a tu lado…-Susurro, Jaejoong cerró sus húmedos parpados deseando dormir y olvidar todo, quería pensar que todo era una pesadilla.


**


CINCO DIAS DESPUES


Años, eso era lo que le parecía a Jaejoong, como si hubiera pasado muchos años lejos de Yunho pues cada día, cada hora y segundo que pasaba lejos de el sin verlo, sin escuchar su voz era una tortura, segundo a segundo sentía que una eternidad pasaba y su control se estaba derrumbando, no aguantaba más…quería verlo o sentía que iba morir.

Sollozo sobre su cama muy temprano al despertar y ver que la pesadilla continuaba, no aguanto más y dejo que sus labios se llenaran de sus sollozos, había sido fuerte aquellos 5 largos días sin dejar que las lagrimas aparecieran por su rostro no al menos mas de una vez, pero ahora sentía que lloraría hasta desvanecerse pues el dolor era muy fuerte.

Su madre entro rápido al cuarto asustada al escuchar su lamento, se acerco y se sentó sobre su cama, ella tampoco podía aguantar más y seguir viendo a su hijo sufrir.

-Moriré…-susurro ente lágrimas.

-No…-ella susurro.

-estoy…muriendo…madre…

Las nodrizas entraron y cerraron la puerta.

-Traigan…lo que les dije…-Ordeno la Sra. Kim a las nodrizas, las cuales corrieron al ropero y buscaron.

-Tu…no morirás…por que hoy lo vas ah ver…-Dijo la Sra. Kim decidida a sacar a su hijo de aquel encierro, pues ya no soportaba mas verlo agonizar de dolor.

-Que…-Jaejoong contesto mirándola, deteniendo su llanto, su corazón se sobresalto al escuchar a su madre.

-Si…confía en mi…te sacare de aquí…-susurro su madre y las nodrizas estuvieron a su lado con la ropa en sus manos.

-Pero…mi padre – Dijo Jaejoong sabiendo que él no quería que saliera de ese cuarto.

-No te preocupes…solo deja que las nodrizas te vistan…ahora iré ah hablar con el…tú no te preocupes…-Susurro su madre levantándose dejando a su hijo.

Las nodrizas se apresuraron en vestir a Jaejoong, colocaron un corsé en su torso mientras otras 2 de ellas iban poniendo unas medias que le daban por encima de las rodillas y la iban sujetando con una liga al corsé, el recordó haber utilizado uno de esos modelos bajo su vestido de novia, sin protestar dejo que ellas continuaran, y observo después el vestido cuando ya estaba puesto, una de las nodrizas colocaba una bincha sobre su cabello mientras las otras terminaban de sujetar el vestido.

-Pero…esto…-susurro Jaejoong -…esto es ropa de…-Dijo mirando a una de sus nodrizas la cual le entregaba un librito, Jaejoong lo tomo y la miro, las nodrizas evitaron en todo momento responder a sus preguntas pues debían esperar a su patrona y que ella hablara con el.

Después de varias horas en las que Jaejoong se canso de insistir por una repuesta de sus nodrizas, se sentó.

-Estas…listo? – Dijo su madre entrando al cuarto y camino hasta el -…perfecto…- Dijo ella al verlo y Jaejoong se paro.

-Pero…esto…-Dijo el desconcertado por la vestimenta.

-Por favor…déjenme un momento con el…- La Sra. Kim pidió privacidad a las nodrizas las cuales rápidamente se alejaron de Jaejoong y fueron a sentarse lejos de ellos.

Tomo de la mano a su hijo y lo llevo hacia la cama donde se sentaron.

-Escúchame bien…- Dijo ella levando una de sus manos al rostro de su hijo, pues pensaba hablarle claramente como tal vez nunca lo había hecho -…la otra vez…cuando la madre del convento te reviso…- Dijo la Sra. Kim y el recordó la escena -…ella se encargo de cerciorarse si estabas en espera…-Susurro su madre y Jaejoong abrió sus ojos grandes -…lastimosamente no es así…ya que si estuvieras embarazado inmediatamente volverías al lado de tu esposo – al escucharla Jaejoong abrió sus labios sorprendido.

-No estoy emb…-soltó de sus labios con tristeza sin poder terminar de hablar.

-Escucha…necesitas estar embarazado…-susurro su madre -…por eso te daré cuatro noches al lado de él…las cuales tendrás que aprovecharlas.

-Que!...-susurro sorprendido pues no entendía cómo iba pasar eso si no podía estar cerca de el.

-Ahora saldremos…iremos a la iglesia y después te llevare a la mansión del conde donde tú te quedaras, yo y las nodrizas iremos a visitar a uno de mis parientes y volveremos por la mañana para recogerte…

-Y…mi…- Jaejoong no entendía como su padre le iba permitir salir.

-Tu padre acepto que yo te sacara,…él cree que estarás todo el tiempo a mi lado por eso el nunca se enterara de lo que estamos haciendo, yo veré como los demás días salimos, tu solo debes concentrarte en seducir a tu esposo pues al verte tal vez querrá regresarte para evitar problemas, pero tu deberás aferrarte a él y hacer que te tome…-susurro su madre, el abrió sus ojos grandes ante todas sus palabras pero asintió con su cabeza pues lo que más deseaba era volver al lado de Yunho y la idea de tener un hijo con el hizo que su corazón golpeara contra su pecho pues lo amaba y quería tener ese bebe en su vientre.

-Ahora vamos…-Dijo su madre y las nodrizas se apresuraron a ponerse al lado de él, salieron del cuarto para alegría suya pues le alegraba mucho poder salir de ahí.

Ya en su carruaje su madre sentada frente a él, la nodriza de mayor edad al lado de ella y las otras 2 sentadas a su lado, el carruaje corrió llevándolos a la iglesia.

Una vez dentro de la Iglesia se sentaron la Sra. Kim se sentía agradecida de que no haya mucha gente pues temía que se acercaran a preguntar el por qué de la separación de su Jaejoong y el conde ya que bien sabia que todos pensarían que el conde lo había devuelto, ella no quería que su hijo se sintiera avergonzado por los chismes que ya debían estar circulando.

Después de varias horas Jaejoong y sus nodrizas salían mientras su madre aun en el interior de la iglesia se despedía de algunos conocidos.

Bajo de su carruaje necesitando ir y presentarse en la iglesia pues hacia mucho que no lo hacía y esa tarde el deseo de poner sus pies ahí lo habían asaltado, obediente a su impulso caminaba ya acercándose divisando los grandes escalones de la iglesia cuando una hermosa imagen lo izo llevar su mirada y quedar sorprendido por la exótica belleza de una bella mujer que empezaba a bajar de esos escalones y que a su lado 3 mujeres lo custodiaban.

Observando se acerco y cuando estuvo cerca se paro frente de ellas asiendo que se detuvieran, pudo ver aquellos grandes ojos los cuales eran hermosos y estaban sorprendidos por su actitud.

-Disculpe madan no quiero importunar…solo deseaba saludarla…mi nombre es shim chamgmin…-Susurro acercando su mano para que Jaejoong le entregara la suya, rápidamente una de las nodrizas acerco la mano de Jaejoong pero justo en la que el tenia su anillo de matrimonio.

El llevo sus labios y las poso sobre la mano de Jaejoong, al volver la mirada a el dijo:

-…Esta casada…ya veo…pero me gustaría saber su nombre…-susurro aun interesado en al menos saber quién era ya que para el saber que era casada no era algo que lo hiciera rendirse.

-Yo…- Jaejoong nervioso no sabía si debía hablar con él, llevo una mirada a su nodriza la cual asintió con su cabeza asiéndole ver que podía hablar con el - …soy Jaejoong… de Jung…

-Jung…- repitió el recordando aquel apellido -…esposa del conde…-susurro.

-Si…- contesto Jaejoong.

El consideraba a Yunho no solo como un aliado sino como un amigo y creía que no debía siquiera pensar en la belleza que tenía frente a el de la manera en que pensó desde que la vio, pero su instinto de conseguir lo que quería a veces era más fuerte.

-Jae…- Susurro su madre bajando.

Aquella voz hizo que llevara su mirada a la mujer que era dueña de aquel encantador sonido que salió de sus labios, sus ojos se hicieron grandes al verla, una mujer algo mayor pero no lo suficiente como para no tentarlo y de una belleza que a él le dejo más que embobado.

-Madre…-susurro Jaejoong volteando y shim changmin pudo ver mejor a la mujer que bajaba fue en ese instante que se sintió salvado pues ya no tenía que enemistarse con el conde por la hermosa esposa que poseía y que él había deseado por unos instante pues ahora la madre de Jaejoong lo había cautivado de una manera que él jamás había imagino que podría llegar a estar por una mujer.

-Será mejor que…

-Disculpe…-Dijo acercándose a ella -…permítame presentarme…señora…

-Kim…Sra. Kim…-le hizo saber mirando al joven que frente a ella esperaba por su mano.

-Un placer Sra. Kim…soy Shin changmin…para servirle…-Dijo besando su mano cuando ella la poso sobre la de el.

-Un gusto…joven…pido me disculpe…pero

-No…no se preocupe- contesto viendo el apuro de ella -…pero me gustaría invitar a su familia a cenar…-dijo sin moverse del frente de ella, no quería que se le escapara.

-ah…pues lo siento pero ahora…no creo que…- soltó y después de unos segundos se dio cuente que esa podría ser una oportunidad para sacar a Jaejoong -…me encantaría pero…siento decirle que mi esposo no podrá…pues el tienes unos asuntos y…

-Perfecto…perdón – dijo rápidamente al darse cuenta de sus palabras -…me gustaría que ustedes vengan…por favor…-dijo el mirando a Jaejoong y sus nodrizas y luego a la Sra. kim.

-Bien…- dijo la sra. Kim pues ahora tenia otro pretexto para sacar a su hijo -…esperare la invitación…-dijo despidiéndose, bajando ya con su hijo y las nodrizas.

-Lo mas pronto…estará en sus manos…-susurro changmin observando como se alejaban, se dio la media vuelta y entro feliz a la iglesia, mas de lo normal pues esta seguro de haber encontrado a la mujer que el siempre había querido tener a su lado y no pensaba dejar pasar la oportunidad de conquistarla.

En el interior del carruaje la Sra. Kim se sentó al lado de Jaejoong dándole las últimas indicaciones pues ya estaban acercándose al camino que los llevaba a la mansión del conde.

Cuando estuvieron cerca al camino el carruaje se detuvo pues hasta ahí era lo mas que podía acercarse, pues no podían dejar que su carruaje se viera acercándose a la mansión del conde.

-Jae…- lo llamo su madre antes que el abriera la puerta del carruaje -…recuerda por la mañana estaremos aquí para recogerte…- dijo su madre y el asintió con su cabeza, al abrir la puerta pudo divisar a lo lejos una gran mansión, volteo a mirar a su madre antes de bajar y ella asintió con su cabeza pues el nunca había ido aquella casa y por lo tanto no lo conocía.

Bajo ante la miradas de su madre y las nodrizas, sujeto bien su capa mirando lo lejos que estaba de la mansión.

-Ve…Jae…apresúrate estaremos aquí hasta que llegues a la puerta…-susurro y el se despidió de ellas y empezó a caminar por los pastos, alejándose del camino, empezó a correr.

Un fuerte sonido lo hizo detenerse, llevo su mirada al cielo y de pronto la lluvia empezó a caer, aquella gotas empezaron a mojarle el rostro, llevo sus manos y se cubrió con la capucha de la capa.

-Corre!!...-Su madre grito y el al escucharla empezó a correr lo mas que podía, pues la ropa que bestia mas el pasto crecido por el cual pasaba le dificultaba avanzar, había amado tanto la lluvia antes que le gustaba estar bajo ella, pero esta vez lo estaba odiando por que le impedía avanzar y ver bien.

Su madre cerró la puerta del carruaje y observo por la ventana junto a las nodrizas, ella llevo la mano a su pecho asustada por que su hijo estaba bajo aquella agresiva lluvia.

-Todo saldrá bien…- una de las nodrizas empezó a calmar a su patrona.

-Eso espero…temo que mi pequeño sea rechazado…-susurro la Sra. Kim sabiendo que el conde querría regresarlo -…pero tal vez esta lluvia sea de ayuda…-susurro, cuando pudo ver que a lo lejos su hijo ya estaba cerca de la mansión, aviso al chofer para que pusiera en marcha el carruaje y lo llevara a la casa de uno de sus parientes.

Al llegar a la gran puerta el toco con ambas manos utilizando toda la fuerza que tenia para ser escuchado.

Yunho estaba en el salón revisando algunos documentos mientras la nona le traía algo de tomar, al escuchar el sonido de la puerta ella dejo sobre la mesita la tasa de café y fue a abrir, Yunho totalmente concentrado tenia los ojos sobre los papeles que revisaba.

-Señor!!...-Grito la nona al entrar al salón, Yunho la miro al escucharla y se levanto, ella tenia los ojos grandes como si algo le hubiera asustado.

-Que sucede…nona – el le pregunto, ella se aparto dejando que su visitante entrara, la mirada de Yunho quedo fija en el cuando entro, Jaejoong bajo su capucha dejando ver su rostro, estaba completamente empapado.

-Jae!!...-Dijo Yunho sin poder creer lo que veía, su esposo, había venido a el y estaba terriblemente mojado, los papeles que sostenía en sus manos cayeron al piso.

Aquella imagen de Jaejoong fue un duro golpe a su corazón, sorprendido avanzo y Jaejoong también lo hizo, sus miradas fijas una en la otra, Yunho detuvo su avance cuando estuvo frente a el, moría por abrasarlo, besarlo, pero sentía que si lo hacia le iba costar mas dejarlo ir ahora.

-Nona por favor ve por unas toallas y…y algo de ropa…-Ordeno Yunho y ella rápidamente obedeció desapareciendo del salón.

Observo el rostro húmedo de su esposo sintiéndose tan miserable por como el se había expuesto al escapar de la casa de sus padres.

Jaejoong estaba con el nudo en su garganta que sentía que si decía algo solo sus sollozos saldrían de sus labios y no quería que Yunho lo viera así, lo miro queriendo creer que podía quedarse y no tener que regresar al día siguiente a su casa.

-Jae…-susurro Yunho -…no debiste…- Dijo y sus palabras fueron justo como un puñal en el ya lastimado corazón de Jaejoong.

-Señor…aquí esta lo que me pidió…- la nona dijo entrando al salón, dejando en el sillón la Toalla y unos vestidos para Jaejoong.

-Gracias…- Dijo mirando a su nona -…ahora necesito que el carruaje esté listo…debo llevar a…
-No!!!...-Grito Jaejoong retrocediendo atrayendo la mirada de su esposo y de la nona -…no…-dijo negando con su cabeza, pues Yunho lo pensaba devolver y el no quería regresar.

Al ver la negación de su esposo y el dolor en sus ojos, no sabia como iba convencerlo pues le dolía mucho tener que llevarlo de vuelta -…escucha…-susurro tratando de acercarse.

-No volveré…- dijo negando con su cabeza retrocediendo -…no!...-casi grito cuando Yunho lo tomo del brazo -…no…Yunho…-suplico conteniéndose por no llorar ante la mirada de la nona la cual ya lloraba al ver la escena.

-Entiende…-susurro Yunho con el dolor en su pecho teniendo que mirar aquellos ojos tristes por sus palabras -…debes volver…- Jaejoong lo miro a los ojos por unos instantes y luego desvió su mirada.

-Esta bien –susurro sorprendiendo a Yunho y a la nona, jalo su brazo el cual se libero rápidamente pues su respuesta había sido una sorpresa para Yunho el había creído que Jaejoong se rehusaría hasta el final -…pero…-Dijo volviendo la mirada a su esposo, llevo sus manos al lazo de la capa a la altura de su cuello y lo desato dejando caer la capa, Yunho vio su vestido el cual estaba totalmente mojado -…me iré como vine…- dijo agitado pues no iba aceptar ni la ropa ni el carruaje, se volteo tratando de impedir que sus lagrimas cayeran.

-No!!...-Yunho rápidamente impidió que avanzara, lo sostuvo del brazo y lo volteo -…eso no lo permitiré…nona por favor déjanos solos…- al escuchar ella salio.

-Me iré…suéltame – Dijo Jae tratando de soltarse del agarre de Yunho, apretó sus labios aguantando el fuerte impulso por llorar.

-No te iras…vestido así y menos solo…bajo esta lluvia…- dijo sosteniéndolo con ambas manos.

-No…si tu no me quieres aquí…me iré…- Dijo mirando a Yunho forcejeando por que el lo soltara – me iré como vine…no quiero que me ayudes…no quiero…nada...si tu ya…no me…-balbuceo quebrándose su voz.

Yunho lo jalo pegándolo a el, lo rodeo con sus brazos y sus mejillas quedaron pegadas una de la otra, su ropa se fue humedeciendo por el contacto con la de Jaejoong.

-Te Amo…- Susurro Yunho en su oído y las lagrimas cayeron por las mejillas de Jaejoong -…Te Amo…-volvió a susurrar llevando una de sus manos al rostro de su esposo y mirándolo ahora, pegando su nariz al de su esposo, sin poder aguantar mas junto sus labios al de Jaejoong, lo beso, sintió la respuesta de los labios de su esposo los cuales correspondían a sus besos llenos de necesidad por lo mucho que no se habían rosado, poco a poco con cada rose fue entibiando aquellos labios que estaban congelándose por el frió, Jaejoong entrelazo sus manos por detrás del cuello de Yunho.

Cuando sus labios se fueron dejando Jaejoong deslizo sus manos dejándolas sobre el pecho de su esposo.

Yunho dejo libre a Jaejoong y fue a tomar una de las toallas del sillón mientras su esposo lo miraba y trataba de pensar que hacer ahora para que el no continuara con su idea de regresarlo.

Yunho puso la toalla sobre el cabello de Jaejoong y empezó a secarlo.

-Me regresaras…verdad? – pregunto

-Jae…debes quitarte ese vestido…o te enfermaras…- dijo el llevando sus manos al vestido de Jaejoong.

Al ver que Yunho no pensaba contestarle puso sus manos sobre las de el -…pero no aquí…no…-susurro apartando las manos de Yunho las cuales iban a desvestirlo.

-Esta bien…-Contesto Yunho pues creyó que la timidez de su esposo le impedía dejar que lo cambiara en el salón.

Lo alzo con sus brazos y subió por las escaleras a su cuarto, sin saber si lo que hacia estaba bien pues llevarlo ahí era demasiado de soportar para el pues debía dejarlo ir y tenerlo cerca ahora solo le hacia querer quedárselo y no devolverlo.

Yunho empujo la puerta de su cuarto y bajo a Jaejoong mientras el buscaba otras toallas, al estar dentro de ese cuarto Jae se dijo así mismo que de ahí no saldría hasta el amanecer.

Con toalla en mano Yunho volvió a el, las dejo sobre la cama y llevo sus manos a los brazos de su esposo, lo observo.

-Ese vestido…-susurro mirándolo.

-Fui a la iglesia…y después…

-Solo…?- Yunho pregunto interrumpiéndolo, mientras sus manos se deslizaron hacia su espalda y buscaban lo broches del vestido.

Jaejoong no sabia si debía decirle que su madre lo había llevado hasta ahí, desvió su mirada ante la penetrante mirada de Yunho.

Desabrocho unos cuantos broches y deslizando sus manos a los hombros de su esposo empezó a bajar el vestido, sintiendo que rozar la piel de Jaejoong estaba siendo una tentación muy difícil de soportar, al sentir el rose de las manos de Yunho por su hombro cerro sus ojos.

-No me contestaras…-Yunho susurro deteniendo sus manos dejando los hombros de Jaejoong descubiertos, al escucharlo Jae abrió sus ojos y volteo a verlo.

Sus rostros estaban muy cerca, sus miradas fijas, las manos de Yunho pasaron por debajo de los brazos de Jaejoong para continuar desabrochando el vestido pero sin despegar su mirada de los ojos de el.

Jae puso sus manos sobre el pecho de Yunho acerco su rostro y abrió sus labios con la intención de hablar, pero su aliento choco contra los labio de Yunho, este apreso los labios de Jaejoong con los suyos, sus manos dejaron de desabrochar y lo sostuvo de la espalda pegándolo a el, sus labios se volvieron a besar.

-Quien te trajo?...-Yunho pregunto dejando por breves instantes los labios de su esposo, Jae respiro hondo volviendo a dejar que los labios de Yunho lo volvieran a tomar, sentía que le iba arrancarle la verdad con aquellos besos, no sabia como evitar contestarle.

-Yunho…-susurro y sus labios fueron apresados otra vez por los posesivos labios de su esposo -…eso no importa…- contesto Jaejoong.

-A mi me importa…- dijo volviendo a dejar libres los labios de su esposo, dejando que sus labios rozara los de el.

Jae lo miro a los ojos agitado por los besos dados, al creer que no podría mentirle si continuaba mirándolo a los ojos, desvió su mirada pero Yunho con una de sus manos lo obligo a verlo sosteniéndolo del rostro, Jaejoong cerro sus ojos para no verlo.

Yunho volvió a atrapar sus labios y mientras lo besaba volvió a exigirle una respuesta -…como llegaste…-susurro sabiendo bien que el no conocía su mansión así que el debía tener un cómplice.

-No…- susurro resistiéndose a contestar, los labios de Yunho se deslizaron por su babilla mientras sus labios se llenaron de jadeos y agitación.

-Quien…te trajo…- Yunho susurro contra el cuello de Jaejoong antes de posar sus labios sobre su piel.

-ahh…- sus labios dejaron salir cuando sintió sobre su cuello los besos de Yunho -…n..ahh…-se aferro a los hombros de Yunho sin poder hablar.

-Quien?...-susurro volviendo a recorrer el costado de su cuello llevando sus labios hasta su hombro desnudo, sintió que si continuaba besándolo no iba poder detenerse e iba necesitar mas de el para calmar su deseo.

-ah...mi…mi madre…- escapo de sus labios y Yunho al escuchar alejo sus labios de el y lo miro.

-Que!!...- Dijo sorprendido soltando el cuerpo de Jaejoong, miro a su esposo y este temblaba -…el vestido…- dijo olvidando la respuesta de Jaejoong pues había olvidado quitarle la prenda que estaba totalmente mojado, sus manos se apresuraron a desvestirlo dejando caer el vestido al suelo.

Jae retrocedió pegando su cuerpo sobre una de las cómodas agitado aun temblaba, su piel estaba húmeda.

Yunho se acerco para quitarle aquel corsé, extrañándose por el ajuar que traía pues el vestido que había estado puesto era para ir a la iglesia, se dio cuenta al verlo de cual debía ser la intención por la cual el vestía así.

Quiso quitar el corsé del torso de Jaejoong, llevo sus manos bajando por su cintura para desabrochar las ligas que unía las medias hacia el corsé, pero se detuvo al darse cuenta que estaba yendo muy lejos, jalo una toalla y lo cubrió.

-Traeré ropa para que te vistas…-susurro Yunho, al escuchar Jaejoong sabia que si el lo vestía lo llevaría de ahí.

-No!…-dijo y voto la toalla, su cuerpo tembló por el frió pero no le importaba no iba permitir que lo vistiera.

-Que haces…- Yunho dijo acercándose -…quieres morir de frió…- susurro serio.

-Si es necesario si…por qué no pienso irme…-contesto temblando.

-Jae…-Yunho susurro cerrando su manos en un puño pues no lo podía ver así sufriendo no solo por el frió que sentía su cuerpo desnudo sino también por el dolor que veía en sus ojos producto de la separación.

Lo tomo en sus brazos sin hacer caso a su resistencia, lo levanto llevándolo a su cama donde lo sentó y cubrió su cuerpo con otra toalla, empezó a secarlo, temió desnudarlo y no ser capas de poder dejarlo ir aquella noche.

Yunho miro el rostro de su esposo por el cual ya caían algunas lágrimas, pues Jaejoong se estaba sintiendo frustrado al no saber que hacer para seducirlo.

-Por…que?...-Yunho pregunto -…no quiero verte así…-susurro secando los brazos de su esposo con la toalla -…regresaras a mi te lo prometí…y será pronto …- dijo mientras lo secaba, incapaz de atreverse a quitar aquel corsé que estaba húmedo.

-Déjame pasar la noche aquí…- Susurro Jaejoong, al escucharlo Yunho dejo de secarlo, miro a los ojos a su esposo y este bajo la mirada, avergonzado pues solo le quedaba suplir por que lo dejara estar con el esa noche.

Yunho lo observo por un instante, él sabía que no era típico de Jaejoong pedirle eso, sabia que había algo más, un propósito que necesitaba escucharlo de sus labios.

-Me estas pidiendo que te haga el amor?…-susurro haciendo que Jaejoong levantara su mirada.

-Ah…- Jaejoong balbuceo nervioso ante su pregunta -…yo…te extraño…y quiero estar contigo…por favor…-suplico llevando sus manos al pecho de su esposo.

Yunho pudo ver la mirada llena de tristeza de su esposo la cual brillaba por las lagrimas contenidas, no se sentía capaz de rechazarlo pues le iba romper el corazón, además que no podía porque lo deseaba más de lo que él se podía imaginar, aquellos días habían sido para él una tortura al no tenerlo a su lado y no saber cómo se encontraba.

-Temo que si te quedas esta noche…no querré dejarte ir…-susurro contra los labios de Jaejoong -…y debes volver lo sabes…-Dijo y las lagrimas cayeron por las mejillas de su esposo.

-Por favor…-Suplico en un susurro, Yunho escuchaba a su esposo sorprendiéndose por que el prácticamente suplicaba por que le hiciera el amor y eso le hacía sufrir más al ver lo mucho que Jaejoong estaba siendo lastimado con esa separación.

-No necesitas rogar…mi amor…-Susurro Yunho –…Pero me gustaría saber…por que tu madre permitió que vinieras a mí…-Pregunto.

Jaejoong apretó sus labios al escucharlo.

-Yunho…yo…le pedí…yo…

-Tu quisiste vestirte así…-Susurro Yunho quitando la toalla que mantenía sobre el cuerpo de su esposo, exponiendo su ligera desnudes, dejando ver aquellas medias que traía y aquel corsé las cuales estaban unidas por unas ligas y lo hacían ver muy sexy y tentador ante los ojos de Yunho.

-Yo…ah…-Jaejoong se avergonzó y Yunho se dio cuenta que el no pudo haber sugerido aquella seductora prenda.

-Si…te vistieron así…fue para que me seduzcas…-susurro Yunho, al escucharlo Jaejoong abrió sus ojos grandes pues lo había descubierto -…entonces esa persona pensó que yo no querría pasar la noche contigo…y por eso te vistió así…- Jaejoong parpadeo.

-Pero se equivoco en una sola cosa…si yo no quiero dormir contigo no fue por qué no te desee...aun si estuvieras sin esa prenda y solo vistieras un camisón yo te desearía con la misma intensidad…pero quisieron asegurar la noche vistiéndote de esta manera verdad?...al escuchar Jaejoong desvió su mirada pues Yunho se había dado cuenta de todo.

-Lo siento…- susurro Jaejoong sin mirarlo pues creyó que ah Yunho le enfadaba verlo así, puso sus manos sobre sus piernas.

-Luces hermoso…-susurro para hacerle ver que le gustaba, Jaejoong volvió su mirada a él.

-Qué tal si solo…dormimos…-susurro Yunho sabiendo bien que no iba pasar eso pues le iba costar mucho no tocarlo, pero necesitaba hacerle creer eso para ver su reacción.

-No!...-Jaejoong contesto rápidamente pues su madre le había dicho que debía aprovechar cada segundo que estaba junto a él si quería embarazarse.

-No?...Por qué?...-Yunho exigió saber pues creía que había algo mas y ya se imaginaba lo que podía ser.

-Yo…- dijo mirando los ojos de su esposo los cuales fijamente parecían buscar una respuesta en su mirada, sabía que no podía engañarlo y si lo intentaba solo lo iba hacer enfadar -…Yunho…si…yo…me embara…

-No!!!...-Yunho dijo interrumpiéndolo, se había imaginado que se trataba de eso -…no Jaejoong…no…

-Por qué?...no quieres que yo…tenga un…

-No se trata de eso…

-Entonces…por que…-Exigió Jaejoong angustiado.

-No sabes lo que me pides…

-No se?…que no se… dímelo entonces…

-Sufrirás y no quiero…

-No me importa…yo quiero tener a tu hijo…

-Jae…-susurro Yunho llevando sus manos a su rostro -…te dijeron que embarazándote volverías a mi verdad?... no es la manera, no es la forma de cómo quiero conseguir que vuelvas a mi…

-Yunho…por favor…-suplico sujetando los brazos de su esposo, sus lagrimas estaban a punto de caer otra vez.

-No hagas eso…-Dijo Yunho para que no suplicara pues no se sentía capaz de no complacerlo y sabia que si lo hacía lo podía lastimar al intentar embarazarlo -…Jae…una noche no sería suficiente…-Dijo para que entendiera.

-Lo sé…-contesto Jaejoong rápidamente -…por eso…

-Que!…-Yunho dijo sorprendido

-Mi madre…me dejara venir por cuatro noches…

-No…Jae me estas pidiendo acabar contigo y no haré eso…mírate…-dijo llevando sus manos a sus hombros -…estas tan delgado…te lastimaría si trato de…- no pudo continuar la frase, no quería que su esposo sufriera, no quería tener que embarazarlo para lograr tenerlo otra vez a su lado.

-Si me amas lo aras…por que yo te amo y quiero un hijo…tu hijo…-susurro-… aunque eso no sirva para regresar a tu lado…yo lo quiero…- suplico y Yunho acerco su rostro a él.

-Si lo intento…te dolerá, suplicaras para que me detenga…-susurro acercando sus labios al de su esposo, necesitaba tratar de persuadirlo y decirle todo lo que sufriría pues Yunho debía entrar totalmente en él para dejar su semilla y sabia que si lo hacia lo podía lastimaría, ya que una sola noche no iba ser suficiente.

-No me importa…-susurro -…yo quiero…sé que puedo…no sentiré dolor…- contesto lleno de seguridad y con algo de esperanza, su corazón le dolió al ver a su esposo suplicarle por que lo embarazara, no podía negarle el derecho de tener un hijo y menos después de todo el sufrimiento que ya le había causado.

Yunho acerco sus labios y rozo los de su esposo levemente -Gracias…por querer darme un hijo…no sabes cuanto deseo que nazca de ti…te amo mi amor… –susurro y unió sus labios a los de él -…prométeme…que si sientes el mas mínimo dolor me avisaras…-Susurro vencido por el cuando dejo libres sus labios.

Jaejoong asintió con su cabeza y Yunho junto sus labios a los de el, sujeto su rostro con una de sus manos y con la otra lo rodeo de la cintura mientras su esposo envolvía sus manos tras su cuello.

-Espera…-Yunho susurro alejando el rostro de su esposo, Jaejoong lo miro sorprendido y soltó sus manos – debo quitar este corsé…-dijo llevando sus manos a su espalda para desatarlo pues debía quitárselo ya que estaba húmedo, después de deshacer el nudo sus manos bajaron por las caderas de Jaejoong, colocó las manos a ambos lados de los muslos, pero no la tocó. En cambio, estudió los bordados de las ligas sujetando las medias que alisaban esas piernas tensas con músculos apenas definidos.

Observo los bellos bordados pequeñas florerillas de color rojo cereza con hojas verde oscuro. Muy femeninas. Sorprendentemente eróticas.

Pasó un dedo sobre una, como memorizando el estampado, antes de deslizar los dedos por la piel que quedaba desierta por encima de las medias, más arriba, sólo un trocito de género le cubría la protuberancia entre los muslos. Le dolía la mano de las ganas de deslizarse por debajo del ruedo de encaje y encontrar el centro.

Se resistió; enganchó un dedo por debajo de la liga y la desunió del corsé, aflojó la media transparente suavemente por la pierna deslizándola hasta quitarla.
Yunho sostuvo la prenda de seda entre sus manos. Se notaba frágil y liviana, y aún tibia por el calor de la piel. Cerró los ojos e inspiró la excitante fragancia de flores e inocencia; un profundo deseo despertó la vida en su interior. Ni se detuvo a pensar si lo que estaba haciendo con tanta concentración asustaba a su esposo.

Simplemente se dedicó a quitar la otra liga y la media, hasta que las piernas quedaron desnudas ante él. Apoyó firmemente las palmas de las manos sobre las piernas, sintiendo la piel más sedosa que las medias y mucho más tentadora.

Yunho levanto su rostro y miro los hermosos ojos de su esposo quien tenia las mejallas rojas, despego sus manso de las suaves piernas de su esposo y lo despojo de aquel corsé que había estado apretando el torso de su amado, abraso el delgado y desnudo cuerpo de su esposo juntándolo mas a el, Jaejoong correspondió al abrazo pegando su rostro a su pecho poniendo sus manos sobre el.

-Estas seguro…- Susurro Yunho sobre los cabellos de Jaejoong, al escucharlo el levanto su rostro y lo miro.

-Si…-contesto despacio, Yunho beso la frente de su esposo y luego llevo sus manos a su camisa, empezó a quitársela, observando a Jaejoong quien no despego su mirada de el.

Se puso de pie, cuando estuvo desnudo, se inclinó y alzó a Jaejoong en sus brazos, se dirigió al centro de la cama y lo acostó acomodando su cabeza sobre las almohadas, antes de recostarse sobre el le quito la bincha que llevaba en el cabello y la dejo caer para luego echarse sobre su esposo teniendo cuidado de no aplastarlo pues lo veía muy frágil.

-Cielos... me vuelves loco. –Susurro Yunho con un tono de voz mortificado pues tenia a su esposo desnudo bajo su piel, su deseo por tenerlo aumentaba.

-Yunho… - Jaejoong deslizó las manos por los hombros, siguiendo el contorno rígido hasta el cuello, le enredó los dedos en los cabellos espesos y sedosos. Él le miró a la boca y de nuevo a los ojos al tiempo que inclinaba la cabeza lentamente.

La cálida presión que ejercían sus labios en los de el le provocaron todo tipo de sensaciones. La intensa palpitación que sentía entre las piernas crecía con cada movimiento de la lengua en su boca.

Le encantaba la sensación del cuerpo pesado y sólido, lo volvía real de un modo que jamás había sentido, aunque se daba cuenta de que él tenía cuidado de no apoyarse con todo su peso. Lo hacía sentir frágil. Protegido

-Te eh…extrañado tanto…-susurro Yunho al dejar libre los labios de su esposo, el corazón de Jaejoong golpeo fuerte al escucharlo pues ahora sabía que Yunho también lo había extrañado como él lo había hecho todos esos días -…Tus hermosos ojos…-Susurro Yunho mirándolo -…Tu perfume…tan dulce…-Susurro inhalando su aroma -…Tu hermosa Voz…tus labios… - susurro observando sus rosados labios, acerco su rostro.

Estrecho sus labios con los suyos, sujeto su pequeña cintura con una de sus manos y con la otra iba acariciando su rostro, deslizo esa mano hasta su barbilla haciendo que su esposo abriera sus labios, Jae paso sus manos por la espalda de Yunho aferrándose a él, sus besos fueron profundizando dominados por la posesiva invasión de Yunho el guía los movimientos en el interior de su boca, sus labios parecían no querer dejarse pues se estrechaban una y otra vez como si hubiera pasado una eternidad sin haberse rosado.

Dejo eso sus dulces labios cuando estuvieron tibios y recorrió su cuello, los jadeos pronto estuvieron en los labios de Jaejoong, su respiración entrecortada, su cuerpo temblaba pero no de frió sino por las caricias que su cuerpo recibía por los labios de su esposo, Yunho con sus manos iba acariciándolo mientras sus labios bajaban por su torso recorriendo la blanca y sensible piel.

Apreso con sus labios el rosado pezón de su esposo asiendo presión sobre el, lamiéndolo una y otra vez, succionando las puntas sensibles, Jaejoong se arqueo llevando sus manso a su hombro dejando salir unos gemido de sus labios. Su corazón latía muy fuerte había extrañado tanto las caricias de Yunho sobre su piel, sus besos, y ahora estaba sintiéndolo, estaba siendo amado por él otra vez como cuando estaban en el castillo.

Los posesivos labios de Yhuno libero el pezón cuando se volvieron dos exuberantes puntos de placer, que se dilataban, que le rogaban que los acariciaran el cual hinchado y muy rojo totalmente erecto dejaba ver la excitación provocada en Jaejoong, llevo sus labios a dar la misma atención al otro pezón y cuando escucho nuevamente los gemido de Jaejoong lo libero para bajar sus labios por su vientre, llevo sus manos hacia las piernas de su esposo y las separo suavemente, levanto sus muslos haciendo que sus rodillas se flexionaran, separo mas las delgadas piernas de su esposo para encontrar aquel manjar que moría por tener en su boca y probar de su miel.

Despacio quito la bella prenda que cubría su dulce preferido, al tenerlo frente a sus labios después de darle una lamida lo engullo sosteniendo las caderas de su esposo, Jaejoong aferro sus manos sobre las sabanas de la cama cuando sintió la húmeda y calida boca de Yunho, su espalda se arqueo, tiro su cabeza hacia atrás abriendo sus labios dejo salir un grito entrecortado lleno de placer.

-Ahh…Yunho!…- su nombre salió de los labios de su esposo después del gemido, su voz lo éxito aun mas incrementando su deseo por poseerlo, deseaba ver a su amado estremecerse bajo su piel.


**

En el transcurso de esos días Yoochun se había encargado de informar a sus esclavos que Junsu era su compañero y que por lo tanto debía recibir un trato a su altura como amo de su casa, la esclava negra quien había sido compañera de habitación de Junsu por mucho tiempo, estaba llena de felicidad por su querido Junsu pues veía que su historia iba ser diferente, iba ser feliz al lado del hombre que amaba y padre de su hijo, se alegraba que aquella noche Yoochun haya ido a buscar a Junsu y lo sacara de ese cuarto donde vivía Jasufa quien por más que hubiera querido nunca hubiera hecho feliz al esclavo blanco .

Yoochun después de tener una larga conversación con su esclavo Jasufa aclaro todos los mal entendidos y lo mando a trabajar lejos de la casa grande pues quería que su esposo no se sienta incomodo con lo sucedido entre ellos, el estaba muy seguro de los sentimientos de Junsu y lleno de felicidad por saber que iba tener un hijo con él, así que creyó que era mejor para él y Junsu tener al esclavo lejos ya que en cuanto se aprobara la liberación de los esclavos tenía pensado darle la libertad a Jasufa después de haber firmado la libertad de Junsu.

El Se mantenía en el interior de su casa pues ya no salía mucho como lo había estado haciendo antes cuando visitaba a los hombres de la nobleza, ahora solo le quedaba esperar y que la tormenta pasara, pues por todos lados la noticia ya se había regado sobre su apoyo y de los demás hombres a la causa del conde, algo del cual no se arrepentía pero ahora le preocupaba una noticia que había recibido pues algunos rumores habían llegado hasta sus oídos, su querido amigo el conde había devuelto a su esposo a sus padres, eso era lo que se murmuraba en todo los lugares, no podía creer eso el sabia de cuanto Yunho amaba a Jaejoong, estaba seguro que Yunho no pudo haber hecho eso, se imaginaba que esa terrible separación podía ser producto de las ambiciones del Sr.Kim el cual se vería afectado si el rey apoyaba la liberación de esclavos.

Aquella noche, sentado en su despacho escribía una carta, enterado de que Yunho había vuelto a su mansión la cual estaba cerca a la casa de la familia Kim, El necesitaba entender lo que pasaba y así poder darle todo su apoyo.

Al terminar de escribir la carta lo dejo sobre su escritorio pues lo iba enviar al amanecer ya que ya era muy tarde y moría por ir a dar el alcance a Junsu quien se había mudo a su habitación desde aquel día en que se confesaron su amor. Salio de su despacho y se encamino a su habitación.

Esto es un sueño se decía Junsu, un sueño del cual no quería despertar pues aun no podía creer lo que pasaba, Yoochun lo amaba tanto como él y ahora estaban juntos, todos esos días el había recibido muchos cuidados de parte de Yoochun quien se mostraba muy atento y cariñoso en todo momento, pero el aun se apenaba el tener que dormir a su lado, pues no se sentía merecedor de tanto amor.

La puerta del cuarto se abrió y el llevo su mirada encontrándose con la de Yoochun quien entraba a la habitación.

Ahí sentado sobre su cama observo a su amado Junsu vistiendo un hermosos camisón blanco, Junsu sonrió en cuanto lo vio, se acerco lleno de felicidad pues su corazón palpitaba fuerte cada vez que lo veía y lo tenía cerca suyo, podía ver atreves del delgado camisón aquel abultado vientre donde su hijo crecía cada día y embellecía la silueta de su aun esclavo blanco.

-Te estás sintiendo mejor?…-Pregunto Yoochun cuando estuvo a su lado sentado sobre la cama.

-Si…-contesto Junsu pues había tenido que estar todo el día recostado ya que había tenía un fuerte mareo producto de su gestación y Yoochun le había pedido que no se levantara pues temía mucho que le pasara algo, se ponía nervioso cada vez que Junsu parecía desvanecerse por los mareos.

Junsu tomo la mano de Yoochun y la acerco a su vientre para que pudiera sentir como su bebe se movía dentro de el. Desde aquel día en que Yoochun se entero del embarazo de Junsu y toco su vientre el bebe empezó a moverse y lo hacía mas cada vez que Yoochun estaba a su lado.

Los ojos de Yoochun parecían a punto de dejar caer sus lagrimas pues la emoción lo embargaba cada vez que Junsu le daba el privilegio de poder sentir el movimiento de su bebe.

-Te ama…-Susurro Junsu Llevando sus manos al rostro de Yoochun -…se mueve mucho cuando tu estas…- susurro con una sonrisa y un brillo en sus ojos.

-Y yo los amo…- Susurro Yoochun acercando su rostro, junto sus labios al de Junsu manteniendo su mano sobre su vientre acariciándolo -…Te amo…- dijo cuando dejo libero sus labios, sus miradas se mantuvieron fijas por unos segundos y luego sus labios se volvieron a juntar en un beso lento y largo.

En aquellos días Yoochun se limitaba a besarlo y acariciar su vientre pues por más que el deseo de tenerlo lo atormentaba se conformaba con estar cerca de él y dormir juntos, tenía el temor de que Junsu pensara que podía lastimar al bebe.

Despego sus labios de golpe al sentir que si continuaba besando sus labios iba desear más y no quería que Junsu se sienta obligado.

-Que sucede…-Junsu dijo cuando Yoochun dejo de besarlo.

-No es nada…-contesto desviando su mirada, tenía la respiración entrecortada, al escucharlo Junsu bajo su mirada, se daba cuenta que Yoochun no pretendía tocarlo y se imaginaba que era por los malestares que tenia y de los cuales el se preocupaba mucho.

El silencio inundo aquella habitación por unos segundos hasta que la voz de Yoochun sonó haciendo que Junsu levantara su mirada.

-Lo siento…-Susurro -…estoy tratando de ser fuerte…- dijo sujetando el rostro de su amado -…cada vez que te beso…no quiero parar…quiero continuar besándote…acariciarte y tenerte…-Dijo asustándose de sus palabras.

-Yo también…-Susurro Junsu sonrojándose, al escucharlo Yoochun lo miro sorprendido, su corazón golpe fuerte contra su pecho.

Sus miradas se mantuvieron fijas Yoochun sin poder aguantar más el deseo de estrechar sus labios se acerco y los tomo, Junsu correspondió a sus besos pegando sus manos a su pecho mientras él lo sujetaba de la cintura, su ancha cintura.

-Si…lo lastimamos…-susurro Junsu cuando sus labios estuvieron libres.

-Nunca lo lastimaría…pero si no deseas entonces…

-No…no creo poder dormir…esta noche…-susurro haciéndole saber que lo deseaba como él lo hacía.

-Yo tampoco…-susurro Yoochun recostando suavemente a Junsu, lo beso teniendo el mayor cuidado de no recostarse sobre su pequeño vientre.

-…Cásate con migo…-susurro cuando dejo sus labios -…quiero pasar el resto de mis días junto a ti…- dijo contra sus labios y las lagrimas de Junsu empezaron a caer, nunca había creído que podría escuchar esas palabras de los labios de Yoochun, sentía que la felicidad que estaba sintiendo era demasiado.

Asintió con su cabeza entre lágrimas y Yoochun beso sus labios en cuanto vio su respuesta.

-Te amo…-susurro estrechando sus labios mientras sus mansos se iban acariciando, Yoochun se despojo de su ropa y despacio con mucho cuidado quito la bata de dormir a Junsu, pues iban a hacer el amor después de más de un mes de haber estado alejados.

-Yo te amo a un mas…-contesto Junsu cuando los labios de Yoochun estuvieron cerca de los suyos, el sonrió al escuchar esa respuesta, volvió a estresar sus labios mientras sus manos suavemente iban recorriendo cada parte del cuerpo que estaba bajo el suyo.

Sus piernas fueron separándose para dar la bienvenida a las caderas de Yoochun. Sintió que se le aclaro el mundo, una ola de hirviente placer se esparció por sus venas y culminó bajo los labios y la lengua exploradora, con palpitaciones que brotaban desde lo más profundo de su ser.

Yoochun lo estaba penetrando de la forma mas amorosa y suave posible cuidándolo de no presionar con su cuerpo su pequeño vientre, sus labios entrelazados, sus manos se aferraron a su cuello gimiendo, creía que estaba soñando estar en sus brazos entregándose a el.



**


Sus cuerpos rozando como una caricia erótica sóbrela piel ardiente. Jaejoong enredó sus dedos en los sedosos cabellos de su esposo, atrayéndolo más mientras él con la boca le torturaba las puntas sensibles dulcemente, provocándole oleadas de éxtasis en cada zona que tocaba.

Yunho alcanzó a ver un destello de placer en su expresión cuando lo miró... antes de que bajara por su cuerpo y ubicara la cabeza oscura entre las piernas.

El arqueó la espalda cuando la lengua se esparció en su centro como una llama ardiente, presionando con movimientos hacia adentro y afuera. El primer contacto de aquel fuego intenso en su intimidad devorada lo hizo retorcerse contra él y sostenerle la cabeza ahí. Yunho disfruto del poder que ejercía sobre el y de como su cuerpo respondía a sus caricias, acostumbrándose cada vez mas a hacer el amor , clavo los brazos de Jaejoong sobre la cama mientras le lamía, le chupaba y le acariciaba una y otra vez los pezones.

Deslizo su lengua bajando por su vientre, le lamió ese punto de su sexo inflamado, provocándole una ola de fuego que lo hizo gemir.

Le introdujo un dedo, invadiéndolo, llevando su intimidad a un nuevo nivel. Jaejoong se retorció; adoraba la invasión y al mismo tiempo; quería que se detuviera pero deseaba que continuara, sentía que perdería la razón.

-Dios… -Yunho cerró los ojos y presionó más, con el rostro desencajado, un músculo se le movió en la mandíbula cuando deslizó otro dedo, haciendo movimientos circulares lentos dentro de Jaejoong mientras sus labios apresaban devorando su miembro, llevándolo de nuevo a la cima; el cuerpo entero estaba a punto, él lo mantenía ahí en suspenso, haciéndolo retorcerse hasta empezar de nuevo.

Entonces cambió el ritmo, entrando y saliendo, dilatándolo, generando una presión cuando intentaba empujar más adentro; la boca húmeda apreso sus excitados pezones, succionando hasta convertirlos en puntas rígidas, mientras susurraba palabras eróticas que describían cómo los sentía dentro de su boca, cómo ellos respondían ante las caricias de su lengua.
Entonces introdujo dos dedos más en la cavidad empapada.

-Yunho... – Susurro, sentía que su cuerpo ya no era suyo pues este se movía como nunca se había imaginado que podría hacerlo.

-Lo sé, amor. -Lentamente salió y esparció la humedad de sus dedos en el punto sensible que había amado con la boca, luego se lo besó, se lo lamió incitantemente; una y otra vez, excitándolo de nuevo, llevándolo hasta el precipicio y por fin, felizmente, terminó el tormento llevándose el punto caliente a la boca.

-Jaejoong... -gimió Yunho al tiempo que se deslizaba por su cuerpo con el miembro erecto presionando contra ese dulce sitio que palpitaba por él.
El captó su mirada y lo sostuvo mientras sus dedos temblorosos bajaron por el pecho hasta la parte mas baja. Quería sentirlo, sostener todo ese poderío caliente y rígido entre sus manos, acariciarlo como él lo había acariciado.

-Jae…-Intentó decir de nuevo, con la voz deshilachada, dolorida-. No aguanto más…-Susurro Yunho tratando de controlarse por no invadirlo, tal confesión lo hizo sentirse poderoso, como si al menos en aquel momento el lo poseyera como a un esclavo. Yunho le pertenecía.

Sus manos alcanzaron su objetivo. Entonces aquel trozo entero y sedoso quedó entre sus manos, quemándoselas mientras lo exploraba: el glande grueso, la vena latiendo, hasta las bolsas ceñidas que cubrió con las manos. El sonido discordante de la inspiración le demostró que le estaba dando placer y le dio más seguridad mientras lo masajeaba.

El se movía de arriba abajo en contacto con los dedos exploradores, con los ojos fuertemente cerrados. Un gruñido profundo y sensual se le escapó de los labios; el sonido rompió en el como una marea erótica.

Entonces Yunho abrió los ojos de golpe, y la pasión y el ardor de esa mirada le arrancaron a Jaejoong la respiración de los pulmones.

-Lucha conmigo -le dijo con voz ronca; las palabras sonaban como una ardiente súplica de salvación-. No me dejes hacerlo – susurro pues iba a poseerlo y aun temía lastimarlo, sentía que perdía el control, deseaba poseer su frágil cuerpo, necesitaba verlo retorcerse, hacerlo suyo.

-Te…deseo – susurro Jaejoong con las mejillas rojas. Aquella respuesta solo lo excitaron mas pues su amado le estaba expresando sus deseos, de alguna manera eso lo alegro.

Le sujetó la cabeza entre ambas manos, con el pecho como un macizo bloque de calor encima de Jaejoong cuando bajó la cabeza y le rozó con los labios hasta darle un beso desgarrador, cerró los ojos, con angustia, dividido entre los demonios del deseo y la negación.

-Dios... -Él apoyó la frente en la de Jaejoong, aún se frotaba contra el, tanteaba con la punta del pene su entrada, le apretaba las caderas con furia, encendía un ardiente tumulto de deseo, con la respiración violenta junto a su oído- Estuve pensando en esto... en estar dentro de ti, en ver tu expresión….-Susurro Yunho sofocándose por el deseo.

Jaejoong inspiró, atrajo la cabeza de el hacia sí, y le besó de la forma en que había querido besarlo toda la noche, todo el día. Siempre, se diría.

La unión de sus bocas era carnal, húmeda; él hundía la lengua mientras se meneaba más fuerte contra el cuerpo de Jaejoong, mas rápido, acariciándole apenas las puntas sensibles de los pezones, con un susurro erótico que describía sensaciones solamente de placer, atrayéndolo hacia un laberinto oscuro y caliente lleno de pasión.

Le pasó un brazo por la espalda, recorrió hasta la parte mas baja acariciando sus nalgas, besando el pezón; aquel simple contacto lo dejó al borde del éxtasis con el cuerpo convulsionado, rompiéndose en millones de pedazos, nuevas sensaciones iban aflorando en su cuerpo.

Yunho respiro hondo e introdujo en el, el dedo más largo para evitar lastimarlo cuando entrara pues ya estaba llegando a su límite, con una expresión dolorosa en el rostro, tratando de controlarse cuando Jaejoong se elevaba y empujaba la mano que lo invadía, hasta que la compuerta que refrenaba su control explotó.
Le cogió las muñecas con una sola mano y se las llevó arriba de la cabeza.

Jaejoong se retorció y abrió más las piernas para acomodar el tamaño macizo de él, aquella voluptuosa presencia que lo inmovilizaba, calor contra calor.

-Tú eres mío -dijo con un gruñido- Mientras las palpitaciones le seguían corriendo por las venas en una oleada de placer ardiente, hirviente, Yunho lo penetró de una sola embestida rápida y desgarradora; la penetración fue profunda, dolorosa y placentera, caliente como el fuego.

Jaejoong soltó un grito, hundiéndole las uñas en la espalda cuando el empujaba más. Era tan grande, demasiado grande.

-Yun…Yunho...

-Ssh... Haré que se sienta mejor, te lo prometo. -Se meneo lentamente al principio, entrando y saliendo, empujando cada vez un poco más, una dulce presión que terminaba en la unión de ambos cuando él lo llenaba, profundo y ceñido, se arqueo en cada poderosa embestida.

Jaejoong le besó la curva del cuello, probó la sal de su piel, saboreó su esencia y el embriagador olor a sexo. De manera instintiva, el alzó las piernas alrededor de sus caderas y elevó la pelvis, aumentando el placer que vibraba entre los cuerpos ardientes.

Oh, Dios, Jaejoong era suyo, todo entero estaba dentro de el, caliente, duro y profundo. Se sentía insaciable. En llamas.

Yunho había despertado algo en el, algo que necesitaba con desesperación.
Algo que el temía que despertar en su interior, todo el tiempo Yunho lo miraba a los ojos mientras le hacia el Amor. No lo dejaba volver la mirada ni negarle ser testigo ni de una milésima de lo que estaba sintiendo: esa pasión desenfrenada y una emoción tan intensa que le inundaba cada uno de los sentidos.

Sus frágiles y temblorosas manos se movieron pegándose en el pecho de Yunho, presionando en cada envestida, sus ojos entreabiertos húmedos, su cuerpo estremeciéndose sintiendo a Yunho muy dentro, clavándose en el, poseyéndolo, escuchando su ronco gemido contra sus labios, mientras su piel ardiente por el rose se iban humedeciendo de tanto frotarse.

Todo el placer y la presión le atravesó el centro de su ser. Endureció los músculos, apretando el miembro largo y tieso, atrayéndolo hacia su interior más y más profundo aún. Él lo aferró de las caderas mientras lo embestía emitiendo un sonido gutural que le desgarraba la garganta hasta que finalmente encontró su propio alivio.

Lleno el interior de Jaejoong con su semilla la cual el muchas veces había evitado dejar dentro de el, su cuerpo se estremeció de placer mientras se venia en el, acerco despacio sus labios al de su esposo y los estrecho suavemente, silencio sus jadeos con sus labios los cuales lo besaba suave y lento.

Una arrolladora sensación de felicidad se mezclaba con una agridulce desesperanza. Lo que acababa de suceder entre ellos había sido apasionado, increíble; sin embargo, nada había cambiado. El no podía quedarse con el debía volver cuando el sol saliera, su cuerpo tembló.

Yunho lo abraso y despacio giro quedando el y su esposo echados de costado, aun con su miembro dentro de Jaejoong, sostenía su muslo suavemente para no lastimarlo cuando lo giro. Despego sus labios, sus respiraciones entrecortadas quedaron golpeando una con la otra, Jaejoong apenas y tenia los ojos entre abiertos, Yunho acerco sus labios y beso su mejilla mientras se preparaba para liberarlo de su invasión.

Despacio y con cuidado lo libero, deslizo su mano pasándola cerca a su entrada, sintió una calida humedad sobre su mano, rápidamente la llevo a su alcance, despego sus labios de las mejillas de su esposo y teniendo su manos tras la espalda de Jaejoong, lo observo, sus ojos se agrandaron al ver lo que humedeció su mano.

Sangre, la palma de su mano estaba con sangre, Yunho quedo con la mirada fija en su mano, con un fuerte dolor en su pecho.

-Te amo…-Susurro la suave y apenas audible voz de Jaejoong, al escucharlo llevo su mirada a el y observo aquello hermosos ojos húmedos y llenos de amor que lo miraban, de los cuales el podía ver lo sincero que eran sus palabras, le dolió el corazón mas, su esposo ignoraba cuanto el lo había lastimado con esa entrega en la cual Yunho no pudo evitar desangrarlo, pues bien sabia el que iba ser así, y odiaba verlo sangrar.

Con un suave beso Yunho unió sus labios al de el y le susurro:

-Yo también…- aquella mano ensangrentada la dejo caer sobre la sabana pues sabia que sobre ella también había alguna mancha, lo abraso con su otra mano mientras la otra iba presionando fuerte la sabana de la cólera que sentía al no haberse podido detener.

Yunho lo acerco con su brazo pegándolo mas a el, lo acurruco, la respiración de Jaejoong chocaba contra su cuello, los ojos de su esposo se iban cerrado , Yunho lo mantuvo abrasado temiendo que la luz del día llegara pues a pesar de que se sentía culpable por la sangre que derramo Jaejoong no quería que se fuera, quería tenerlo a su lado sentía que dejarlo ir ahora iba ser mas difícil de lo que fue aquella noche cuando el Sr.Kim prácticamente lo arrebato injustamente de sus brazos.

Suspiro pues nada podía hacer ahora para evitar que Jaejoong se fuera. Quiso mantenerse despierto a su lado pero sus parpados estaban pesados y su cuerpo muy cansado, se dejo atrapar por el sueño sin fuerzas para resistirse.

Apocas horas la luz empezó a brillar entrando por la ventana, despacio Jaejoong empezó abrir sus ojos encontrándose con el rostro de Yunho muy cerca al suyo, el dormía, lo observo pues no recordaba haberlo visto dormir antes, ya que él era siempre el primero en quedarse dormido y el ultimo en despertarse.

Lo observo y movió despacio su mano llevándola al rostro de Yunho, con sus dedos rozo sus labios y luego rozo los suyos, sonrió y se sonrojo al recordar la noche de amor que vivieron, ahora lo peor estaba por llegar pues debía dejarlo y no quería, no se sentía capas de poder hacerlo, deseaba quedarse ahí junto a el.

Apoyo sus manos sobre la cama tratando de levantarse, las manos de Yunho las cuales habían estado aferradas a su cintura se deslizaron cayendo sobre la cama, Jaejoong casi sentado apoyándose con sus manos lo miro, su largo cabello callo sobre el cuerpo de su esposo, lo observo por un instante mas y luego volteo despacio para sentarse pero un fuerte dolor en su entrepierna lo hizo arquearse y de sus labios escaparon un quejido de dolor, sus brazos temblaron, cerro sus ojos aguantando manteniéndose quieto, sentía que si hacia algún movimiento volvería a sentir dolor, pero sus brazos no soportaron mas y se desvaneció.

Sintió el calido cuerpo de Yunho pegado a su espalda, sus brazos rodeándolo; justo antes que el cuerpo de Jaejoong chocara contra la cama Yunho lo vio desvanecerse y rápidamente lo sostuvo.

-No debiste levantarte aun…-Dijo Yunho abrasándolo.

-Debo…irme…-Susurro doliéndole Pronunciar esas palabras pero debía hacerlo pues su madre le dijo que lo esperaría al amanecer.

-Ibas a dejarme mientras dormía…-Susurro Yunho en su oído, trato de voltearse al escucharlo y verle al rostro para decirle que no pensaba hacer eso, que lo que mas quería es estar a su lado.

-Ahh…-Se quejo, su movimiento al voltearse solo hizo que el dolor volviera a su entrepierna, pego sus manos en el pecho de Yunho y cerrando sus ojos no dejo que el lo viera pues agacho levemente su cabeza quedando su frente pegada al cuello de Yunho, sus manos temblaron mientras soportaba el dolor.

-Jae…estas bien?...-Susurro Yunho en los cabello de su esposo sintiendo sus frágiles manos temblando sobre su pecho.

La respiración de Jaejoong era algo rápido pues se había volteado bruscamente sin recordar el dolor que había sentido antes cuando quiso sentarse y ahora aguantaba el dolor esperando que pasara, no quería que Yunho le viera su rostro y descubriera lo que le aquejaba.

Abrió sus ojos cuando sintió la mano de Yunho en su mejilla listo para levantarle el rostro, sus ojos se agrandaron cuando vio una mancha de sangre sobre la sabana, donde él estaba sentado, tembló y antes que Yunho lo obligara a mirarlo el despego su frente del cuello de su esposo y trato de alejarse de aquella mancha provocando que el dolor volviera.

-Jaejoong…-Dijo Yunho cuando su esposo se separo quedando sentado a unos pocos centímetros de el, lo vio temblar y mirar sobre la sabana, el siguió su mirada.

-Oh no…-Susurro al darse cuenta de su error, pues no había quitado la sabana y ahora Jaejoong estaba asustado por la sangre sobre ella -…Jae…- Susurro tratando de hacer que el lo mirara – mi amor…-Dijo acercándose para abrasarlo.

Lo sujeto el rostro con ambas manos obligándole a mirarlo -…no te asustes…-Susurro contra sus labios -…ese es el motivo por el cual no quería que…-Dijo callándose sin poder continuar -…no quise lastimarte…-Susurro y dio un beso a sus labios -…no volverá a pasar…- dijo creyendo que no soportaría verlo a ver así a su esposo, asustado por la sangre en la sabana, ya no quería intentar embarazarlo, no si debía hacerle daño.

-Qué?…no…-Jaejoong casi lloro pues no quería que Yunho se rehusara a hacerle el amor solo por que había sangrado, no le importaba si tenia que sangrar con tal de tener a su hijo en su vientre lo iba hacer, sentía que podía aguantar cualquier dolor -…estoy bien…- Dijo pegando sus manos sobre el pecho de Yunho, sus ojos se esforzaban por no dejar caer las lagrimas.

-Fue…un error…-Dijo Yunho -…no debí…-Susurro -…como pude…- se reprocho y paso su mano por la espalda de Jaejoong -…estas tan delgado…tan débil…-Dijo temiendo que si lograba embarazarlo peligraría la vida de su esposo.

-Yunho…estoy bien…estoy bien…- Susurro dejando caer sus lagrimas -…Por favor…no me rechaces…-suplico creyendo que Yunho no quería tocarlo para no lastimarlo.

-No entiendes…solo te are sufrir…-contesto el soportando verlo llorar y aguantando no acceder a sus suplicas.

-Sufriré mas…si te rehúsas a que yo tenga a tu hijo…Por favor…-Volvió a suplicar llevando sus manos al hombro de Yunho -…no sentiré miedo…ni dolor…

-Basta…-Dijo Yunho abrasándolo, no quería que siguiera suplicando, no aguantaba verlo así-…esta bien…no digas mas…

Jaejoong pego su mejilla a su pecho mas tranquilo al escuchar su respuesta -…Mañana al anochecer volveré…-Susurro, al escucharlo Yunho acaricio su cabello y cerro sus ojos, no podía volver a tomarlo, sentía que si lo hacia el frágil cuerpo de su esposo no iba resistir.

-Esta bien amor…-Yunho susurro convencido de que esa noche debía evitar hacerle el amor.

Yunho recostó a su esposo sobre la cama y lo mantuvo ahí a su lado en sus brazos hasta que el se sintiera mejor y pudiera llevarlo al encuentro con su madre pues no lo pensaba dejar ir solo hasta el camino.

Después de dos horas cuando la luz alumbraba bien fuerte Jaejoong estaba listo y Yunho lo llevo de la mano tratando de convencerlo de que desayunara pero este se rehusaba pues su madre debía estar esperándolo.

La nona apareció y antes que ellos salieran le alcanzo a Yunho una pequeña canasta con algo de frutas, Jaejoong se despidió de ella apenado y luego salio, subió al carruaje y Yunho subió tras suyo.

Cuando este empezó a andar Jaejoong abraso a su esposo estando sentado a su lado, deseaba no bajarse de ese carruaje, no quería llegar, quería que el tiempo no pasara y se quedara ahí con el.

Yunho le alcanzo una fruta y ante la negación de Jaejoong de no comer el casi tubo que obligarlo a hacerlo, pues llevo esa fruta y la puso sobre sus labios para que lo probara, le susurro al oído que era necesario que este bien alimentado para que pueda quedar embarazado.

Al escuchar sus susurros el probo de aquella fruta sosteniéndolo con su mano pues iba ser lo que sea necesario para poder llevar en su cuerpo al hijo del hombre que amaba.

El carruaje se detuvo y Jaejoong se asusto pues ahora debía irse del lado de Yunho, dejo de comer la tercera fruta que llevaba a sus labios, Yunho abrió la puerta y bajo, vio a la Sra. Kim mirando desde la ventana de su carruaje, ella se sorprendió al verlo, hizo un saludo bajando la cabeza Yunho le contesto de igual forma y espero a su esposo para ayudarlo a bajar.

No quería bajar pero no podía evitarlo, respiro hondo cubrió su cabeza con la capucha de su capa y camino para alcanzar la mano de Yunho y bajar, cada paso que daba le dolió en el alma, se asió de su mano y bajo.

Las nodrizas al verlo abrieron al puerta de carruaje.

-Esperen…-Dijo la Sra. Kim deteniéndolas de ir por Jaejoong -…dejemos que se despidan…-susurro y las nodrizas volvieron a su asiento, ella cerro su cortina de su ventana y espero.

Yunho atrajo a jaejoong pegándolo el, lo tomo del rostro acerco sus labios a los de su esposo y susurro.

-Te amo…- Dijo contra sus labios llevando una de sus manos a su pequeña cintura, acercando mas su cuerpo al suyo, Jaejoong llevo sus manos por detrás del cuello de Yunho donde las entrelazo, sus labios se unieron regalándose las ultimar caricias de esa mañana.

-Prométeme que te alimentaras mejor…-le susurro y el asintió con su cabeza acercando sus labios para que fueran estrechados por aquellos labios que amaba que se aferraran a los suyos.

Con pesar sus labios se dejaron de estrechar, Yunho lo abraso y dejo un beso en su frente para después soltarlo y dejarlo ir.

Jaejoong volteo y camino hasta llegar al carruaje de su madre donde se detuvo y se dio la vuelta para mirarlo, las nodrizas bajaron y esperaron a su lado, cuando Jaejoong las miro ellas lo ayudaron a subir y cerraron la puerta del carruaje, miro a su esporo por la ventana mientras su carruaje ya se alejaba.

Yunho permaneció parado ahí hasta que el carruaje desapareció, subió al suyo sintiendo la falta de tener a Jaejoong a su lado y abrasarlo, su carruaje empezó a moverse rumbo a su mansión.

5 comentarios:

  1. Ooooooooooooww!!! Tan linda la mamá de JJ como los esta ayudando para poder encontrarse y así tener a sus hijos ooooooww!!!

    Tenía que ser el jirafon orejudo xD tan coqueto el desgra mmmmmm valla que se dio cuenta de la belleza de la mamá de JJ mmmm sino se hubiera hecho enemigo de Yunho uuuuuuh!! Y ahí si trae consecuencias xD pero así amo a ese jirafon xD

    Ooooooooww!!! Y el YooSu tan bello puro love, ooooowww!! Ahora si empieza su felicidad para los 2 solo falta la liberación y serán felices por siempre...

    Amo esta historia es tan linda y real xD enserio FELICITACIONES ^(OwO)^

    ~sigue leyendo~ ^(6.6)~»

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  2. juro q casi lloro,yoochun con solo tocar el vientre de junsu se dio cuenta que el es el padre y al final le propone matrimonio,q lindo. ojala jae ya este embarazado

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  3. Yo si llore con la historia de junsu! Tan bellos que lindos bellísima pareja !

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  4. me encanta la suegra de yunho ella si que quiere a su hijo y tratara de que sea feliz con el amor de su vida

    sorpresa tan mas agradable que se llevo yunho al encontrar a su adorado jae al encontrarlo en su propia casa esperando que lo abrace ese jae tan desesperado

    y yoochun el hombre mas feliz teniendo a el amor de su vida y el hijo que tendrá dentro de poco que bueno que aclararon todo y estén juntos y mas que le a pedido que se case con el y junsu acepto

    y junsu antes no cometió el error de acostarse con el esclavo así podrá estar a el lado de yoochun y criar su bebe los dos y llenarlo de amor

    y min no mas vio a jae y ya quería comérselo awch lo siento ese dulcecito ya tiene dueño y si hace bien min en fijarse en la madre de jae con el marido que tiene mejor sola y si min llega y le hace el quite con ella que mejor así la madre de jae seria mucho mas feliz con min que con su marido pues min si la tomaría en cuenta y le daría el lugar que se merece le diera amor cariño y cuidaría de ella no la usaría para sus propósitos como lo hace el sr kim creo bueno es que la mama de jae también merece ser feliz

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  5. Ahora toca Changmin al rescate de la madre de Jae hahah xD seria lindos ?¿?¿
    Lo de Yunho y Jae es que esperen un poco mas........
    Wiiii porfin Yoochun se entero del baby pero bueno igualmente se tiene que enterar con la barriguita hahahah Xp

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